🐾REIKA

37 Feromonas o algo así

——No seas tan dura con él.—— por fin Max intervino en mi monólogo sobre lo mal que se había comportado Ayax.

——No tiene sentido que se ponga así porque yo huela a algo que él no conoce.—— cerré el grifo y abrí la cortina de la ducha.—— Pásame el albornoz, porfa.

——Está estresado, es el alfa y... se siente responsable de tu bienestar.—— terminé de secarme y comencé a vestirme, Max parecía distraído y me hacía gracia, pero no por ello iba a olvidar mi enfado.—— No quiere parecerse a su padre.

——¿De qué hablas?—— él se mordió el labio, no sé si era porque había hablado demasiado o encontraba irresistibles mis bragas del monstruo de las galletas.

——Su familia está muy ligada a la tuya.—— fruncí el ceño de nuevo, si seguía ejercitando así ese músculo iba a terminar pareciendo un cromañón.——Su abuelo marcó a tu abuela y su padre marcó a tu madre.

——¿Eso significa que somos hermanos?—— sentí náuseas al decirlo en voz alta, incluso me arrodillé junto al váter dispuesta a vomitar.

——No, el único hermano que tiene Ayax es Hades.—— parecía que aquel era el día de las sorpresas para mí.——Son hijos de distintas prostitutas, no es que le tengan especial cariño a sus madres.

——¿Así es cómo los hombres lobo tienen hijos?—— parecía una forma poco romántica de reproducirse.

——No siempre. Mi madre era una india comanche, por ejemplo.—— notó mi especial atención en la palabra "era"—— Murió atacada por otra manada de lobos.

——¿Eso es normal?—— desde luego, a mí, no me parecía nada normal.

——Estar marcada hace que el resto de la manada pierda el interés, pero atrae aún más a otras manadas.—— llevaba mucho tiempo mirándome en el espejo y no notaba ninguna diferencia.——Es algo científico, feromonas o algo así.

——¿Qué manadas hay por aquí?—— pensé en comprar una navaja, pero seguro que yo sería la primera en herirme con ella. Sería mejor usar mis superpoderes, como el de supersensibilidad, muy útil hasta ahora.

——Solo la nuestra.—— antes de que Max pudiera volver a abrir la boca, Ayax apareció con su ropa hecha trizas y el pelo revuelto.

——Perdón, no debí tratarte así y no volverá a pasar.—— eso sí sonaba como una disculpa.——¿Tienes algo de ropa que prestarme? No me ha dado tiempo a quitármela antes de transformarme.