TEXTO 85

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Es cierto lo que argumentas, soy un intermediario de problemas.

 No eres la primera que lo comenta. 

 Y tampoco la última que lo comprenda. 

 Lo siento, pero no es por ser molesto.

 Lo intento, mejorar ese problema, que está anclado a mí desde mi nacimiento. 

 De ser menos irritante aún no encuentro la manera. 

 Lamentablemente esa faceta no le agrada a cualquiera.

 Si, entiendo que puedo ser un severo dolor de cabeza.

 Trato de disfrazarlo con mis mejores versos e inagotables letras. 

 Me lo dijiste "encuentras siempre el modo de joder a alguien". 

 En otro momento te fuera importado, pero de tus palabras no te retractaste.

 Mucho menos te va a afectar que mencioné que con ese comentario me dañaste.

 Ese "jodes aunque no lo intentes" desfila en mi consciencia repetidamente como una caravana.

 ¿Por qué me afecta que así me dirigieras la palabra?.

 ¿Es tu culpa por hacer que tanto me importes o yo por dejar que tanto me importaras?.

 Sabía que no era un santo, pero no creí que llegase a ser algo tan dañino.

 Quienes se sienten más puros de corazón, son aquellos que no tienen la suerte de poseer el mismo. 

 Como si se percibieron humildes pero emanan egocentrismo.

 Quise portar una aureola, pero eso no lo merecen aquellos definidos como malignos.

 Pedí perdón por lo que pude haber hecho antes que fuera tarde. 

 Recibiste mi mensaje, mentalmente lo leíste.

 Luego de captar el nombre del remitente a la papelera lo mandaste. 

 ¿Cúal fue mi cruz, cúal fue mi error?.

 Siento que mi principal pecado es haber sido yo. 

 Desvío conexiones. 

 Daño corazones tercearios.

 Ofrezco lealtad y en tal punto me sueltan la mano.

 Pido disculpas por el constante martirio.

 Pero venir a causar lío no fue mi plan desde el inicio.

 Quería reparar las grietas.

 Meditar con el unísono y el existir de la marea.

 Encontrar lo que me completa. 

 Muchos ojos en mi que se han posado si que me han culpado.

 Quiero mi paz, y solo reparto caos.

 Ojalá yo fuese un simple diluvio.

 O quizás un mal trazado dibujo.

 Trato de ser correcto pero soy un corrupto.

 Quiero llegar en el momento preciso pero termino siendo un obstáculo inoportuno. 

 El entorno poco a poco se degrada.

 Mientras hago que surgan estás palabras.

 Al igual que espero el alba.

 Para tener que observar y que no se traten de esas acusadoras miradas. 

 Siento miedo, que remedio.

 Los comentarios son homicidas, yo me alejo de la masacre con mi cuaderno.

 Si me he de sentir débil, la fuerza la encuentro en la redacción. 

 Por mi sangre corre tinta, mi cuaderno es mi arma y mi lápiz es mi inagotable munición. 

 Para vencer mi terror.

 Y mostrar que lo que soy no es sólo un mero error.

 Keiv.

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