Latidos del Corazón

#29. Pareja II

Miles fue claro con su respuesta y fue un "No".

Si, él dijo que "No".

¿Me sentí decepcionada? Sí, me sentí así, pero no podía obligarlo y menos cuando tenía una cirugía importante que atender ese día.

—¿Hoy es el compromiso de tu amiga, no?.—Me pregunta Jessica, asiento con la cabeza.—¿Y por qué sigues aquí?

—Aun es temprano.

—Claro que no y menos para las chicas que nos demoramos mucho en arreglarnos.—Me dice.—Ya van a ser las 11.

—Jessica...

—Tienes que irte, Jules.

Y prácticamente fue así como Jessica me boto del hospital.

(*)

Pase toda la mañana o lo poco que me quedaba de la mañana en encontrar un vestido lo suficientemente barato y que se viera elegante, pero que me alcanzara comprar, fui a arreglar mi cabello y de regreso a casa, ya eran las 8 pm.

El evento empezaba cerca de las 10, estaba con la hora y si no llegaba a tiempo, Michi posiblemente me borraría de la lista de mejor amiga.

Claro, si eso existe.

Aunque conociendo a Michi, probablemente si exista.

Me maquille el rostro y me puse el vestido, uno de color vino que iba por arriba de la rodillas por delante, pero atrás tenía una cola por debajo de las rodillas, con un cruce atrás en la espalda dejándola descubierta y adelante la abertura del pecho tenía el modelo de un sujetador mientras de la cintura para abajo estaba cerrado.

Era demasiado vestido como para usarlo en una noche.

Y como para que alguien no lo apreciara, al menos la persona que me interesaba que me viera asi.

 y por un momento me arrepentí.

Pedí un Uber y baje lo más rápido que pude , pero cuando llegue ya se estaba yendo.

—¡Hey!.—Grito haciendo señales, esperando a que regrese, pero termina por doblar la calle y seguir su camino.—¿Que hago ahora..?

—Puedes dejar que te lleve.

Me giro al escuchar su voz, solo para comprobar a Miles detrás de mí, con una bella sonrisa que me contagia después de quitarme la sorpresa.

—Miles...

—Hola...—Me recorre el cuerpo con la mirada.—Te ves increíble.

Él también se ve igual.

Muy guapo.

Tanto que termino sonrojándome.

—¿Qué haces aquí?

—Vengo a llevarte al compromiso de tu amiga.

—¿No tenías una cirugía programada?

—Sí y se adelantó.

Es por eso que no lo he visto toda la tarde.

—Ahora estoy aquí... ¿Me dejas llevarte?

Aprieto los labios y señalo detrás de mí.

—Pues acabo de perder mi Uber.

—En realidad le pedí que se fuera.

¿Qué?

—Miles...

—Quería llevarte yo.

Una sonrisa se me escapa.

—¿Sigo invitado?.—Me pregunta esperanzado.—¿Aun puedo llevarte, Jules?

Con una sonrisa, respondo.—Si.