Karen estaba a punto de darle la mano a Kid cuando, sin previo aviso, alguien les interrumpió.
-Karen. -La chica se sobresaltó y apartó la mano para mirar a la persona que la había llamado mientras Kid chasqueaba la lengua. Law estaba en el umbral de la puerta que daba al balcón mirando a ambos piratas muy, pero que muy enfadado. En todo el tiempo que habían estado viajando juntos, la pelinegra no recordaba haber visto al capitán de los Hearts de esa forma. -¿Se puede saber qué demonios estás haciendo aquí con Eustass-ya? -El cirujano se acercó rápidamente a donde estaba la chica, pero antes de que este tuviera tiempo de hacer nada, Kid se interpuso entre ambos mirando envenenadamente al recién llegado.
-Interrumpes una conversación importante, Trafalgar. -Le espetó amenazadoramente.
-Tienes tres segundos para quitarte de en medio y alejarte de mi estratega, Eustass-ya. -Amenazó Law.
-¿Tu estratega? -Kid rió para luego girarse hacia la chica. -Creo que después de esta noche ya no sigue siendo "tu estratega".
-¿Cómo dices? -Law había arqueado una ceja y había dirigido su mirada a Karen pero esta había girado su cabeza a un lado, enfadada. -¿Karen? ¿Me puedes explicar qué está pasando aquí?
-Le ofrecí que se uniera a mi tripulación y estaba a punto de aceptar hasta que nos interrumpiste. -Volvió a interrumpir el pelirrojo. Law levantó las cejas sorprendido, la verdad es que de todas las posibles respuestas que se le habían pasado por la cabeza, esa ni siquiera la había contemplado.
-¿No vas a decir nada? -El cirujano se dirigió directamente a la pelinegra y esta, tras soltar un suspiro, se giró para mirarle.
-Simplemente pensé que, después de lo que me dijiste esta mañana, la única forma de que todo vuelva a la normalidad para vosotros es que me vaya. -Law sintió una punzada en el pecho, ¿culpabilidad quizás?
-Eustass-ya déjanos solos un momento, tengo que hablar con ella.
-¿Huuh? -El pelirrojo frunció el ceño molesto. -¿Primero nos interrumpes y ahora me pides que me vaya? -Karen estaba a punto de interponerse entre ambos piratas antes de que comenzaran a pelear entre ellos, sin embargo, alguien se le adelantó.
-¡Karen-san! ¡Law-kun! -Letty se encontraba en la puerta del balcón cogiendo aire, los pelos que tenía recogidos en una elegante coleta por la mañana ahora caían por su espalda un poco rebujados. -¡Oh! ¡Eustass Captain Kid también está aquí! -La joven se llevó una mano a la boca sorprendida por ver a tres piratas tan importantes como los presentes hablando juntos delante de ella, pero sacudió la cabeza y miró seria a los presentes. -Un grupo pirata que se hospedaba aquí está atacando el puerto y el resto de barcos, el cuerpo de seguridad del Resort ha sido vencido y mi padre ha dado permiso para que defendáis la isla y vuestros barcos.
Los tres piratas se miraron entre ellos procesando la información que acababan de recibir, Law fue el primero en reaccionar.
-Me adelantaré. Karen, quédate con la señorita Letty-ya. -La chica levantó una ceja y saltó de la barandilla para quedarse de pie enfrente del cirujano con las manos apoyadas en sus caderas.
-¿Disculpa? No puedes decirme lo que tengo o no tengo que hacer.
-Sigues herida -Law señaló el pie aún vendado de la chica -y conociéndote acabarás más herida aún. -Y sin nada más que decir, Law desapareció con un Room. Karen se quedó en silencio mirando hacia donde se había encontrado el capitán de los Hearts unos segundos antes.
-¿Es que acaso le vas a obedecer? -Kid se acercó a la chica mirándola con los brazos cruzados.
-Ni en sueños. -El pelirrojo sonrió de medio lado.
-Eres una chica mala, ¿eh? -Karen puso los ojos en blanco.
-Lo que sea... Letty, ¿estarás bien por tu cuenta? -La joven asintió varias veces.
-Aye Karen-san, no te preocupes por mi.
-De acuerdo. Ve y escóndete en un lugar seguro, es peligroso estar por aquí, iré a buscarte cuando todo haya acabado.
-Pero el hotel es muy grande, ¿cómo sabrás donde estoy?
-Confía en mi.
-Está bien, ten cuidado Karen-san. -Y después de desearle suerte a ambos piratas, Letty volvió a entrar al hotel a paso ligero.
-Bien, una vez resuelto este problema será mejor que nos pongamos en marcha. -Le dijo la chica al pelirrojo. Este sonrió maliciosamente.
-Sí... -Karen comenzó a caminar hacia dentro pero Kid la cogió de la cintura y la arrastró con él hacia la barandilla del balcón.
-¿¡Pero qué demonios estás haciendo pedazo de... -Antes de que Karen pudiera acabar de insultarle, Kid apoyó su mano libre en la barandilla y, cogiendo impulso, saltó por encima de esta, haciendo que los dos se precipitaran a gran velocidad hacia el suelo.Law había hecho una pequeña parada por su habitación para coger su nodachi y luego había salido corriendo en dirección al puerto, si el submarino tenía una mínima rozadura, el cirujano se haría cargo de darle su merecido a quien fuera. A medio camino, el capitán se encontró con el resto de su tripulación.
