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(P)

Desperté con el sonido de las gotas de la lluvia, abrí los ojos divisando el sereno rostro de mi esposa mientras aún dormía, con la yema de mis dedos hice pequeñas caricias en su mejilla, deline el contorno de sus labios. Es tan perfecta, me quedaría toda la vida admirando su belleza. Respiré con pesadez provocando que se moviera en la cama, sus ojitos se abrieron poco a poco mostrándome el hermoso color cafe de estos.

- Buenos días pequeña.- Dijo con voz ronca y sus labios se curvaron en una sonrisa.

- Buenos días cariño.- Quité un mechón de cabello de su rostro.

- Hoy es nuestro último día aquí en Maldivas y esta lloviendo a cántaros.

- Que pena creo que tendremos que quedarnos en esta habitación todo el día.

- ¿Qué traes en mente?.

- En este momento tenerte desnuda justo en frente me da muchas ideas.

Me senté sobre su pelvis poniendo en contacto nuestros centros y comencé a moverme lentamente provocando una exquisita fricción.

- Pensaba que yo llevaba el control..

- Hoy no cariño.

Me incliné aún frotándome y pase la lengua por sus rosados pezones, ella gimio cerrando los ojos con fuerza. Sus expresiones me prenden aún más.

- ¡Mierda María José!

Comencé a moverme más rápido haciendo que el placer se incrementara. Los gemidos sólo salían sin pudor alguno, sus manos sujetaron mis caderas siguiendo su movimiento. Sus labios entre abiertos dejaban salir suspiros que deleitaban a mis oídos. Nuestras partes encajan como un maldito rompecabezas, ella me complementa, ella es una parte de mi.

Mi sudoroso cuerpo retosaba sobre el suyo, agotadas, exhaustas y felices. Podía sentir sus latidos, tan fuertes en su pecho y ahora su respiración era más tranquila. El sonido de la lluvia era la melodía más bonita pero el sonido de su risa era aún mejor.

- ¿De qué te ríes tanto?.- apoyé mi mentón sobre su pecho para verle el rostro.

- Perdón es que tú me haces feliz María José, la alegría que tengo es tan grande que solo quiero reír.

- Ti amo così tanto che le parole non bastano per esprimerlo. (Te amo tanto que las palabras no son suficientes para expresarlo)

- ¿Hablas italiano?

- Ajam.- Sonreí.

- En ese caso, Ti amo molto di più. Puoi esserne sicuro. (Yo te amo mucho más. Puedes estar segura de eso)

- Vaya.. vaya.. la señorita Calle sabe idiomas.- Río por mi comentario.

- También se Francés.- Su expresión de orgullo apareció haciéndome reír.

- A ver dime algo.

- Cela me rend très heureux que vous soyez ma femme.

- No tengo la menor idea de lo que dijiste pero tú voz sonó muy sensual.

- Dije que me hace muy feliz que seas mi esposa.

Sus ojitos se quedaron viéndome con ese brillo, ese que me recuerda lo mucho que me ama y que la amo, coloque un mechón de cabello detrás de su oreja y las yemas de mis dedos recorrieron su rostro, grabando en mi memoria sus hermosas facciones. Ella me veía con tanto amor qué podría explotar mi corazón, mi lugar favorito es estar a su lado, mi persona favorita es ella y juro que la amaré como se lo merece, con todo el corazón.

SEÑALES DE AMOR - (CACHÉ)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora