#20. Propuesta

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Julis, niña...—La voz de la Sra Smith se rompe.—¿De verdad hiciste eso por mí?

Todos están en la habitación, sus doctores y también Miles, el Sr Collins y Jessica.

—Sí, Jules, lo hizo, cariño.—Responde el Sr .Collins.

Las lágrimas cubren los ojos de la Sr. Smith, ella me rodea con los brazos y la veo llorar, es la primera vez que lo hago.




















(*)























Antes de marcharme de la habitación dejando a la parejita de viejitos, Miles me detiene en la puerta de esta.

—Le pondremos el marcapasos el viernes.—Me dice.

—¿No podría se antes..?

—Ya le habían puesto una fecha, Jules..

—Está bien, así tengo más tiempo...—Nos interrumpe el Sr Collins.

El dulce viejito se pone delante de la Sra. Smith.

—¿Qué haces..?—Pregunta ella confundida, nuestros ojos, los míos y los de Miles están sobre el también.

—Lamento no poder usar mis rodillas para inclinarme y pedírtelo formalmente, pero estoy viejo y a las justas puedo moverme.

Dios mío.

Con sus manos temblorosas toma la mano de la Sr. Collins.—¿Quieres casarte conmigo, Josie?

La respiración se me acorta.

Miles está sorprendido y las lágrimas llenan los ojos de la Sr. Smith.

—¿De verdad?

—Si..

—Pero estamos tan viejos...

—Nunca es ser viejo para el amor.—Le responde.—Y te amo, viejita.

Sonrio.

Las palabras son suficientes.

—Si. Si quiero.

Que hermoso momento.





















(*)






















—Estamos aquí reunidos para la unión de Josie Smith y Adrian Collins.—Pronuncia el padre que consiguieron que asistiera al hospital.

La boda se está llevando a cabo en la habitación de la Sr Smith.

Y todos estamos acompañándola, los que pueden alcanzar dentro y los que no afuera de la habitación, muchos sus compañeros del mismo piso y también los internos y residentes.

Jessica y yo nos dedicamos a ayudarla a que se vea bien para su boda, le arreglamos el cabello y compramos un vestido blanco para ella, la Sr Smith quedo hermosa y lo pude ver en los ojos del Sr Collins.

Este debe ser un momento muy hermoso para ambos.

—Acepto.

—Yo también acepto.

El padre los declara y dice las siguientes palabras.

—Puedes besar a la novia.

Los aplausos se escuchan todos eufóricos celebramos a su lado.

Es un día maravilloso.















Latidos del CorazónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora