𝕋𝕦 𝔼𝕣𝕖𝕤 𝕄𝕚 𝕃𝕦𝕫 (𝕋𝕖𝕞𝕡𝕠𝕣𝕒𝕕𝕒 𝕀)

Epílogo

Un sueño

Han pasado 1000 años de aquel horrible sucesos, de que las diosas no viven en paz ya que la perdida de las unicas dos madres era afectada demasiada, ya que no habrian mas guerreras en el futuro, los 4 Arcángeles se volvieron mucho más fuertes por la perdida de su madre Aneliz, pero como dicen un dicho del dolor nace la fuerza y eso fue lo que le pasó a un Arcangel Peliplateado que logró volverse más fuerte, por la perdida de su único y verdadero amor.
Éste no odiaba a los demonios en el pasado, pero ahora los aborrecía con todo una irá ya que el hijo del rey demonio le quitó lo que más amaba con una vil rudeza a ella, su nombre de aquella pelinegra no era pronunciado en el clan ya que era bastante delicado hablar sobre la mujer mitad Diosa, mitad Demonio.

Mientras tanto una joven diosas de cabellos Peliplateados, buscaba una manera de encontrar al verdadero asesino de su prima y encontrar la verdadera razón de ¿Por qué darle fin a ella?.

Ella a estado acompañada con Mael ya que el quiere dejarle en claro de quien lo hizo fue ese rubio, pero ella al no saber quien nunca supo quien era. En cada convivencia el Arcángel Mael empezó a ver su gran parecido que tenía con ella y varias cosas en común, Elizabeth lo hacía sentir como ella lo hacía sentirse igual veía esos ojos azules y podía ver la dulzura que ella emanaba al igual que su primer amor, ¿Acaso la vida le está dando una oportunidad de amar de nuevo?.

Pero aunque se empiece en interesar en la peliplateada, el por las noches no puede dormir, no sin antes de ir a donde el la enterró con las pocas personas que convivieron con ella, el le lleva un ramo de flores la que tanto ella adoraba que eran las rosas blancas.
En su lápida siempre se queda demasiado tiempo hablando solo, ya que el le cuenta de como le fue en su día y sus logros hasta ahora para terminar llorando, suplicando que ella regresé ya que su vida no tiene sentido si ella esta ahí, sin poder moverse.

El no solo va a verla, Elizabeth igual va pero prefiere estar sola ya que ella dos eran las princesas de ese Clan, ella le rezaba a todo lo existente de que su prima se encuentre en un lugar donde su madre la vea todos los días, pero.... al ver que Aneliz vio a su hija todo los días y su sufrimiento de quedarse callada para protegerla de que ningún dios no la lastimaran fuera en vano, sentía por primera vez tristeza en su corazón ya que la vida de dos grandes guerreras terminaron en tragedia.

En la otra parte del mapa, un demonio de cabellos rubios estaba en su cuarto durmiendo teniendo otro sueño recurrente de una diosa de alas glamurosas y hermosa figura, pero.... no podía verle la cara.

Pero algo si podía ver, esos ojos no eran normales, nadie en la vida a podido nacer con unos ojos dientes que otros.
Suda al volver a soñar con esta misteriosa mujer, es como si algo en su interior quisiera recordar pero no sabe quien es y por que lo persigue en sus sueños.
Mientras tanto un pelinegro, calla ante tal hecho de haberle quitado lo que más amaba su hermano, al ver que sufre al dormir tiene que mirar y callar ya que su amada nadie sabe cuando reencarnara.
En las lejanías del castillo una chica caminaba sin secar por ayuda ya que no tenía nada en el mundo y necesita de algo de que sustentarse para poder comer, ella siempre en su cabeza trae un manto ya que le molesta su físico porque le a atraído problemas, con los demonios.

Odiaba ser bonita, ya que cualquier demonio la toma como presa fácil y siempre cuando se acercan demás tiene que pelear para darse a respetar.
Aunque parezca débil e inocente, puede ser letal para algunos demonios, pero sus poderes no puede controlar bien.
En las noches ella, se pregunta por qué siente un gran vacío en su pecho... es como si le faltara algo a su vida, una persona especial que le dio ganas de vivirla, para ella es extraño ya que no conoce a nadie de aquí ya que es demasiado callada.

Caminaba sin rumbo, hasta que vio a lo lejos el gran castillo del rey demonio, pensó que buscando allí podía encontrar un trabajo como sirvienta ya que ahí te darían un cuarto y tu comida estaba más que segura, así que se armó de valor y se dedicó a ir a el, ya qué tenía entendido que los hijos de este, era demasiado malvados con la muchedumbre.
Pero a esta no le importo ya que no iba a enamorarse, ella iba a lo que iba a trabajar y mantenerse.

Mientras tanto, el hijo mayor de los demonios se encontraba en la chimenea pensando en aquella joven de sus sueños, su pecho empezaba a latir al solo pensarla, esa chica tenía algo que lo hacía sentirse de esa manera.
Han pasado 10 largos años de eso y no ha descubierto de quién se trata, pero esto lo estaba volviendo loco ya que necesitaba saber quien era y por que en sus sueños aparece.
Este a tratado de acercarse a ella, pero siempre está desaparecer al tocarla, es como un cuento de nunca acabar, eran aproximadamente las 12 a.m. de la noche, el castillo estaba cerrado y nadie podía salir ya. Los hijos del rey demonio estaban en la sala de estar bebiendo algo ya que el insomnio se hacía presente, al momento de que el joven rubio se servía otro trago, escucharon como tocaron la puerta de su castillo.
Estos extrañados se quedaron mirando ya que ¿Quien tocaba a esta hora de la madrugada?.
Estos se dedicaron al dirigirse a la entrada, al abrir ambas puerta pudieron ver a una joven con un manto en su cabeza, apestaba y se veía con frío, esta le pedía trabajo como mucama o lo que sea ya que ella debía de mantenerse de algo, estos le negaron la posibilidad de trabajar allí, pero al quitarse el manto de su cabello, estos quedaron asombrados de la belleza de aquella mujer, Zeldris comenzó a temblar ya que sabia que había regresado ella como decía su maldición.
Meliodas solo se quedo viendo esos ojos con lagrimas que se encontraba llenos de odio al saber que los hijos del rey eran tal como dijeron. El se le hacía tan familiar esa voz y esos ojos verdes lleno de ira que lo hacían pensar que acaso ella ya la había visto antes...¿pero en donde?, en un sueño quizás, ya que su linda cara era sacada de hasta en eso en un sueño....