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3 años después.

(P)

Me subí al auto pues llevaba prisa ya que recibí una llamada de una empresa que quería promocionar un proyecto y necesitaban una sección de fotos. Cuando estaba por arrancar mi prometida se acercó corriendo y me alcanzo mi mochila donde tengo la gran mayoría de mis herramientas de trabajo.

- ¿Qué haría sin ti cariño?- Besé suavemente sus labios.
- Recuerda que te amo, ten un buen día en el trabajo.- Gritó saludandome con la mano mientras me alejaba en el auto.

El camino se hizo largo gracias al tránsito, finalmente luego de unos minutos llegué al edificio, era enorme y sumamente lujoso, entré con pasos rápidos hasta la recepción.

- Hola, buenas tardes.- Saludé a la joven recepcionista.
- Hola, buenas tardes y bienvenida a DC Enterprises Holdings Inc.- Dijo sonriendo.- ¿En qué puedo ayudarte?
- Me citaron por una posible sección de fotos un proyecto.
- Sigueme.- Dijo sin más y comenzó a caminar.

La seguí por unos cuantos pasillos hasta que se detuvo frente a una puerta, me indicó que pasará y se fue. Toque la puerta a la espera de que me dieran permiso para pasar.

Un joven de lentes abrió la puerta y se quedo viéndome unos segundos.

- Pasa.- Dijo haciéndose a un lado para que yo entrara.

Caminé rápido, el chico cerró la puerta y me quedé parada sin saber que hacer o decir.

- Toma asiento.- Dijo una voz masculina indicandome una silla.

Me senté algo nerviosa, aún seguía sin decir ni una palabra.

- Muy bien señorita María José tengo entendido que es la mejor fotógrafa de la ciudad, me la han recomendado mucho.- Hizo una leve sonrisa.- Me comunique con usted debido a que tenemos un proyecto muy importante por lanzar, la cosa es que mi jefa debe hacerse una sección de fotos para ese proyecto.
- Entiendo.- Dije asintiendo.
- La sección será el mes que viene debido a que la dueña de la empresa llega más o menos para esa fecha. ¿Aceptas el trabajo?
- Si, lo acepto con gusto.

Me estrechó la mano, me dejó claro que luego me llamarían para darme las indicaciones de cómo querían que fuera la sección. Le agradecí la oportunidad y salí rumbo a mi auto.

Decidí pasar por mi cafetería favorita, aparque el auto no muy lejos para no tener que caminar tanto. Me encontraba guardando las llaves en lo bolso cuando vi a una muchacha pasar de la mano con su hija, las mire con ternura y seguí en lo mío.

- ¡Daniela te dije que no!- La escuche decirle a la pequeña niña.

¿Daniela? Voltee a verla, esto no podía estar pasando. Tranquila María José es sólo una siempre coincidencia- Me repetía a mi misma una y otra vez.

Seguí cambiando y entre en la cafetería, trate con todas mis fuerzas de olvidar lo que acababa de pasar pero no pude. Me acerqué al mostrador y le pedí a la chica mi pedido de siempre a lo cual se me quedo viendo raro y noté que era nueva así que tuve que decirle mi pedido. Mientras preparaba el café miré su placa y decía "Daniela", ¡No puede ser! ¿Es una maldita broma?

Pague mi pedido y salí casi que corriendo del local, ¿por qué ahora?, después de 3 años, 3 malditos años en los cuales jamás deje de pensar en aquel día. Justo ahora que por fin había podido continuar con mi vida el sentimiento vuelve a aparecer, ¿o nunca se fue?- Me cuestiona mi subcocniente.

Corrí a mi auto, lo encendí de prisa y partí rumbo a la casa de Pau, definitivamente necesitaba hablar con ella.
Mientras conducía veía nerviosa por la ventana cuando veo a una chica de cabello corto por los hombros, tenía básicamente su misma estatura ¿Sería ella?, acelere un poco más y al ver su rostro me decepcione un poco.

Aparque el auto y entre como flash a la casa de Sebas.

- ¡Paaaau!- Grité llorando.

