Vivir en Londres no es tan fácil, apenas llevar un año y medio aquí, se siente diferente y raro, no en un mal sentido. Sino que apenas se sobre este lugar.
La ciudad de Londres, tan triste y brumosa en invierno, tiene también sus días de esplendor...
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Jueves / 22:56 pm
Acabamos de llegar a la fiesta, el recorrido en metro fue relativamente corto, o eso parecía, por que en él nos encontramos con un grupo de chicos que también salían de fiesta y nos ofrecieron unos tragos de sus botellas.
Fueron tan amables que hablamos todo el trayecto mientras bebíamos y reíamos.
A lo lejos en el bar de Jon's logramos divisar a nuestro pequeño grupo en unas de las mesas del fondo.
—Holaaa—dijo Nick alargando la "a" y llamando la atención de todos, al parecer ya estaba borracho.
Saludamos y nos sentamos junto a ellos en la mesa. Como por arte de magia Max ya nos dejaba a cada una una cerveza negra en la mano.
—Chicas quiero presentarles a Mercy, ella es la chica de quien Mia contó—Max señala a la chica rubia que tiene sentada al lado y aprovechando para darle otra miradita.
Que descarado.
—Hola—saludo tímida, parecía serlo pero también parecía buena chica, con Madd la saludamos presentándonos y seguimos bebiendo mientras hablamos todos juntos.
........
Viernes / 03:06 am
Ya no se ni cuantos tragos me he tomado pero se que todo ya me esta empezando a dar vueltas y me siento para la mierda. Desearía irme pero Tom se comprometió para volver con nosotras, se que la está pasando bien y no quiero sacarlo de aquí por mi estupido estado en el que me encuentro.
Al rato llego Mia a mi lado dándome otro vaso más y sonriéndome. Se que no doy más pero aun así me lo bebo como puedo y sigo bailando, por un momento mis pies ya no dan más y piden que me arrastre hasta una silla o algo para descansar, me tambaleo hacia algún lugar del bar y llego hasta tocar algo blando bajo mis pies, cuando creo que es el sillón, me tiro y descanso los ojos.
Maldita sea, estoy tan mareada. Río sin razón.
En una que abro los ojos veo a Maddie acercarse y llega para sentarse a mi lado, Confirmó que es ella cuando escucho su voz y huelo su perfume que tanto le gusta y que le regale en su cumpleaños.
—¿Estas bien?—la escucho decir. Yo me tomo mis segundos para repetir la pregunta en mi cabeza, memorizarla y responder.
De maravilla estoy.
—Estot perfectaaa—me cuesta hasta hablar y dudo si lo dije en mi cabeza o en el mundo real. Que loco. Rio por encima de la musica