Sus besos descendieron por mi cuello y eché mi cabeza hacia atrás ahogando un gemido, en un movimiento me tumbó de espaldas en la cama y se colocó sobre mí besando con completo descaro mis pechos y deslizando una mano hasta mi feminidad, solté un gemido y mordí mi labio inferior deleitándome en lo que me hacía sentir, cuando de repente hizo un recorrido de besos hasta mi vientre y metió su cabeza en mi entrepierna.
—No, Calvin —susurré en un hilo de voz, temía que no pudiera llegar al orgasmo, no quería tener que fingir otra vez como cuando estuve con Héctor.
Sin embargo la intensidad de Calvin era muy distinta, mordí mi labio inferior para intentar no gritar, me aferré de las sabanas y mis caderas comenzaron a moverse, me estremecí mientras el calor invadía mi cuerpo.
Lo extrañaba demasiado.
Calvin comenzó a tocarme con sus dedos mientras subía por mi cuerpo llevando una serie pequeños besos, no podía parar de gemir, mis piernas comenzaron a tensarse mientras un cosquilleo llenaba todo mi cuerpo.
— ¿Acaso Denver te hacía sentir lo que yo te hago sentir? —susurró a mi oído.
Negué con la cabeza, nunca nadie me hacía sentir como él.
Lo miré a los ojos cuando él deslizó su nariz por la mía antes de volver a devorar mi boca, casi rozaba el cielo. Cuando mordió mi labio y luego mordisqueó mi cuello, enterré mis uñas en su espalda.
—Calvin —susurré a su oído mordiendo con fuerza su hombro cuando sentí el placer llenarme, todo mi cuerpo punzaba, mi respiración estaba acelerada disfrutando de los segundos donde solo existía éxtasis.
Había extrañado tanto su manera de tocarme.
Mi corazón latía con fuerza, observé como él se colocó entre mis piernas y acaricié su cabello ante la anticipación, todo mi cuerpo se estremeció cuando lo volví a sentir dentro de mí por completo, ahogué un grito.
Dolía.
Cerré los ojos con fuerza sintiendo mis ojos llenarse de lágrimas.
— ¿Estás bien? —murmuró sin atreverse a mover, quise decir que no, pero no quería que se detuviera, se sentía incluso diferente a la primera vez que estuvimos juntos, más intenso, más doloroso.
—Es solo que duele un poco —susurré entre abriendo los ojos, Calvin pareció confuso, sus ojos verdes brillando ligeramente.
—Tal vez porque yo lo tengo más grande que Denver —murmuró, no parecía bromear, parecía hablar enserio—, lo siento, después podrás acostumbrarte.
Sonreí ligeramente y negué con la cabeza, este hombre tenía un ego muy grande.
—Nunca estuve con Denver —dije—, nunca estuve con nadie más, solo tú.
Calvin alzó sus cejas sorprendido, una sonrisa invadió su rostro y rejuveneció su aspecto, mientras comenzaba a moverse ligeramente.
—Eso es lo más hermoso que me has dicho —dijo.
Cerré los ojos con fuerza y cuando volvió a besar mis labios ignoré el dolor que sentía, solo entonces me llené del placer que comenzaba a adquirir mi cuerpo, nuestros gemidos llenaban la habitación a medida que aceleraba sus movimientos, hasta que lo sentí ponerse tenso y chupé su cuello con fuerza antes de dejarme ir, Calvin se aferró a mí y lo abracé acariciando su cabello cuando lo sentí estremecerse para derrumbarse sobre mí completamente agotado.
Nuestras respiraciones y nuestros corazones latían al mismo ritmo, siempre era perfecto, con él todo se sentía perfecto.
Te amo.
ESTÁS LEYENDO
Ella Fue Mi Crush Primero(#2) [Completo]
Ficção Adolescente∆Segunda parte de: Él fue mi crush primero. Sinopsis: Mi mejor amiga decidió que sería buena idea organizarme una cita a ciegas, probablemente creía que por mi carácter insufrible que muchos clasificarían como: "Amargado" me quedaría solterona, pero...