Bajábamos las escaleras junto a Beth para ir al Gran Comedor y encontrarnos con Roger Davis, actual novio de mi amiga y Oliver, con el cual estaba saliendo o algo así, sinceramente no se que estábamos haciendo pero me gustaba.
Mi amiga hablaba sobre lo lindo que era Roger pero no le estaba prestando demasiada atención, mi mente divaga en los últimos meses donde los juegos con Fred eran continuos, siempre terminábamos a escasos centímetros, tirándonos comentarios con segundas intenciones o encerrados en lugares muy pequeños.
No sabia, mucho menos entendía lo que estábamos haciendo, me gustaba, me encantaba jugar con Fred pero no entendía, eran momentos de los dos. Nunca dejábamos que alguien mas nos viera y eso no entendía, si no era nada serio por qué nos escondíamos y si era serio, no debíamos escondernos. Sin embargo fuera cual fuera la opción correcta, me encantaba.
- Madisson... hola... Tierra llamando a Maddison.- dijo Beth mientras pasaba su mano por mi cara - ¿Me estábamos escuchando?- pregunto molesta.
- No, lo siento pero no.- dije apenada.
- Últimamente estas rara Madd.- dijo preocupada mi amiga.- ¿Que pasa? ¿Es por Oliver? ¿O por Fred?-
- Últimamente no se nada.- dije confundida - ¿Por que nombras a Fred?-
- Porque yo también soy de Ravenclaw, porque soy tu amiga y porque veo lo que hacen todo el tiempo.- dijo enumerando las razones con sus dedos.
- Vale, entiendo.- dije sonriendo - y tienes razón, todos esos son los motivos.-
- ¿Te sientes mal? ¿No te gusta?-
- Me encanta pero no lo entiendo, no entiendo que estamos haciendo.- dije desorientada.
- Yo tampoco entiendo pero mientras no se lastimen, yo creo que debes relajarte y disfrutar chica.- dijo riendo y tomándome de los ojos.
- Si, no se pero si.-
- Basta de los condenados "no se" Maddison Black.- dijo Beth parándose frente a mi.
Llegamos al Comedor, me despedí de mi amiga y me encamine a donde estaba con Oliver, quien hablaba con una chica de su curso. Fred paso por mi lado, me guiño un ojo y comenzamos a jugar.
- Te ves hermosa Black, hoy estas deslumbrante.- susurro - ¿Te preparaste así para mi?-
- Gracias lindo.- contesté - pero lamento desilusionarte, me prepare para mi.-
El siguió su camino y yo abrace a Oliver para luego comenzar a caminar con dirección a los jardines del castillo y pasar nuestras horas libres.
- ¿Que pasa con Fred?- pregunto.
- Nada, solemos jugar, como si estuviéramos coqueteando pero jugamos.-
- Pero... ¿Salen o algo?-
- No, no creo poder salir con alguien como Fred.- respondí - es un rompe-corazones y por el momento quiero conservar mi corazón entero, ademas es uno de mis mejores amigos.-
- Yo no te rompería el corazón.- dijo sonriendo.
Sonreí, lo mire y sonreí. Oliver me gustaba, nunca nos habíamos besado pero en este momento daría lo que fuera porque me besara. A la mierda todo pensé y, lo bese.
Nos besamos por unos minutos para luego mirarnos a los ojos por unos segundos. Pasamos la tarde juntos entre risas, juegos y besos. Luego fuimos a la biblioteca porque Oliver quería leer unos libros para sacar jugadas para el próximo partido de Quidittch, quería ganar a toda costa porque era su ultima oportunidad sin embargo luego de un par de horas tenia a un Oliver bastante cansado, dibujando y tachando distintas jugadas.
- Oliver basta!- dije mientras le sacaba las hojas.- Te estas sobrecargando y tu cabeza ya no esta funcionando.-
- No Maddison, necesito ingeniar la jugada perfecta para poder ganar.- dijo frustrado.
Me pare y camine para estar al lado de Oliver, aparte todo y lo abrace. El apoyo su cabeza en mi hombre y comenzó a disculparse por haberme arrastrado y hacerme perder el tiempo.
- Oliver basta.- dije mientras lo miraba - vais a ganar, estoy segura que van a ganar, tienen un equipo increíblemente bueno.-
- Si, lo se pero tengo que generar nuevas jugadas y ver como sacar el potencial de cada uno en todo momento.-
- Eres un excelente capitán Oliver, tienen un excelente equipo y tus jugadas son envidiadas por todos.- dije seriamente - ahora tienes que relajarte un poco, porque tampoco sirve que taches y rayones una hoja mil veces.-
- Gracias Madd.- dijo sincero mientras sonreía.
- Tengo una idea, tal vez haya que romper un poco las reglas pero sera un ratito, lo prometo. Tu solo sígueme.- dije mientra tiraba a Oliver fuera de la biblioteca.
Caminamos hasta llegar al campo de Quidittch y le hice cerrar los ojos a Oliver mientras iba haciéndole imaginar como seria el ultimo partido. Luego jugamos un rato y, como no era e esperarse, le gane porque el muy soberbio pensaba que no era muy buena ya que no estaba en el equipo y era ahí donde se equivocaba, soy muy buena jugadora solo que no tengo tiempo para los entrenamientos, no al menos si debo seguir con las "clases particulares" con Dumbledore por mis dones.
Nos despedimos y cada uno se fue para su sala común. Al llegar mis compañeras de cuarto estaban profundamente dormidas y la cama de Beth vacía, probablemente estaría con Roger o en las cocinas buscando algo dulce. Siempre iba por las madrugadas en busca de su "apetitivo dormilón".
La carta de mi madre todavía estaba cerrada, la había colocado en mi mesa de luz junto a mi cama. Creo que ya era momento de abrirla, no se que podía contener pero debía dejar los "no se" atrás y hacerle cara a la realidad.
La abrí, no era muy larga y estaba escrita un poco a las apuradas pero podía reconocer la letra de mi madre.
Querida Maddison:
Cuanta formalidad para una carta, no? Se que debes tener mis diarios, donde tendrás todo lo que pude saber sobre mi don y mi historia, espero que te sirva para crear tus propias versiones de la realidad y algunas cositas mas.
Te amo hija, no es una carta muy extensa, me están persiguiendo y si es verdad, lo que he visto, a ti también te perseguirán. Debes cuidarte y siempre tener a tus amigos cerca. Tendrás momentos de demasiado dolor como también momentos de la mas pelan felicidad.
Debes seguir con tus clases, eres mas poderosa de lo que crees, mas de lo que podrías imaginar, debes seguir investigando. Ten cuidado y nunca te olvides de amar.
Te ama siempre, mamá.
M.M.B
Toque la carta y me llevo al momento donde era escrita, fue cuando a mi madre la capturaron los mortifagos. Llore, llore como nunca antes había llorado. Pude sentir su dolor, pude ver sus pensamientos, pude ver lo que ella veía en ese momento y pude ver como hasta en ese momento buscaba darme consejos para mi protección.
La dirección de su casa, la cual solo debía buscar y usar en caso de emergencia o en un futuro muy lejano, para formar mi familia. Mi mama me protegió hasta en su ultimo momento y lo sigue haciendo hasta el día de hoy.
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La hija de Sirius Black (Fred Weasley)
FanfictionEsta es la historia de Maddison Lyra Black, quién en su trayecto por Howgarts descubre y comprende sucesos de su pasado, además de conocer a las personas que la acompañarán hasta su muerte. Maddison posee un don, heredado por su madre. Su misió...