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Jimin

Cuando escuchamos esos gritos ininteligibles hicimos absoluto silencio para descifrarlos, pero fue imposible. Sentí una corazonada, algo me decía que era importante dirigirnos hacia el escándalo que se escuchaba un poco cerca.

-Shia, por favor, vayamos a verificar los ruidos.- Intenté alcanzarlo y me lleve la sorpresa que estaba justo a mi lado. Tomé su brazo y lo sacudí suavemente.

-Todo el tiempo hay estos escándalos, las discusiones insignificantes de los vecinos  aquí son comunes.- Me respondió Shia tratando de tranquilizarme, puso su mano encima de la mía la cual seguía en su brazo.

-No, solo por favor, se que esta vez no es insignificante, tal vez es Jungkook....- le hable en apenas un susurro, sentiría vergüenza si me equivocaba, pero mi lobo me decía que deberíamos ir deprisa, que era algo importante.

-¿No quieres comer? -

-Lo siento, si quiero pero primero vayamos hacia allá.-

-Esta bien, Jimin. Vamos a ver si tienes razón.-

Me hizo soltarlo y me quede en el mismo lugar, escuché pasos a mi alrededor, creo que estaba alistándose para salir. Sentí como se acercaba, oí el tintineo de unas llaves y después su mano rozando mi brazo.
Esa fue la señal para acercarme y tomar su brazo.

Una vez decidimos bajar, mencionó las escaleras y salimos por la puerta. Shia me decía que le detallara la apariencia física de Jungkook, para ver si era o no. Le comenté que era alto, tenía cabello oscuro y hasta las orejas. Shia era muy delicado conmigo, él tenia mi mano en su brazo con su otra mano encima de la mía.

Mientras más nos acercábamos, más se podían entender los gritos, parecían una pareja a la distancia pero ahora que estábamos cerca pude reconocer su voz, era Jungkook, pero las cosas que decía no se parecían en absoluto a él.

-Eres una perra Lía, una vez que te alcance te pondré una jodida correa! Todo esto lo empezaste tú  ¿y te quieres largar?! Reza, Lía, hazlo fuertemente para ver si alguien te escucha!.-

-¡¡Jungkook!! - grite y apreté el brazo de Shia.

-Jimin.... pero ¿Que, Quien?, ¿Que se supone qué haces sosteniéndote así de él?.- Su voz sonaba algo agitada y mi pecho vibró de alivio. Una voz conocida.

Escuché pasos, luego un pequeño trote, pude escuchar como Shia trago saliva y expulsó un fuerte bufido, comencé a tener un sentimiento extraño.

-¿Kook?.- Era claramente su olor, mi voz se escuchó aún más pequeña de lo que ya es.

-¿Jungkook? - escuché decir a Shia, era una clara desventaja dependiendo de la asignación. Kook tenía un olor fuerte, el olor significativo de ira.

-¿Que haces tocando a mi omega?- sentí como Jungkook me tiraba hacia él del agarre que mantenía de Shia. Me desoriente por la brusca e inesperada acción.

-¿Qu-que ha-haces... Kook? - Pensé que me abrazaría, me preguntaría tantas cosas pero simplemente me dejo de pie detrás suyo, podía sentir mi mejilla rozando con su hombro.

-No!! ¿Que haces tú?.... vengo a buscarte y técnicamente estás aferrado al brazo de este Beta, ¿Me preguntas que hago? Yo estaba jodidamente preocupado, desesperado y enojado, maldita sea.- Sentí como sus manos se colocaban encima de mis hombros y cuando pensé que me abrazaría solo se acercó a olfatearme, todos las acciones sorpresivas me mareaban más.- Hueles...a él....-

-Tú! Te mataré.- no entendí nada por algunos segundos, mi ritmo se aceleró al máximo, pero supe que aquella frase no era para mi por qué luego de algunos segundos me soltó y lo sentí voltearse, escuchando pasos dirigiéndose donde yo había estado antes.

Escuchaba varios pasos apresurados, escuchaba la respiración pesada de Jungkook, escuchaba como Shia trataba de explicarle las cosas con calma a Kook, pero el era como un hombre que ha perdido la razón, era todo lo contrario a mi Alfa, aquel que he conocido toda mi vida, mi adorable Alfa que cantaba en la cocina mientras hacía mi desayuno, me daba pequeños postres en la tardes, era mi apoyo cuando salíamos solos. No entendía como podía cambiar en cuestión de horas, solo en la mañana me llamo "cariño" y me trato como su delicado Omega, mientras en estos momentos no escuchaba razones, demasiados insultos, movimientos sorpresivos horribles y emanaba un olor a ira profunda.

-¡Jungkook, detente! Por favor! ¿Que ocurre? Shia me ayudo!¿Jungkook!? Por favor, escúchame.- Me trate de acercar pero estaba tan nervioso que no podía concentrarme en ir recto.

-No. Todo el mundo tiene que saber que mi Jimin es solo mío! Jodidamente solo mío, y nadie más le deja su maldito olor!.-

- ¿Pero de qué habla, Jimin?.- se escuchaba a Shia tan nervioso que no sabía que hacer, en un segundo comencé a correr hacia sonido de su voz.- ¡Juró que si me llegas a tocar llámare a la policía!.- comenzó a gritar Shia aún más fuerte.

Era de esperar que terminara en el suelo, alguien que no puede ver, no puede correr solo.

Mi fuerza se rompió o lo que quedaba de ella, no pude hacer nada cuando comencé a llorar, era un llanto de rendición, estaba tan cansado, todo el día había sido un absoluto infierno y para finalizar Jungkook no era mi Jungkook.- Kook, por favor. Ya, detente, por favor.- Murmure y llore más fuerte que comencé a gritar, toda la impotencia que sentí durante este apocalíptico día, la dependencia que tengo de las personas, todo, absolutamente todo se quebró.- ¡Un alfa no hace llorar a su pareja!.- y me sentí enojado, triste y herido.- Tú no eres mi, mi alfa estaría aquí, conmigo; consolándome y tranquilizándome!.- llore y llore más fuerte, expulsando la traicion de Lia, el maltrato de Leo, las críticas de mis tías, por el descuido de mamá y por qué mi alfa no actuaba como yo lo conocía.

Sentí como alguien se arrodillaba delante de mi, como sus brazos me rodeaban, sentía su arrepentimiento, sentí a mi cálido y cariñoso Jungkook.

-Perdoname, Jimin. Bebe, lo siento, lo siento, no digas que no soy tu alfa, lo soy cariño, perdóname, por favor, no digas eso.-

Sujetó mis mejillas, limpio mis lagrimas con sus pulgares y me comenzó a darme pequeños besos mientras seguía repitiendo que lo perdonará.

Aunque aquí no hubiera nada que perdonar.

Blind soul - KookminDonde viven las historias. Descúbrelo ahora