-¡Capitán! -Raiden fue el primero en ver al pelinegro.
-Hemos escuchado lo que estaba pasando en el puerto y estábamos de camino para ayudar. -Explicó Sachi una vez estuvieron todos juntos.
-Está bien, en marcha.
-¡Osu! -Gritaron todos siguiendo las ordenes de su capitán.
Todos comenzaron a correr en grupo con Law a la cabeza, Aki iba en medio del grupo preocupado por el submarino hasta que de repente recordó algo y, acelerando el paso, se acercó al cirujano.
-Capitán, ¿dónde está Karen? ¿Conseguiste hablar con ella? -Este tardó en contestar pero finalmente lo hizo.
-La encontré hablando con Eustass-ya. -Aki arqueó una ceja al ver la cara de preocupación del pelinegro pero no dijo nada. -Aki... no sé si después de esta noche Karen seguirá viajando con nosotros.
-¿¿¿¡¡¡EEEHHHH!!!??? -El rubio soltó un grito de sorpresa que hizo que el resto de sus nakamas los miraran sobresaltados.
-¿Pasa algo capitán? -Preguntó Bepo desde atrás.
-No Bepo, no te preocupes. -Le reconfortó el cirujano antes de girarse a Aki. -No le digas nada a ninguno de los chicos por ahora, ¿de acuerdo?
-A... aye... ¿pero cómo que no sabes si Karen seguirá viajando con nosotros? -Susurró el joven.
-Eustass-ya le ofreció la posibilidad de viajar con su tripulación y después de lo que le dije a Karen esta mañana en el bosque se está replantando irse de verdad. -Explicó Law.
-¿Qué? Tienes que hablar con ella y disculparte capitán, no puedes dejar que se vaya.
-Tsk, lo sé.
-¿Dónde está ahora?
-Le dije que se quedara en el hotel. -Aki se quedó mirando al pelinegro con el ceño fruncido.
-Espero de verdad que no te creas que te va a hacer caso, capitán. -Este solo suspiró.
Kid y Karen corrían en dirección al puerto lo más rápido que podían, la chica cojeaba un poco debido a su herida en el pie y Kid tenía que seguir su ritmo.
-¡Como vuelvas a hacer algo así sin avisar voy a MATARTE! ¿¡Me estás escuchando hombre neardental!? -La pelinegra le lanzaba miradas envenenadas a Kid mientras este reía a su lado. El pelirrojo había saltado del balcón sin un plan de aterrizaje y si no llega a ser por las habilidades de Karen y sus rápidos reflejos ambos estarían ahora hechos papilla. -¿¡De qué te ríes, baka!?
-Relájate, mujer. Después de todo ha sido divertido.
-¿¡DIVERTIDO!? ¡Podríamos haber muerto!
-Pero no lo estamos, ¿o sí?
-No, pero me sé de uno que podría estarlo en cualquier momento. -Gruñó Karen. Demonios, ¿esto es lo que Law tiene que aguantar conmigo a veces? Debería disculparme con él cuando lo vea.
Tras varios minutos más de insultos por parte de la chica y carcajadas por parte del pelirrojo, ambos llegaron al puerto. Karen miró a su alrededor, todo estaba envuelto en llamas y caos, había pequeños grupos de gente corriendo de un lado a otro y los más valientes estaban en la zona de los barcos intentando apagar las llamas.
-Cómo le hayan hecho algo a mi precioso barco les mataré. -Susurró Kid en un tono amenazante.
-¡Capitán! -Ambos piratas se giraron a tiempo de ver a la tripulación de Kid acercándose a ellos. Una vez estuvieron frente a frente, Karen los observó detenidamente a cada uno de ellos. Son todos rarísimos. Pensó. -¿Quién es ella, capitán? -Preguntó uno de sus nakamas, tenía el pelo azulado y Karen pensó en que probablemente tenía una de las caras más raras que había visto en su vida.
-Esta mocosa es Portgas D. Karen, es nakama del viejo Shirohige pero pronto viajará con nosotros. -La joven levantó una ceja.
-Aún no he aceptado tu propuesta. -La tripulación de Kid se la quedó mirando hasta el punto en el que la chica se cruzó de brazos incómoda.
-¿Qué estáis mirando? -Entonces el hombre de pelos azules dio unos pasos hacia ella y le sonrió. O eso pensó la chica que intentaba hacer.
-Encantado Karen-san, mi nombre es...
-No me interesa. -Interrumpió la chica. -Estamos perdiendo el tiempo, iré a ver si alguien necesita ayuda. Nos vemos luego. -Esto último se lo dijo a Kid y sin esperar a que este le respondiera despareció volviendo su cuerpo en aire.
-Ardiente. -Soltó un tripulante de Kid, obviamente refiriéndose a la chica. Su capitán sonrió de medio lado.
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El Destino no Existe (Trafalgar Law x Lectora)
FanfictionMovida por la venganza, cierta pelinegra decide dejar su tripulación para ir en busca del pirata que había roto la norma más importante de todas: matar a un nakama. En su viaje se encuentra con el Cirujano de la Muerte, Trafalgar Law, con el que vi...