La vi bajas las escaleras con una cara de susto enorme, cuando me vio se acercó y me abrazó con fuerza. Me largue a llorar soltando todo lo que traía reprimido, luego de unos minutos nos sentamos y Pau me dio un pañuelo para cecarme las lágrimas.

- Cuéntame ¿Qué sucede Poché?
- Pensé que la había superado Pau.- Me largue a llorar de nuevo.- Pero me encontraba en la calle y esa señora con la niña que se llamaba Daniela, la chica del café, su placa.. Daniela.
- Espera no entiendo nada.- Dijo confindida.- Respira y cuentamelo despacio para poder ayudarte.
- Fui a propuesta sobre un proyecto hasta ahí todo iba bien, luego decidí pasar por mi cafetería favorita y en el camino escuche a una señora llamar a su hija Daniela, ¿entiendes?, lo deje pasar y entre al café, cuando mire la placa de la chica que me atendía decía Daniela y entonces ya no pide ignorarlo. Me subí al coche para venir hasta aquí cuando vi a una chica muy parecida a ella y mi corazón se aceleró para luego encogerce cuando me di cuenta que no era.-Lloré como nunca antes lo había echo.
- Oohh Poché.. Espera ¿que hay con Kate?, ¿ella sabe esto?
- No..- Dije en un hilo de voz.- Jamás le conté.
- ¿Y qué piensas hacer?- Me miró a la espera de mi respuesta.
- Buscarla.- Solté.
- Pero.. Kate..
- Esto es algo especial, es como si el universo estuviera diciendome que la busque, y eso es lo que voy a hacer.- Me puse de pie.- ¿Vas a ayudarme?

Se puso de pie rápido y me tomo de las manos.

- Por supuesto que si.
- ¿Entonces que estamos esperando?- Dije sonriendo.

Corrimos al auto, nos pusimos el cinturón y cuando estaba por arrancar Pau me miró.

- ¿Como la vamos a encontrar si lo único que sabemos es su nombre?- Hizo su cara pensativa.
- La verdad que no lo sé Pau pero de que la voy a encontrar la voy a encontrar.

Arranque el auto y partimos rumbo al centro. Aparque para luego bajarnos y Pau se quedo viéndome.

- ¿Qué hacemos aquí Poché?

La tomé de la mano para que dejará de hacer preguntas, a veces me irritaba pero de todas formas no sabría que hacer sin ella, corrimos hacia la tienda, atropelle a todos los que me rodeaban quienes me veían con mala cara, llegué a hasta la caja donde la chica se quedó viendome de forma extraña.

- Mira no tengo mucho tiempo sólo te voy a decir que hace 3 años conocí a una chica aquí y ahora intento encontrarla así que necesito de tu ayuda.- La chica me miro sin saber que decir.- Sólo necesito saber si llevan el registro de las compras.
- Déjame hablar con mi jefe, en seguida vuelvo.

Pasaron unos minuto hasta que la vi acercarse.

- Lo siento pero no podemos ayudarte.- Dijo de mala gana.
- Gracias y perdón por la molestia.

Salí con Pau de la mano a rastras hacia el auto, nos subimos y partimos nuevamente. Pase unas cuantas cuadras hasta detenerme, bajamos corriendo y entramos al restaurante.

- Hola, buenas tardes.- Le dije al chico que atendía.
- Hola, buenas tardes, ¿en que puedo ayudarte?
- Hace 3 años cené con una chica aquí y ahora necesito encontrarla así que por favor necesito saber si llevan registro de los pagos o lo que sea.
- Déjame hablar con mi jefe.- Se levantó y desapareció.

Pasaron unos minutos que para mi parecieron hora hasta que el joven apareció.

- Lo siento chica pero no podemos ayudarte.
- Gracias.- Dije con tristeza.

Salimos del restaurante y me deje caer en una banca que había comenzando a llorar, Pau se sentó a mi lado abrazandome.

- No creo poder hacerlo Pau, jamás la voy a encontrar. 
- Si el destino te trajo esas señales por algo será amiga, así que no pierdas las esperanzas.

Asenti limpiandome las lágrimas y nos fuimos abrazadas rumbo al auto.


SEÑALES DE AMOR - (CACHÉ)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora