Escritos personales

TEXTO 58

Dicen que nos enamoramos de verdad de una sola persona, yo considero lo contrario, puedo asegurar que en muchas ocasiones de verdad me he enamorado, no solo fue una en mi vida, todas vinieron sin manual y yo les di paso, pero no por que el amor sea puro y mutuo significa que nunca tendrá final, los problemas alcanzan, tristemente hasta nos rebasan, lo cual termina en ruptura y en un corazón que sentía todo y por períodos solo latía por hacerlo, ya no lo hacía por amor a nada.

Creí en el amor a primera vista en el primer instante que mi corazón se desvocó la primera vez que alguien mi atención la robó, fue un instante de miedo y de mucha presión, funcionaba tan distinto a como yo era segundos antes de mirarla, ahora solo me concentraba en maniobras para enamorarla. Pude conquistarla, sí, ¿fue una experiencia grata? Sería un cínico si lo negara; absolutamente lo fue, no daré cabida a falsas anécdotas en las que diría que profundamente tomando su mano no me enamoré, como también es verídico que con ese amor primario contra un muro me estrellé.

Si, me cerré de nuevo a creer en ese tipo de sentimiento, quería estar solo, no tener más pena ni por mí, la verdad, no sabía que necesitaba en ese momento, los días grises y las noches solas no las olvidó, siempre las recuerdo, gracias a sentimientos fuertes de oraciones y versos tengo repleto mi cuaderno. Se cerró ese ciclo hermosamente fatal, y como todos y todas prometí que nunca me volvería a enamorar.

Damas y caballeros, el amor y el corazón son una unión feroz, uno llega cuando más lo necesitas o cuando no, el otro es un caprichoso que nos hace tomar decisiones audaces, lo irónico del todo es que nos hace sentirnos felices, y más que eso, nos creemos de todo capaces, ya que cuando tomamos la mano que tanto soñamos sostener dejamos de ser invisibles, en un instante pasamos a ser más que invencibles.

Flechado por segunda vez por una piel blanca, bonita como la nieve pero si no te abrigas bien con su frío te mata, antes daba todo por solo oír su habla, hasta que pasé de todo a su nada, poco a poco dejé de creer en cuentos de hadas. Experiencias primerizas, quizás por eso fácilmente de mi mente no la desligaba, supongo que ese tipo de cosas ocurren cuando solo piensas con tu cuerpo y no con tu mente, terminas hasta dañando tu alma, no por eso digo que me arrepiento, esos momentos siguen libres en mis pensamientos, una linda manera de haber perdido mi tiempo.

Me hice la psicosis de que la tercera era la vencida, donde todo sería bueno, donde nada terminaría, pensé que hacía todo de la manera adecuada, pero no eran esos los planes para mí, cambió a mal de la noche a la mañana, le prometí defenderla a capa y espada, lo que me mantenía firme era cuando me decía que me amaba, que comentaba cuanto me extrañaba, supongo que hasta la más enamorada miente con tan solo tener a quien le hace sentir que vale oro atado a su cama. Pensé que sabría desearme más con la ausencia, supongo que fue lo que la impulso a soltar las riendas, no fue suficiente mi intento de traerla a lo anterior de vuelta, me dijo "ya no más" y solo se fue en un cometa, ahora hasta donde sé encontró la senda correcta.

Ven? No nos enamoramos una sola vez en la vida, amamos cuando enserio sentimos que vale la pena derramar lágrimas por esa persona que en su momento nos robaba una sonrisa, no seas cínico, decir que amaste de verdad no te hace menos, te hace menos ocultar tus verdaderos sentimientos por miedo.

No cabe en mí la felicidad de que hayan encontrado lo que las completara, si fuera posible, me gustaría ver hasta que les hace brillar la mirada, pues haría que mi misión de puente a su felicidad haya sido completada.

Aquí estoy ahora, siendo feliz, con una nueva persona, haciendo lo posible para poderle cumplir, ya que estuvo siempre desde su llegada dándome ánimos, ahora de manera inesperada estamos encaminados, el mundo conquistando.

No cabe en mi la cantidad de felicidad que ella me entrega, tiene el poder de a mi mar de problemas hacer que calme la marea, la vida si que me dio una sorpresa, desde ahora en adelante nunca dejaré que agache su cabeza, sería embarazoso de mi parte hacer que se le caiga la corona a mi princesa.

Esto no cesa, es más, siempre aumenta, el amor siempre prospera donde con empeño se riega, no debemos de cerrarnos, a las oportunidades de ser feliz siempre déjale la puerta abierta, en cualquier momento lo verás y lo sentirás, tan solo ten paciencia.

Keiv.