TEXTO 61

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Cae en mi conciencia el peso de las responsabilidades, momento de dejar de hacer cosas banales, debo esforzarme como un padre que hace todo para que a su hijo nunca le falten pañales, supongo que llegó otra vez el momento de superarme, instintivamente solo quiero y quiero, aunque tristemente sea muy poco mi sustento, pero para eso me esfuerzo, para eso es que me exigo, es que ya me veo en mi futuro viendo a lo lejos desde un balcón con una copa de vino.

En este momento un ser cotidiano que gracias a Dios al menos tiene la comida para sus hermanos, un chico corriente que en su casa ya le llegó el tiempo de meter la mano, sacar a relucir la fuerza y audacia de ser primogénito, y mostrarle al mundo que la victoria y la grandeza está en mi código genético, moviendo con mi fe las montañas de un modo ético, moralista por sostener siempre mi palabra, siempre seré conocido por ese mérito.

Haciéndole frente a esta actualidad que solo sueños derrumba, que hasta te quita la oportunidad de ser en tu propia casa una nueva ayuda, pero este intérvalo de tiempo y líos solo llena mi mente de dudas, ya que si me esfuerzo por algo tengo que detener otro proceso, y si hago otro es el mismo resultado, dejemos pasar el tiempo, pero tampoco dejemos que él por nosotros tome el mando, tú eres el que dirige en las aguas de la vida tu propio barco, no dejes que tus sueños y metas fácilmente se te escapen de las manos.

Todos tenemos la capacidad de avanzar, tú decides si crecer o entre el miedo divagar, es el pensamiento lo que nos diferencia de la muchedumbre, por eso aunque te esfuerces por gritar entre la masa no tienes para ser escuchado el suficiente volumen, como un pez peleador y renegado de su cardumen, hago lo que está a mi alcance para que la realidad no siempre me derrumbe, a veces hasta para salvar a quienes no tiene suficiente fuerza propia me meto en lo que no me incumbe, tristemente aunque no quieran con lo que soy ahora hago que se frustren, hago lo que me hace ser feliz no me importa que te disguste, vengo de abajo y soy el que a la nueva ideología de la generación actual pensamientos verdaderos y puros les infunde.

Aquí ahora todo se nos escapa, el amor verdadero, los sueños y las ganas de hasta vivir en tu propia casa, todo por arrogancia, pena y malas palabras, que mal que así todo se caiga, pero sobre todo hasta lástimamos a quien nos ama, y viceversa.

Todo por una inútil desconfianza, debido por quienes vinieron antes y te desgarraron hasta el alma, catalogando que todo el mundo es propenso a dañar, yo soy propenso más que todo a quererte siempre y si te vas nunca saber olvidar, superar si, pero los recuerdos no se borran jamás, la mente es poderosa, cuando la sepamos usar adecuadamente el cambio radical se notará.

En tierra de guerra, tanto exterior como de manera interna, todos queriendo triunfar cuando ni se esfuerzan, pensando que con solo ser notado por estúpidas y frívolas actitudes pondrán el mundo de cabeza, pero eso no me llena, prefiero darle un giro de 360, para que cambie la manera en la que muchos individuos piensa, y así por fin lograr que este mundo no perezca, y hacer que todos los frutos de nuestros esfuerzos siempre crezcan, toma nota que te enseña un tipo de la generación pérdida lo que se perdió de la vieja escuela.

Keiv.

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