trece

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Disimulé un poco mis nervios y el me preguntó:

– ¿Estás sacando fotos?

–No, estoy jugando al paddle- Le respondí irónica y él me pegó.

–Eu, no soy un hombre para que me pegues así- Me hice la molesta unos segundos.

–No, sé muy bien que no sos un hombre

Y esta vez miró mis piernas. Mierda, sí que sabía cómo hacerme sentir incómoda.

–Basta de esos comentarios- Le dije algo irritada.

– ¿Cuáles comentarios?

El se rió y comenzó a caminar hacia el muelle, esperando a que lo siga. No solo no lo seguí sino que me senté en el lugar donde estaba, mientras él avanzaba por el puente de madera. Ajusté mi cámara y sin pensarlo lo capturé. Estaba de espaldas pero el fondo era increíble. Él era casi perfecto así que podía ser un modelo sin lugar a dudas.

Tome un par de fotografías más y en cuanto se dio cuenta que no estaba a su lado, giró a mirarme.

–Te voy a denunciar por sacarme fotos sin avisarme- Me dijo mientras venía a buscarme. Me paré y caminé hacia él.

–Saquémonos una juntos- Me propuso y yo lo miré.–No tiene gracia si no le doy un poco de mi encanto- Me excusé.

–Bah, si estas cámaras funcionan por si solas

Ahora fui yo la que lo golpeé y apoyé la cámara en la base del muelle. La configuré para que dispare sola y rápidamente corrimos divertidos hasta la punta del puente.

Nos sentamos juntos y apenas lo hicimos el me abrazó por detrás. Sí, la piel se me erizó otra vez.

–No veo la luz- Me dijo entrecerrando sus ojos.

–Tiene múltiple disparo, dispara hasta que yo la pare- Le expliqué y el beso mi mejilla.

Me tomó por sorpresa pero cerré los ojos para sentir sus labios en mi piel. Creo que él se dio cuenta porque con su mano tomó mi rostro para que ninguno de los dos pueda moverse. Abrí mis ojos buscando encontrar los suyos y para lo único que me permitió moverme fue para chocar su nariz con la mía.

Moría de ganas de besarlo, y no dude un segundo más. ¿Qué importa cuántas veces tenga que verlo o que tan incómoda me iba a sentir después? Sus labios eran el paraíso.

Uní los míos con los de él y sonreímos como dos tarados. La posición en la que estábamos era incómoda así que luego de unos segundos me separé.

–Creí que no me ibas a dejar besarte nunca más- Me dijo con un tono sincero y yo lo mire para después recordar que la cámara seguía allí.

El se rió y yo me levanté a buscarla. Rápidamente la apagué y me volví a sentar a su lado.

– ¿Qué te hacía pensar eso?

–¿Vos? No me dabas ni bola, si no te hubiese seguido ayer quizá ni hablábamos hasta hoy

Me encogí de hombros.

–Al menos me dejaste dormir en tus piernas.

Lo miré extrañada.

– ¿Qué pasa con mis piernas?

– ¿Alguna vez las viste?

Sin dudas me las miré. No entendía a donde quería llegar.

–Estoy enamorado de ellas.

Suspiré. ¿Qué tan difícil puede ser evitar a un hombre así?

HOLAAAA, bueno estaba pensando en hacer una maratón porque me cebé y tengo varios caps escritos, que dicen?

bueno COMENTEN ahre las obligaba
las amo bai

cambios | c.r.oDonde viven las historias. Descúbrelo ahora