Eylen & Harry - When We Fall [✔️]

47. Sacrificios

Eylen

Me despierto asustada, alguien toca la puerta del departamento repetidas veces de forma muy estruendosa, como si la quisiera derribar. Me quito la sábana de encima y camino hasta la puerta de mi habitación.

Me paro bajo el umbral y miro a la derecha. Alice también está consciente del ruido, la veo parada bajo el umbral de su puerta.

Tiene el cabello alborotado igual a mí. Nos damos una mirada de confusión y a paso lento caminamos a la puerta principal.

Los golpes no paran, estiro mi mano para abrir la puerta, pero Alice me detiene.

—Espera —dice.

Corre a la cocina y cuando regresa a mi lado trae dos tenedores y me extiende uno.

—Podemos estar en posible peligro y tu mejor idea para atacar es con... ¿tenedores? —reprimo la risa.

—No subestimes el poder de un tenedor —me señala —Uno de estos al ojo del atacante y creo que nos dará el tiempo necesario para correr por ayuda.

Ante su lógica sólo subo los hombros dándole la razón y entonces Alice abre la puerta de un solo golpe.

Con alivio y algo de molestia descubrimos que Max es el causante del escándalo.

—¡Son las once de la mañana! ¿Por qué aún están en pijama? —nos dice.

Alice y yo nos miramos, luego a él de forma molesta y decimos a la misma vez —¡Es sábado!

—¿¡Qué rayos quieres?! —mi prima lo empuja con el dorso de la mano.

—La página escolar subió el tema del baile, es...

—¡Alice in wonderland! —dicen él y Alice a la misma vez. Solo que él lo dijo con emoción y ella con cansancio.

Llevo una mano a mi frente masajeando el área. Alice se gira devolviendo los pasos a su habitación y estrella la puerta.

Max se adentra al departamento y cierra la puerta mientras ríe por lo bajo.

—¿Por qué tienes un tenedor en la mano?

—Por nada —respondo y camino a la cocina para dejar el cubierto en su lugar.

—Mi mamá me dio muy temprano el dinero para comprar mi ropa. Me advirtió que si lo gasto en tonterías iré al baile con el saco de mi padre —se ríe. Abro la nevera para para sacar el cartón de jugo mientras lo sigo escuchando —Gabi mandó a pedir su vestido por internet y me envió la foto, es color rojo así que debo comprar ropa que combine con ella.

—¿Me levantaste tan bruscamente un sábado solo para decirme eso? —le digo cuando me giro y comienzo a verter jugo de naranja en dos vasos de cristales.

—Stone, te estoy pidiendo que me acompañes al centro comercial.

—No sé... —me acomodo el cabello lejos del rostro y le extiendo un vaso.

La última vez que fui al centro comercial con Max mi exnovio apareció y no creo tener tanta suerte en esta ocasión como para volver a encontrarme a Harry.

—¿Ya compraste tu vestido? El baile es el próximo domingo.

—¿Qué obsesión tienes con el baile? Ni que fuera la gran cosa.

—¡Lo es! Será la fiesta de despedida a nuestros días de colegio. Habrá buena música, comida y lo mejor de todo... Estaremos los cuatro juntos. Erick, Alice, tú y yo en nuestros mejores atuendos bailando toda la noche.

—Te olvidas de Gabi —me burlo.

—Sabes a lo que me refiero. No, no me olvido Gabi, así como tampoco me olvido de Harry. Irá contigo, ¿verdad?