Lo que la mentira esconde - Yoonkook. Yoonmin. Jikook.

Capítulo 2

J

ungkook se sentía mucho mejor caminando por esos largos pasillos de escuela, él solo se enfocaba en ir a su salón sin importarle que varios alumnos caminaran de un lugar a otro casi empujándolo.

—¡Kookie! —El nombrado volteó y ya tenía a su mejor amigo abrazándolo—. ¡Kookie! ¡¡¡Kookie!!!

—¡Tae, por Dios! ¡No me grites en el oído! —Jungkook se cubrió su oreja.

Trató de separarse pero el agarre de su amigo era más fuerte.

—¿Pensabas entrar al salón sin mí?

—Siempre llegas tarde.

—Si como no, llegué a tiempo pero te vi como alma que lleva el Diablo y tuve que correr para buscarte ¿Por qué caminas tan rápido?

"Por mi hermano"

—Por nada, solo quería llegar.

—Pero si te vi con Yoongi, traté de acercarme pero saliste del auto demasiado rápido, pensé en gritarte pero seguro que no me escucharías y... ¡Por Dios santo! ¿Qué te pasó en la cara? —Su amigo no había notado los golpes que Jungkook tenía ya que empujaba a uno que otro alumno mientras caminaba.

Diablos, Jungkook había olvidado los golpes en su cara. Taehyung hacía demasiadas preguntas el lunes en la mañana. Por más que Jungkook quisiera acostumbrarse no podía, odiaba que su amigo fuera muy preguntón.

—Trataron de asaltarme... —Mintió.

—¿Asaltarte? ¿Dónde?

—Por mi casa.

—¡Diablos, se ve horrible la herida, por Dios tu ojo!

—¡Tae, deja de gritar!

Jungkook no sabía que le molestaba más, el dolor en su cara o los gritos de su amigo.

—¿Le dijiste a Yoongi?

"Sí, él lo sabe todo"

—Sí, dice que debo tener más cuidado.

—Él se encargara, ya sabes cómo es tu hermano, siempre te cuida ¿Te duele?

"Sí"

—No.

—¿Caminabas así porque no querías que te viera? —La voz de su amigo sonaba cada vez más alarmante.

A Jungkook le parecía gracioso que Taehyung se preocupara por él, aunque a veces prefería no dar explicaciones.

—Por nada Tae, no importa, el punto es que ya estamos juntos y debemos ir a clase.

—Es verdad, vamos.

Jungkook caminó frunciendo el ceño, parecía que su amigo no lo iba a soltar mientras llegaban al salón. A veces Jungkook se preguntaba por qué su mejor amigo tenía esa actitud.

—Debemos entrar o el profesor me sacara de clases y no quiero darle mi dinero a Taeyang, no hoy que hay pastel de Oreo en la cafetería.

—No entiendo por qué no le dices algo a Jin o a otro profesor.

—Sabes bien que no diré nada, no quiero que me rompan la nariz de nuevo.

—Te lo ganas por no decir nada.

—Al contrario Kook, si digo algo me ira muy mal y ahí sí que me ganare que me rompan la nariz y algo más, pero no tienes de que preocuparte, mi dinero estará a salvo hoy para comprar golosinas y no llegar a manos de Taeyang.