La hija de Sirius Black (Fred Weasley)

Oliver Wood

Me encaminaba al campo de Quiditch junto a Beth, quien luego de muchas suplicas acepto acompañarme a ver como entrenaban los gemelos. El equipo de Gryffindor era uno de los mejores desde hace varios años, cuando comenzamos nuestro primer año era liderado por Charlie Weasley, el hermano mayor de los gemelos, quien se recibió el mismo año que Thonks y era sumamente divertido y amable. Ahora el equipo de Gryffindor era liderado por Oliver Wood, había hablado un par de veces con el, era amigo de Percy y estaba un poco obsesionado con este deporte pero era bastante amigable y un tanto atractivo, aunque Beth no pensaba lo mismo.

- Beth vamos, ya van a comenzar y nosotras aun no llegamos.- 

- No me apures Madisson, ni siquiera se que voy a hacer durante todo el entrenamiento.- dijo agitada

- ¿Admirar las vistas? - pregunte divertida.

- Pues no tengo a quien admirar, si fueron los entrenamientos de Ravenclaw o Hufflepuf, podría cambiar de opinión.-

- Vale, capte la indirecta.- dije alegre - Vendremos a ver los entrenamientos de Ravenclaw, todo porque te gusta esa águila engreída.-

- Oh vamos, no es tan engreído y es sumamente apuesto.- 

La mire y reímos hasta llegar al campo de juego, donde ya estaban comenzando a entrenar nuestros leones favoritos. Todos hacían algo, hasta Harry que este año estaba bastante débil por los dementores, que parecían tener una fuerte atracción por el. Era asombroso, parecía tener una conexión con la snich, ya que la encontraba en cuestiones de unos pocos minutos.        El entrenamiento fue bastante tranquilo, el tiempo se paso rápido, ya que los gemelos nos hacían bromas a nosotras o Oliver, quien según Beth no había parado de mirar hacia donde estábamos.

- Ya te dije que no seas dramática, no creo que haya estado viendo a donde nosotras.- 

- Y yo te digo que si Black, seguro que es porque cree que vamos a robar sus tácticas. Todos dicen que esta obsesionado con el Quiditch.- 

- Si pero nos conoce y sabe que no vamos a hacer nada.- dije cansada.

Cuando el entrenamiento termino fuimos fuera de los cambiadores para esperar los chicos, el primero en salir fue Harry, quien nos saludo de manera alegre y me pidió si podía ayudarlo con unas actividades y se fue junto a Ron a buscar a Hermione. 

Habían pasado varios minutos, Angelina y otra chica salieron, quienes entre risas nos saludaron y siguieron su camino. Pasaron varios minutos mas y cuando pensábamos que iban a salir los gemelos, nos sorprendió un Oliver bastante energético.

- Señoritas.- dijo haciendo una especie de reverencia.

Beth hizo un gesto con la cabeza y se rió. 

-Hola Oliver, fue muy buen entrenamiento.- dije

- ¿Te gusto?- pregunto sorprendido.

- Si, si. No fue el mejor pero estuvo bueno, tienen muy buen equipo.- dije sonriendo - creo que el capitán de Ravenclaw deberá ser mas estricto.

Oliver rió y parecía que iba a continuar con su camino pero se dio vuelta para llamarme.

- Hey! Maddison... este sábado hay una salida a Homsgeade y yo...bueno...quería saber si...-

- ¿Vamos juntos? - dije adelantándome a los nervios de Oliver.

- Si, me encantaría.- dijo sonriendo.

- A mi igual ¿Te parece encontrarnos a las cinco?- 

- Si, definitivamente si. Nos vemos el sábado Maddison.- dijo a modo de despido.

- Nos vemos el sábado Oliver.- dije sonriente mientras el capitán de Gryffindor se alejaba.

Beth comenzó a reír hasta que salieron los gemelos que preguntaron que pasaba y nos encaminamos a los jardines de Howgarts para pasar el rato hasta la cena.

- Así que Oliver, ahora entiendo porque querías venir al entrenamiento.-

- Cállate Beth, ni siquiera imagine una situación similar a lo que acaba de pasar.-

-Estoy calladita Balck, son las voces de tu consciencia que te persiguen por arrastrarme a un entrenamiento de Quidditch para tener una cita.- 

- Te voy a bloquear de mi mente hasta el día de mi boda.-

- Puedo vivir con eso.- 

La mire, reímos y continuamos caminando con los gemelos mientras hacíamos bromas sobre su desempeño en el entrenamiento y como Beth tuvo que padecer estar tanto tiempo fuera sin hacer nada productivo.

                                                                          

                              *****

Llego el sábado y Beth aun se reía sobre lo que había sucedido en el entrenamiento mientras me ayudaba a elegir que me iba a poner y ordenar nuestra pieza, ya que habia quedado hecha un caos de ropa y libros. Bajamos para ir hasta el Gran Comedor, donde habíamos quedado de encontrarnos con Oliver y Beth iría con el capitán del equipo de nuestra casa, aunque en el camino nos encontramos a los gemelos, quienes nos cuestionaron porque no íbamos a ir con ellos a Homsgeade.

- ¿Cómo qué no irán con nosotros? - pregunto George.

- Hoy no Weasley, tenemos cosas que hacer.- dijo Beth.

- ¿Que cosa es mas importante que ir con sus amigos?- dijo Lee.

- No te tenia tan dramático Jordan.- contraataco Beth.

- Al cabo de un tiempo, se te pego lo dramático Stone.-respondió Lee- Y aun no nos dicen que es lo que deben hacer.-

- Tenemos una cita Lee.- dije mareada.

- ¡¿Como que una cita?!- gritaron los tres al unisono.

- Si muchachos, una cita como las que tienen ustedes bastante seguido.- respondió Beth.

- Tal vez se me olvido mencionarlo pero si, hoy cada uno ira por su lado.- dije no tan segura.

- Y... ¿Quienes son los afortunados?- pregunto Lee.

- Ademas de dramático, chusma Jordan.- dijo Beth divertida.- No deberías juntarte tanto con los gemelos.-

- Deja de evitar dar una respuesta.- dijo Fred - Maddison ¿Con quien saldrás?- 

- Yo voy a salir con...- 

- Madisson... ¿Vamos?- apareció Oliver, evitándome dar una respuesta.

- Oliver, si, vamos.- dije mirándolo- Nos vemos mas tarde chicos.- 

Me despedí mientras me alejaba, dejando a tres chicos sorprendidos y a Beth sonriendo mientras también escapaba en dirección a su cita. 

La tarde fue genial, dimos una vuelta por el pueblo y entramos a un par de lugares, como Dervish y Banges, para que Oliver arreglara unos instrumentos que había roto cuando caminaba leyendo un libro que le habían mandando sus primos. Nos reímos, bromeamos y hablamos toda la tarde.  Oliver era un chico sumamente amable, divertido y su obsesión con el Quiditch no es tan grande como todo el mundo dice, es simplemente su pasión. Fue una excelente salida sin embargo debíamos volver a Howgarts antes del toque de queda. 

- Me gustaría que esta tarde fuera eterna.- dijo sonriendo y sonrojado.

- A mi también me gustaría.- respondí sonriente.

- Bien, entonces la haremos eterna.- dijo sonriente.

Me tomo de la mano y corrimos por diferentes pasillos del castillo  hasta llegar al séptimo piso, que luego de unos minutos, apareció una puerta que nos llevo a la inimaginable sala que viene y va. 

Definitivamente fue una increíble tarde eterna.