C a p í t u l o ● 7

1.2K 166 10
                                    

Jimin caminaba hacia su casa despreocupado. Hoy había sido un buen día, sus resultados fueron altos en dos proyectos pendientes y Taehyung milagrosamente también se encontraba feliz. No era que pensara que era un amargado, pero bueno. No siempre podías ver esa sonrisa cuadrada a menudo.

Sacó las llaves y abrió la puerta de su casa. Cerró la misma y observó a su madre bajando las escaleras. Llevaba puesto un hermoso vestido blanco junto a unos tacones grises con brillo y una gargantilla de plata. ¿Tenían visitas?

-Hola, mi niño. -se acercó a su hijo y lo recibió con un abrazo.

-Hola mamá. -correspondió al abrazo. -¿Tenemos visitas?

-Tú papá tiene un nuevo jefe y quisimos invitarlo a él y a su familia a almorzar. -habló mientras acomodaba su cabello. -Ve a tu habitación, báñate y baja al comedor.

El rubio asintió subiendo las escaleras. Entró a su habitación y dejó su mochila sobre la cama. Buscó algo de ropa formal en su clóset y se dirigió al baño. Reguló la temperatura de la ducha y comenzó a desvertirse.

Una vez lista el agua se adentró en la misma comenzando a mojar su cuerpo. Cerró la llave y buscó el jabón. Lo tomó y comenzó a enjabonarse. Era refrescante tomar un baño luego de clases.

Su vista bajó hacia su cuerpo notando como el chupetón del chico pelinegro seguía ahí. Suspiró mientras sus mejillas ardieron recordando esa escena en los baños. Se veía tan malditamente deseable mientras besaba esa parte sensible de su cuerpo, pero a la vez prohibido.

No podía estar enamorado del chico que pasaba todos los días de su vida molestándolo. No podía desear que volviera a repetirse lo que pasó en los baños. Estaba mal.

Terminó de bañarse y secó su cuerpo con la toalla blanca a un lado del lavamanos. Se cubrió con la misma su cintura y salió de su baño. Ahogó un grito tapando su boca. ¿Qué hacía él aquí?

-¿Q-qué mierda? -logró articular mientras sostenía con fuerza su toalla. El chico pelinegro que rondaba en sus pensamientos segundos atrás estaba cómodamente acostado sobre su cama.

-Esa boquita, pensé que no decías malas palabras. -una sonrisa burlona salió de sus labios

-Q-qué te importa.

-Me importa porque no me gustan los chicos que hablan mal. -se levantó y caminó lento en su dirección.

-V-vete de mi habitación. -no podía hablar bien sintiendo los nervios consumirse en su sistema. Yoongi siguió caminando hasta quedar a solo centímetros de pegar sus cuerpos.

Una lenta inspección al rostro y cuerpo del menor hizo que una parte abajo de él comenzara a despertar. ¿Cómo podía verse tan tierno y sexy a la vez. Vio como sus pequeñas manos temblaban. Estaba apunto de llevar su boca al cuello de Jimin cuando sintió un fuerte golpe en su entrepierna. 

-Idiota. -pronunció Jimin tomando la ropa sobre su cama y se volvió a meter rápido al baño. Solo esperaría unos minutos, se cansará de esperarlo y se irá... o eso esperaba.

 o eso esperaba

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

-No quiero ir. -habló Taehyung detrás de su madre. Estaba se encontraba frente a su cómoda poniendo un poco de maquillaje tapando las arrugas que según ella se le notaban demasiado. Era una persona joven, no necesitaba de eso.

-¿Por qué no? Hoseok ya lleva una semana en el pueblo y aún nadie le ha dado la bienvenida. -dejó de maquillarse se puso de pie. 

Taehyung no quería volver a pisar esa casa. Aunque esta vez iría acompañado esa sensación que tuvo al salir de esa casa se hacía presente cada vez que lo recordaba. -Solo dime que nos vendremos temprano.

-Lo prometo. -con su mano peinó algunos cabellos sueltos del menor. Taehyung se mantuvo serio esperando que fuera verdad esa promesa. Ambos salieron de la habitación y se encontraron en la sala principal con Seokjin y su padre.

-Que elegantes. -halagó la mujer viendo lo bien vestidos que estaban sus tres hombres favoritos. No vestían de traje formal pero esas camisas de color negro, blanco y vino que llevaban cada uno los hacía ver espectaculares.

-Tú no te quedas atrás, amor. -respondió el señor a su esposa tomándola de la mano y dándole un suave beso en sus labios. Taehyung hizo una cara de asco ante eso y Seokjin sonrió viendo el amor de sus padres.

-Deja de hacer esa cara, como si nunca hubieras dado un beso. -susurró el mayor al castaño.

-Cállate. -se dio la vuelta con sus mejillas rojizas recordando su primer beso. No había estado mal, era en ese entonces un chico enamorado y tuvo la suerte que pocos tenían. Besarse con su crush y que luego te diga lo bien que lo hiciste te hace sentir especial... hasta que luego de unos días cuando le confieses tu amor te rechace.

No se dio cuenta de cuando caminó cuando se vio parado a pocos metros de la entrada de la casa de su vecino. Seokjin se encontraba detrás de él y sus padres aún seguían caminando en su dirección conversando de algo sin importancia. Su madre llevaba el pastel que le había prometido a su nuevo vecino el primer día que lo conocieron.

Dio unos pasos para estar mas cerca de la puerta.

-¿Qué esperas? Toca. -le incitó su hermano señalando el timbre.

Este solo asintió y tocó. Sus padres ya habían llegado hasta donde estaban los hermanos y esperaron a ser recibidos por el "joven amable y gentil" como lo había definido su madre. Y no mentía. Hoseok era por mucho un caballero, tan gentil como ayudarle a su padre bajo la lluvia cuando su auto se detuvo justo antes de entrar a la cochera. Y ni hablar de su madre cuando la ayudó con las bolsas de las compras.

Pero algo en él era diferente. Taehyung lo sentía y apesar de querer pensar que no era malo, sentía que si se dejaba confiar mucho de él algo podía salir mal.

-Buenas noches.

____________________________________________________________

VCM💛

𝑴𝒊 𝒑𝒆𝒒𝒖𝒆𝒏̃𝒐 𝒂𝒄𝒐𝒔𝒂𝒅𝒐𝒓《𝙃𝙤𝙥𝙚𝙑》Donde viven las historias. Descúbrelo ahora