Capítulo Veintidós. No Hay Camino

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Lloré mientras volvía a casa. No quise visitar a nadie, excepto a Lazard.

-¿Y Rubén?.

-Ha tenido que quedarse en Sudáfrica.

-¿Y te deja en tu estado?.

-¿Cómo sabes lo de mi anemia?.

-Tengo un sexto sentido para diagnosticar embarazos, Helen. Tendrás anemia pero es algo normal en estos casos.

-¿Embarazo?.

-¡¿Embarazo?!-exclamó Hassan-.

Primero de todo: ¿cómo que embarazada?. ¿No tenía anemia?. ¿Y qué hacía Hassan en la consulta?.

¡Ay, Helen! ¿Qué has hecho?. ¿Cómo has dejado escapar al padre de tu hijo?.

Rubén, te echo tanto de menos....

-¿Qué haces aquí, Hassan?.

-Parece que los hermanos han venido a contarme sus penas-intervino Lazard-. Os daría una copa de whisky a cada uno pero ya sabéis lo que opino del alcohol.

-Estaría bien un copazo-afirmé-.

-¡Helen!. Un poco de cabeza. ¡Estás embarazada!. ¿Y dónde está el padre?.

-En Sudáfrica perdido en una aldea. No podía haber elegido mejor momento para irse a hacer ayuda humanitaria, ¿verdad?.

-¿Él lo sabe?.

-¿Cómo va a saberlo, Hassan?. ¡Si yo misma acabo de enterarme!. Aunque tendré que hacerme unas pruebas antes. No es que desconfíe de tí, viejo tío pero aún no termino de creerlo. ¿Y tú qué haces aquí?.

-Laura, amenaza con dejarme.

-¿Y no estarías mejor sin ella?. Sé que es una pregunta difícil pero, ¿para qué sufrir?.

-No lo sé, Helen. Supongo que Gabriel es un niño tan frágil que no quiero dejarlo solo.

-Tonterías.

-Bueno, querida hermana, ¿qué es lo que vas a hacer?.

-Tendrás que llamar a Rubén e informarle-Lazard intervino con su cordura habitual-.

-Pues lo tengo difícil porque sólo tiene acceso al teléfono una vez al mes. Supongo que la mejor opción será escribirle.

Dos meses después...

-¿Qué tal, Helen?. ¿Aún no has sabido nada de Rubén?.

-Nada, Hassan y esto avanza. Tengo buena genética pero no puedo esconder por más mi embarazo.

-Ni tu tristeza.

-¿Cómo no hacerlo?. En correos dicen haberle entregado la carta pero no he tenido noticias de él desde que nos despedimos en el aeropuerto. Temo que no quiera saber de nuestro hijo, quizás sea demasiado para él y no quiera dejar su labor para volver a Marruecos. No sé. Se me pasan montones de ideas por la cabeza día tras día. ¿Y qué pensarán mamá y papá?. Su responsable hija casada en secreto y embarazada de un hombre que no aparece.

-Ese será el menor de tus problemas.

-¿Cómo?.

-Casèmosnos.

-¿Estás mal de la olla, Hassan?. Ambos estamos casados.

-No por mucho tiempo. Hoy Laura desapareció de la casa llevándose a Gabriel con ella. Sólo dejó una nota. Sus abogados me informarán del régimen de visitas.

Más que Hermanos((COMPLETA))#3Donde viven las historias. Descúbrelo ahora