TEXTO 88

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Dices querer estar los dos juntos, pero tus palabras con tus acciones no concuerdan.

 Me haces ver que lo soy todo y luego que no valgo la pena.

 Afianzas que no sabes lo que quieres con certeza. 

 Quieres, pero no puedes, eso es lo que comprendo.

 Dejas tu alma pegada en al pasado como yo la mía la dejo en mi cuaderno. 

 Quieres avanzar, pero encuentras cualquier pretexto para retroceder. 

 En un momento te derrumbas, en otro vuelves a ser fuerte. 

 Son síntomas de un alma endeble.

 Por consiguiente, tu voluntad se restaura al mismo compás que se quiebra.

 No te afecta lo del exterior, si no los recuerdos espontáneos que a tu mente llegan.

 Te encadenaste a quién en ti vio solo un mero brillo.

Mientras yo te veo como una preciosa constelación con sus imperceptibles asterismos.

 Que yo noté, por encima de todo lo que los demás de ti pudieron conocer.

 Tienes terror de ti mismo. 

 Por tu inaceptable inestabilidad.

 Te pierdes de ser feliz una buena oportunidad.

 Así que en el fondo asumo que no buscas corregirlo.

 No sé si tengas la convicción o las ganas de conseguirlo.

 Pero estoy seguro de que para hacerlo tienes un motivo.

 Tú lo sabes y yo lo sé. 

 No hace falta que lo diga a los cuatro vientos.

 Quedará por siempre plasmado de modo que lo leas entre líneas en cada uno de éstos versos.

 Ese recordatorio de lo ocurrido es un sentimental vaivén. 

 Cada que quieres seguir hacía adelante te pierdes el tren.

 No por ti, no por mí, te paraliza su presencia, te frena la vieja imagen de, bueno, ya sabes quién.

 Que la tendrás siempre presente, aunque me joda que haya sido para ti único.

 Pero prométeme, prométete, aunque yo odie las promesas, que saldrás de ese bache y que no distorsinará tu futuro.

 Dando aliento a quién roba el mío.

 Es una guía en mi libre albedrío. 

 Su fuerza se convierte en energía.

 Aunque su sinceridad la desintegró este planeta plagado de hipocresía.

 Aún así, de sentimientos está plagada mi poesía.

 ¿Qué tan gélido puede estar tu corazón frío?.

 ¿Qué tan lejos mi léxico moverá las piedras de mi camino?. 

 ¿Qué tan inédito debo ser para persuadir tu instinto?. 

 Espero tengas éxito, espero que también yo, sea o no sin ti, sea o no contigo. 

 Keiv.

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