~Jonathan Joestar~

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La mañana continuó con Mi Lady y Dumont conversando sobre la compleja y cara estructura de su casa.

Mienstras tanto, del otro lado de la mesa estábamos Jonathan y yo dialogando.

-He tenido un buen día- le contesté- la mañana es muy hermosa y reluce más sobre esta montaña.

-Tienes razón- me respondió dichoso

Jonathan se estiró para tomar los macarons que estaban del lado de Dumont "¿No les molesta si me robó estos bocadillos?" Les decía Jonathan al tomar el plato con los macarons "Oh, no es nada sobrino" le contestó Dumont.

Jonathan me acerco el plato- Dumont me dijo que son tus favoritos- sin más me puso el plato a un lado de mi taza de té y sonriente le agradecí.

-Gracias, no sabía que Dumont había tenido el detalle- le respondí.

Luego de eso coloque el plato justo en el espacio entre él y yo- Son mis bocadillos favoritos- le dije tomando uno y después se lo ofrecí- pero no me los podría devorar yo sola.

Jonathan sonrió ante mi gesto- Te lo agradezco- agregó.

Era inevitable sentir una vibra cálida acompañada de él y el olor a rosas y campanula de los jardines de Dumont.

Continuamos con la conversación.

-Y dime, Jonathan- le decía- Mi Lady me dijo que eras un académico ¿qué es lo que has estudiado?

Jonathan pasando su bocado de macaron me contestó- No quiero aburrir con mis estadios arqueológicos- con una sonrisa y mejillas sonrojadas agregó- la verdad es que no soy un hombre muy interesante.

-¡Para nada!- le dije- créeme que si te he preguntado fue porque en verdad tengo interés. "Arqueologia" es el estudio de los monumentos ¿no?

-Algo así- contestó- en realidad es el estudio de las antiguas sociedades basado en sus monumentos y esculturas... ¿te parece interesante?

-Totalmente, háblame más. He vivido casi todo mi vida en Francia donde yacen grandes obras de la arquitectura moderna y antigua. Sé que representan mucho más de lo que enrelidad son estéticamente...

Dado a esto la charla continuó con Jonathan hablando y hablando sobre los distintos monumentos que ha estudiado y visitado él mismo. Yo le veía bastante interesada y sorprendida por lo mucho que sabe, y además, le veía con cierta ternura pues sus ojos relucian mienstras me hablaba sobre su pasión.

No miento, era como ver un niño observar las estrellas, y las estrellas se podían ver en el reflejo de los ojos de Jonathan.

El pequeño desayuno se invirtio en una tarde de té, Jonathan me invitó a pasear por alrededor de los jardines de Dumont y yo sin dudar acepté.

Mi Lady y Dumont siguieron con lo suyo por adentro de su casa, mientras Jonathan y yo dábamos un paseo por el extenso jardín.

-Bueno, me parece que ya he hablando demasiado sobre mi- me decía- Lady Dumont me dijo que eres una talentosa bailarina.

Entonces yo me sonroje pues ningún hombre me había llamado así "talentosa"

- Bailarina sí, talentosa aún no- le contesté risuella.

-Me parece imposible que la verdad no sea así, si disculpas mi atrevimiento me parece que si lo eres- él dijo.

Los dos empezábamos a adentrarnos por los arbustos de Rosas y laureles del extenso jardín miestras la confianza empezaba a soltarse más y más.

-Soy una simple bailarina de apoyo en el Royal. No hay mucha novedad en ser sólo eso- decía modesta.

-No importa el lugar donde estés, sino el talento que tengas para hacerlo- él me paso una de las rosas que yacían en unos bellos floreros adornando los faros del jardín.

ProsciuttoXReaderDonde viven las historias. Descúbrelo ahora