Amor Sin Rodeos© (✔️)

Capítulo 22

Lo acario a través de su pantalón y él gime mi nombre.

—Sam— susurra, con voz ronca.

Miro sus ojos, de un azul casí oscuros por el deseo, él lleva sus manos a mis pecho acariciandolos mientras busca mi boca. Desabrocho la correa y bajo la cremallera sin dejar de besarlo, entro mi mano para tocarlo.

—Quiero probarte una vez más— le informo mientras humedesco mis labios, él se acomoda, pegandose solito de la pared y tomo eso como un permiso para hacer con él, lo que yo quiera.

Me dá un beso.

—No puedo resistirme a tí, Sam.

Sonrio y beso su boca deborandola, luego me arrodillo justo como él hizo y bajo su pantalón con ropa interior incluida.
Miro su miembro erecto tan lindo y grande justo como lo recordaba, pongo mis manos sobre sus piernas y lo introduzco en mi boca sin siquiera tocarlo, lo escucho gemir y automáticamente pone sus manos en mi cabello, bajo lentamente por su longitud, hasta llegar casí a la base, pero es demasiado grande para caber por completo en mi boca pequeña, así que llevo una mano ahí, al espacio donde no puedo llegar, la subo y bajo, en armonía con mi boca, repitiendo el proceso varias veces.
Siento a Jared apretar mi cabello y subo la mirada hacía él está recostado de la pared con los ojos cerrados y se vé como un Dios, un Adonis siendo torturado, eso me incita a subir la otra mano y acariciar sus pectorales un poco marcados mientras, sigo deleitandome con su miembro en mi boca. Él baja la cabeza, me mira y con un movimento sensual de sus caderas me indica que quiere que vaya más rápido, y así lo hago. Acario y chupo su miembro subiendo y bajando con más rapidez, lo escucho gemir, un sonido tenso y necesitado y sé que está cerca, llevo mi mano que está en su abdomen hasta sus bolas para acariciarlas, se sienten suaves, delicadas, y es el detonante de su explosivo orgasmo, saco su miembro fuera de mi boca, y llevo fuera mi lengua para sentir los chorros de su semen caliente cayendo sobre ella.

Y maldita sea si no me siento como una actriz porno en este momento, trago todo sintiendo gotas por mis pechos.

Me paro y llego hacía él quién trata de quitar los restos de su semen de mis pechos.

—Está bien— digo— dejalos ahí.

Él me mira y pasa el pulgar por mi boca.

—No hacíamos esto antes Sam— dice— ¿quién te enseñó hacer esto?— pregunta mirandome con las cejas fruncidas, veo un brillo de posesión y temor en su mirada, como si no quisiera saber que he estado practicando con alguién que no fuera él.

Sonrío, mirandolo a los ojos.

—Nadie tiene que enseñarme para saber— le digo, me encojo de hombros— aprendí, desde la otra noche que pasamos juntos.

Él se queda mirandome no muy convencido pero de todas formas asiente y me besa.

Segundo después estamos poniendonos nuestras ropas, y al cabo de un minuto decidimos salir, pero justo cuando Jared va a abrir la puerta, unas voces nos detienen.

Jared me hala hacía él y pone una mano en sus labios en señal de hacer silencio, asiento y nos quedamos quietos.

—¿No crees que la chica, Samantha está muy buena?— pregunta uno de las voces, miro a Jared rápidamente, este está frunciendo el ceño mirando en la dirección donde posiblemente pueden estar esas personas.

—Por supesto hermano— dice el otro— tine unas nalagas para comerselas.

Jared hace ademán de salir, pero me apresuro y agarro su brazo haciendo un gesto negativo con la cabeza, se queda quieto, ante mi señal de no salir y miro por la rendilla de la puerta, están poniendo unas sillas de montar ensima de una cuadra mientras continúan hablando.