Inmarcesibles ||Destinados|| +18

Capitulo 12. Sinfonía.

Beth

La noche anterior había dormido viendo la esfera. Era tan hermosa. Me hacía sentir en paz al mirarla, era como estar con él. Estar junto a él. Me sentía como una adicta, el cual se estaba acostumbrando a una dosis alta y después, nada. No quedaba nada y estaba desesperada por conseguir más. Así era como me sentía cuando nos separábamos, estaba feliz y después nada.

No sabía que era lo que sentía por Ethan. No sabía que sentía por él, pero estaba comenzado a adentrarse en mi corazón. No entendía como él había llegado a sentir algo por mí, cada vez que lo veía mis preocupaciones se iban, cuando él me sonreía mi mundo cobraba sentido, pero tenía miedo de cuando descubriera lo malo que me rodeaba, se fuera y después que no quedara nada.

—Cariño tu móvil suena.— Me dijo papá desde la sala sacándome de mis pensamientos. Estaba en la cocina terminando mi desayuno. Había puesto una alarma para salir de casa e ir a buscar a Ethan, y así asegurarme que él no fuera a buscarme. Me había emocionado la idea que esa vez fuera yo quién condujera.— ¿Vas a salir?— Me pregunto cuando tome mi bolsa y la puse en mi hombro.

—Sí, voy con Ethan. Me llevo el auto.— Le dije pero sin mucho contacto visual.

—¿Van enserio ustedes dos?— Me pregunto mirándome fijamente, esa era mi señal. Tenía que sentarme en el sofá para tener una seria conversación y eso fue exactamente lo que hice.

—No lo sé papá, solo tenemos diecisiete. No es como si fuera a casarme ni nada por el estilo...— Dije un poco nerviosa.

—Voy a decirte esto como médico y no como padre. Sé que quizás vas a querer experimentar con tu cuerpo, no me agrada la idea, pero es lo natural. Ethan y tú son jóvenes, pero tienen que ser precavidos, si no quieren una vida que cuidar...— Me dijo lentamente.

—Para papá, Ethan y yo no tenemos relaciones sexuales.— Le dije poniendo los ojos en blanco mientras asimilaba lo que me había dicho.

—Sé que sería más cómodo para los dos que tuvieras esta conversación con tu abuela.— Dijo nervioso mientras las palabras se le enredaban.— Sé que es algo que a los jóvenes de su edad experimentan... ¿Sabes? Ethan me gusta para ti. Pero no quiero verte llorar por él ni por ningún otro chico. Si él llegara a hacerte algún daño, mi instinto protector saldría ¿Lo sabes, verdad?— Me pregunto sujetando mis manos.

—Lo sé, papá.

Me dio un beso en las manos, y cambio el tema.

—Y ahora cambiando el tema, ¿Qué piensas hacer para tu cumpleaños? Quizás Ethan y tú quieren una fiesta doble. A Grace y a mí...

—Espera ¿Por qué Ethan y yo tendríamos una fiesta doble?— Sabía que él cumplía en el verano igual que yo, porque en la escuela éramos a los únicos que no abrumaban en clase con la canción de "Feliz cumpleaños".

—Él cumple un día antes que tú, Beth.— Me dijo sorprendido al ver que no lo sabía.

—Así que ¿Su cumpleaños es en unas semanas al igual que el mío?

—Así es ¿No lo sabías?

Negué.

—Grace dice que nunca le ha gustado celebrar su cumpleaños.— Asistió, pero yo no quería seguir hablando de ese tema.

Me levanté del sofá.

—Papá, ya me tengo que ir. Pero solo quiero algo igual a todos los años.— Deje un beso en su frente y salí de casa.

***

Cuando estacione el auto en frente de la casa de los O'Neill. Ethan me envió un mensaje de texto Invitándome a entrar. En realidad sentía curiosidad de conocer el interior de la casa.