Latidos del Corazón

#15. Rechazo

—Sé que quizás esperas una disculpa.

No, la verdad es que no sé qué esperar.

Le pedí que habláramos en un lugar con público, en este caso, el jardín del hospital, solo así puedo evitar que pase algo.

—Sería lo más profesional.—Menciono.

—¿Entonces si quieres oír eso de mí?

No respondo.

—Cometí un error al dejarme llevar, estoy seguro de eso, menos aquí y menos cuando...

—Cuando eres el doctor de Dylan y yo ..—Me detengo por un momento y al volver a hablar sueno clara.—Soy su novia.

—Lo sé.

—Eso no evito que me besaras.

Suspiro.

—Miles, esto no puede volver a ocurrir.—Le digo, siento los latidos en mis oídos.—Creo que lo mejor sera que nuestro trato sea solo profesional.

Aprieto los labios.

—No está bien que tú y yo...

—Que nos besáramos. —Se acerca a mi.—También me besaste.

Sé que lo hice, no puedo mentir cuando el mismo lo sintió.

Yo lo besé, quise besarlo, pero está mal.

Está muy mal.

Lo miro y niego con la cabeza.—¿Por qué lo haces?

En silencio me observa.

—¿Por qué se besa a alguien?.—Me pregunta mirándome.—A decir verdad creí que podría resistir un poco más, pero he querido probar de tus labios desde que derramaste el té sobre mí.

Mis ojos se abren.

—Y cuando comencé a pasar más tiempo contigo...

Mis labios se separan.

—Te bese porque me gustas, Jules.

El corazón se me acelera.

Hubiera preferido no escucharlo.

Él sonríe, como si se sintiera bien en decirlo.

—Sé que no estoy en la posición de decírtelo, no es justo y es egoísta de mi parte.

La vista me arde.—¿Entonces por qué lo haces? ¿Quiere... ?

No lo digas.

No lo hagas, Jules.

—¿Quieres confundirme?

Aprieto las manos.

—¿Te confundo?

¿Por qué lo hiciste?

—Tengo que irme.

Me detienen tomándome del brazo.

—Jules, si tú también te sientes así conmigo..

—No puedo.—Le interrumpo.

Sus ojos me observan llenos de decepción.

—No puedo sentir nada por ti.

Estoy lastimándolo, puedo verlo.

—¿No lo ves?.—Suelto, tengo un nudo en mi garganta.—No puedo sentir nada por ti, Miles.

—Jules...yo.

—Tengo un novio, un novio que estoy esperando que despierte y que él está esperando verme ahí, junto a el al abrir los ojos... Yo no puedo.

Cierro los ojos negando.

—Dylan me necesita, tengo que estar ahí para él.

Lentamente siento como su agarre pierde fuerza y me deja ir.

—Lo siento.

Yo si lo siento.

—No puede haber nada entre nosotros y no puedo sentir nada por ti.

El no agrega nada más, me deja ir y se me queda grabado sus ojos verdes, tan hermosos y decepcionados de mi respuesta.

Se hice lo correcto, sé que lo hice.

Dylan me necesita y yo lo amo, es la persona que amo y debo sentirme bien con mi decisión, con mis palabras que, aunque fueran duras y terminaran dañando a un hombre tan amable como Miles, son muy ciertas.

Son ciertas.

Y debo sentirme bien con eso.

Pero ¿Por qué no resulta así realmente?

¿Por qué me siento tan mal? 

Hola...

Vamos avanzando rápido, creo que es lo que les debo por haber tardado tanto en actualizar esta novela y porque las personitas que llevan esperando tanto tiempo por leerla lo merecen.

Por cierto ¿Se dieron cuenta que Jules dijo todo el tiempo "No puedo", más no "No quiero"

¡Que gran diferencia! ¿No lo creen?

Pronto ella misma experimentara esa diferencia y nosotros con ella.

En fin..

Quiero leerlos y saber sus opiniones.

¿Qué les parece?

¿Y hasta el momento a quien le van? ¿A Dylan o Miles?

Los leo y tienen todo mi amor.

>>Yiemir.