capitulo 20

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• Habia paso 1 año desde que el azabache se había divorciado, y desde la última vez que vio por última vez a ojiperla, contrato a detectives para buscarla pero ninguno daba con su paradero, y como habían dicho sus padres desde esa vez dejaron de brindarle su apoyo, lo dejaron solo, al único que tenía a su lado era a su hermano y a su mejor amigo, que le apoyaba en lo que podía. Vivía en unión libre con la rubia desde hace 10 meses y tenian un hijo de 5 meses.

Había perdido algunos negocios y alianzas con otras empresas por lo que había ocurrido con los hyugas, pero aún así mantenía en pie la empresa.

• Al segundo año se estaban complicando las cosas con la empresa, había perdido varias alianzas, la rubia no dejaba de gastar dinero, siempre estaba de compras, se iba a los mejores restaurantes de la cuidad con sus amigas, se iba a los antros, tuvo que contratar a una niñera para que pudiera cuidar al pequeño Inoji.

Su hermano había hablado con sus padres de que hicieran las pases y volvieran a hablarse, diciéndole que nadie era perfecto, que todos tenían errores y que siempre había una primera vez en equivocarse, al principio se opusieron, pero el Uchiha mayor insistía tanto que le tomo  la palabra la matriarca, empezaron desde cero, aún que le costó algo de trabajo poder confiar de nuevo en su hijo.

Fugaku aún se sentía molesto, en algún momento dudo pensando en que Itachi tal vez tenía razón, deciso todas esas dudas que tenía respecto a eso, aún no podía hablarle ni mucho menos confiar en el, ya que tuvo problemas con Hiashi Hyuga en la empresa y con algunos trabajos.

A los tres meses de que las cosas mejoraran un poco con la matriarca Uchiha, estaban por terminar de organizando la boda del Uchiha mayor, Itachi e Izumi no quisieron una despedida de solteros, solo organizaron una fiesta dónde solo estaría familiares y amigos.

Unos días antes de la fiesta, Itachi noto algo extraña así prometida, pensé que era nervios por la boda que se aproximaba, ya que el se sentía igual de nervioso. Al llegar el día de la fiesta, su gran sorpresa fue que Izumi lo dejo y le confesó que le había sido infiel y a causa de eso estaba embarazada, desde ese día no la volvió a ver, Sasuke estuve a su lado en todo momento ya que sabía lo que sentía su hermano.

Al mes se presentó un nuevo negocio, y Fugaku se lo ofreció a Itachi ya que pensó que le aria bien alejarse de todo lo que avía ocurrido, pero tenía que irse a los Estados Unidos por algún tiempo, el azabache acepto sin dudar en ir.

• En el tercer año las cosas empeoraron, Sasuke estaba en la quiebra, tuvo que despedir a todos los empleados de la mansión, al igual de algunos trabajadores de la empresa, vendio su casa, su auto y el que le pertenecía a la ojiperla y algunas cosas más de sus pertenencia, para poder pagar algunas deudas y no ir a la cárcel.

La rubia lo dejo a causa de eso, no sin antes confesarle que el hijo que tenían no era de el, si no de otro, que solo lo vio como un banco al cual sacarle provecho y nada mas.

Después de eso ya no pudo salir adelante, estaba atorado en un oyó y sin salida. A los 6 meses tuvo que vender la empresa ya que no podía salir da la quiebra. Tuvo que conseguir trabajo, pero nadie quería contratarlo ni los que habían sido sus socios. Acudió a si mejor amigo y fue el único en darle empleó, y también fue el que le permitió quedarse en su casa desde que vendió la de el, le agradecía, y le dijo que solo sería temporal en lo que conseguía dónde vivir, no quiso acudir a sus padres ya que sabía que aún no tenían la suficiente confianza para hacerlo, y se sentía avergonzado y arrepentido por lo que había causado y hasta donde avía terminado a causa de su amorío con la rubia.

Maldecia una y mil veces más por a ver terminado donde estaba, por aver perdido todo, por terminar en la calle, aún le seguía doliendo la partida y el no saber nada de la ojiperla, seguía llorando a su recuerdo, seguía pidiendo que alguna vez lo perdonará, sentía que todo ese se lo merecía, por averla echo sufrir vastante tiempo, por a verle mentido, engañado, averle puesto una mano encima. Ahora comprendía que estaba pagando por todos sus errores.

No soporto masDonde viven las historias. Descúbrelo ahora