POCHÉ:
Según una encuesta realizada por una compañía de preservativos, los hombres tienen en promedio 13 parejas sexuales en toda su vida mientras que las mujeres 7.
¿Se imaginan? Ellos siempre buscan por más, con una no les basta ni ahora ni nunca. Les encanta adquirir experiencia y fantasear junto a su grupo de amistades de promiscuidad.
Otra encuesta realizada por una revista femenina revela que 6 de cada 10 mujeres se sienten satisfechas con la cantidad de compañeros sexuales que tienen, a 2 de cada 10 les hubiese gustado acostarse con menos, y a 1 de cada 10, con más.
En lo que a mi respecta, no encuentro lo genial a acostarme con alguien sin ni siquiera me atraiga en su mayoría, ya sea desde su personalidad hasta sus gestos corporales. Me encantaría tener aventuras sí, al punto de contemplar en clímax.
Las expectativas en cuanto al sexo son a menudo poco realistas. Según la Encuesta Nacional de Salud y Vida Social, llevada a cabo en Estados Unidos, alrededor del 75% de hombres alcanza el orgasmo cada vez que tiene sexo, mientras que solo 29% de ellas lo logra. Del 71% de mujeres que no alcanza el orgasmo durante el sexo, de 10% a 15% no alcanza el clímax bajo ninguna circunstancia. Una encuesta reveló que 3 de cada 10 mujeres fingen orgasmos para no hacer sentir mal a sus parejas. Para ellas mentir entre las sábanas es un hábito regular.
Oh, gracias a Dios, pensaba que era la única que le pasaba eso, tener que fingir orgasmos con Mario se ha vuelto parte de mi rutina diaria, ¿quién es? Mi prometido, llevamos 5 años conviviendo, lo conocí dentro de esta gran empresa de auditoría de mi familia. El traje ceñía su perfecto cuerpo tallado por dioses del Olimpo, una mirada seductora a tal punto de desnudarme en frente de una multitud de ejecutivos. Mis expectativas eran muy altas y no digo que jamás me haya complacido, pero últimamente no era nada lo mismo. Sí, me sentía incompleta.
Recuerdo cuando se acercó para invitarme a la popular cafetería en una de las esquinas de Nueva York. Me negué, nunca me hice la fácil, pero su encanto era innato y fue solo cuestión de segundos para lograr caer ante él y sus ojos azulados.
Soy de ese 71% de mujeres que no alcanzan el orgasmo, soy de ese 10% a 15% que no alcanzan el clímax bajo ninguna circunstancia, y sí, dentro de esas 3 mujeres que fingen orgasmos, no quiero dañar el orgullo de mi novio, no estaría bien...
-Amor, se está haciendo tarde.
-Ya voy- contesté a Mario mientras me abrochaba la blusa.
Un día más, pero no uno cualquiera. Hoy por fin estaba a cargo como gerente de la gran empresa de auditoría, mi padre estaría más que orgulloso de mis logros académicos y laborales si es que viviese en el mismo país para poder celebrarlos conmigo. Mi madre lamentablemente murió hace unos años por lo que mi padre se mudó a Canadá.
Estoy llevando cursos para poder sacar mi MBA, amo estudiar, los títulos hacen a las personas, lo necesitan para poder ser alguien.
Todo en esta vida se logra con esfuerzo y dedicación, la responsabilidad por delante y buena repartición de tiempos, una agenda es necesaria siempre. Las rutinas se vuelven parte de ti una vez que te acostumbras, tanto como una buena taza de café por las mañanas y sexo...
He perdido la cuenta de las veces que me haya podido acostar con mi prometido, pero casi en ninguna he logrado llegar al clímax que debería experimentar debido al momento. No dudaba de su varonilidad, es más, estaba muy bien dotado. De asuntos de oficina al sexo, si, puedo pasar de una cosa a otra en cuestión de nada. Mis pensamientos solo deseaban poder sentirme plena como mujer. Poder presumir de él y su destreza en la cama, pero no...