-Otra vez hueles a sangre, ¿donde estás lastimado esta vez?.- pregunto un enojado Jimin.- Esta es la cuarta vez que vienes así en menos de dos semanas ¿Quieres que le diga a tu padre que estás causándome preocupaciones?.-
Jimin expulso el aire que tenía retenido fuertemente, no le gustaba tener discusiones con su hijo, pero a veces era inevitable.-Son peleas tontas de adolescentes, deja el drama, papá.-
Min se sentó, observo a su padre mientras se ponía de rodillas a buscar esa pequeña caja donde tenía alcohol y un poco de medicinas que realmente eran innecesarias, los alfas sanaban más rápido que cualquier género, no sabe cómo pudo percibir el olor a sangre si el se limpió antes de entrar a casa. Jimin era muy sobre protector con su familia, la cual consistía en dos alfas.
Lee había estado esparciendo el rumor de que era su pretendiente y que sus padres le habían dicho que me quitara de su lista de candidatos por mi herencia genética, tenían miedo de que mis hijos o mis nietos salgan igual a Jimin. Idiotas, como si yo le pretendiera a esa clase de chicas, todo una niña superficial y soberbia como ella. El problema no había sido el que mintiera sobre si me gustara, el problema era que le había dicho a todos que su familia era tan importante como para importarle mi lista de defectos y mencionando a papá con sus corruptas bocas.
Desde que papá me reprendió cuando estaba pequeño no he dejado de repetirlo como un mantra. Aprendí por las malas a que no tengo que decir todo lo qué pasa por mi hueca cabeza, aun no me perdono todo lo que le decía a papá, aunque dicen que es la ignorancia de la infancia, no lo justifico en mi memoria.
Me imagino el infierno qué pasó Jimin en la escuela por su enfermedad, ahora entiendo por que la abandono. Aunque nunca he preguntado a detalle, son conversación para cuando sea adulto y no me deje llevar por mi corazón. Se que buscaría a cada imbecil y lo mataría, gracias por no darme esa carga, Jungkook.
Yo, siendo su hijo, que estoy sano y soy Alfa, me viven pinchando mi ira con la burla hacia papá. Saben que me encuentran con solo mencionar su inicial.
Ahora podría ser el momento de averiguar un poco más, no hay nadie para decir que es una conversación para después.
-Jimin, ¿Como era tu vida en el instituto?.- pregunté con un tono de inocencia que hasta yo tenía ganas de responderme.
Me da gracia cuando alza la cabeza y tiene la expresión como sorprendido y tratando de fijar la vista que no tiene, se lo ve tierno y mas joven de lo que es. Realmente está mirando hacia otro lado, tratando de ubicar mi voz.
-Oh... normal, bien... supongo.- El seguía tocando los puntos en las cosas de la caja, tenia a centímetros el jabón antiséptico pero dejaría que lo encuentre solo. Jungkook se encargó de ponerle a toda la maldita casa esos puntos. Cualquier cosa nueva que alguien tenga tiene que tener los puntos, es un poco cansado cuando hacemos mercado.
-Si no me eres sincero conmigo, no te dire por que discutí con un chico en la escuela.- dije de forma engreída.
-Cuida tu lenguaje, pequeño alfa de trece años.- Alguien debería decirle a Jimin que mientras más frunce el ceño más rellenito se lo ve.
-Sigo esperando, mamá.- Se que le encantaba que le dijera así, aunque aún no entiendo cómo el se puede poner tan sonrojado por solo decirle "mamá", hace lo mismo cuando papá le dice algún apodo meloso. Creo que más lo molestamos de esa manera para verlo todo tierno, papá parece un cake japonés.
-Era un infierno, pensé que al conocernos como grupo o curso desde la primaria sería más fácil pero me equivoqué, cuando perdí totalmente la vista, ellos siempre me hacían bromas crueles, me robaban el bastón, hacían ruidos que me hacían exaltar y robaban mi tarea....no había diferencia de ningún tipo para molestarme-.Mierda, no.. Comenzó a llorar, papá dejaba en evidencia cada vez que lloraba y este es mi horario de casa, Jungkook me va a reclamar por no cuidar a papá.
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Blind soul - Kookmin
Fanfiction"Los ojos son la ventana del alma." - Un omega ciego, un alfa constante y un destino predicho.