Flores azules 1

Capítulo 38 ¿QUIÉN ERES?

Capítulo 38

Nihal Sheider.

Primero que nada, lamento tu perdida, es una desgracia que Samantha haya pasado a un lugar de absoluta oscuridad, en fin, un peso menos.

¿buscas repuestas?

Estoy seguro de que si, todos tenemos esa necesidad de tener el control de nuestra vida, aunque no siempre es posible, pero sabes, es momento.

El momento llego Nihal.

Ve justo ahora a la cabaña y todas las respuestas que tanto has buscado serán reveladas.

Alzo la mirada y observo a mi alrededor.

Es ella.

Jodidamente es ella.

Lo peor, si seré el jodido estúpido protagonista que irá en este momento sin importar que sea una trampa, mi urgencia a la verdad es demasiada.

Kurt no estaba por ningún lado, Alice se encontraba comiendo chocolate y golosinas, Azul y su hermano habían desaparecido, pero no importaba, camino a la salida, camino a la verdad que tanto he añorado.

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Al llegar a la cabaña un silencio perturbador reino el lugar, todo estaba oscuro y hoy no había luna para guiarme. Camino en silencio hasta la puerta de esta casita de madera y la abro de golpe, con cautela me introduzco en ella y veo a mi alrededor, inspecciono cada lugar, pero nadie está a la vista y aunque lo estuviera me sería incapaz de verle.

—Siempre tan curioso Nihal— una voz interrumpe el silencio y me paralizo.

Observo tratando de buscar, pero es inútil, la negrura a la que estoy sometido es demasiada. Mis manos sudan y al mismo tiempo tengo hambre por la verdad.

—¿Quién eres? —pregunto, trato de sonar calmado y lo logró.

—Bueno si te dijo quién soy la diversión se acaba—vuelvo a escuchar. Cierro mis ojos tratando de repetir ese sonido en mi mente, pero no es una voz conocida.

—¿Qué quieres? —vuelvo a preguntar, llevándome una risa como respuesta.

—Quiero muchas cosas, entre ellas matar a alguien en especial, alguien que me ha causado muchos problemas— dice con naturalidad, aunque su voz es ronca, misteriosa y un tanto distorsionada—, podrías traer a esa basura aquí.

Escucho forcejeos y un sonido de un intento de voz, doy algunos pasos atrás hasta chocar con la pared.

¿Qué mierda sucede?

—Podrías dejar tus juegos y hablar ya, eres una maldita cobarde, no eres capaz de salir y dar la cara maldita hija de puta—habla subiendo el tono de voz.

—No sabes nada Nihal, todo este tiempo has vivido entre las sombras, es momento de saber la verdad.

Pero antes de responder siento un golpe en mi cabeza haciéndome caer al suelo, mi mente da vueltas y antes de recuperarme otro golpe más me lleva al vacío.

Al despertar me siento desorientado, abro mis ojos varias veces para acostumbrarme a la poca luz del viejo foco.

Vaya que soy estúpido.

Maneras fáciles de terminar amarrado—lo sé porque joder es muy obvio—, inútilmente en una vieja silla y eso le da ese toque cliché.

—Sabes asesina al menos podrías ser más original—grito tentando a mi suerte.

—Oh por algo se ha mantenido de esta manera— habla alguien, pero sigo sin ver a la persona.

Escucho ruido y volteo buscando alguna señal que me diga quien carajos es la dueña de esa voz... será ¿Azul? ¿Arie? ¿o una desconocida?, sin embargo, lo que veo me deja totalmente confundido.