16

408 48 2
                                    

-Rubén.

El mencionado tragó en seco, no estaba listo para esta conversación

E intentó huir, pero esos brazos mamadísimos lo detuvieron enseguida.

-Deja de ignorarme, por favor.

-¿Qué quieres?-Vaya, no quería sonar tan antipático.

-¿Es por lo de tu casa?

Enseguida sus músculos se tensaron, no quería ni recordarlo.

-Soy un imbécil...-Dijo.- Tú no te mereces esto, ¡No te mereces una relación tan tóxica!

-¡Rubén, no es tu culpa!-Intentó calmarlo.

-¡Si lo es, joder!-Gritó refugiándose en el pecho del contrario.-A veces me siento tan egoísta, Samuel. Te quiero, pero a veces me dan ganas de... Terminar... Con todo esto.-Costó, pero lo dijo.

Vegetta temió por su relación, no quería terminar ahora. Tuvo que disimular su dolor.

-Doblas...-Lo abrazó con fuerza.- Quiero seguir contigo, ¿Por qué no entiendes eso?

-A veces siento que lo nuestro no tiene futuro.

Auch.

-No digas eso.-Lo frenó.- Que te amo, y no me importa cuantas veces tengamos que pasar lo mismo voy a estar a tu lado.

Rubén sentía unas locas ganas de llegar hasta aquí, se ahorraría muchísimos más problemas de esa forma, y Samuel también.

Pero decidió creerle, una vez más.

Su corazón no aguantaría tenerlo lejos, así que va a aplazar lo inevitable.

Quiso olvidar el tema. Ya no valía la pena seguir discutiendo.

-Perdón por no hablarte, soy un inmaduro.

-...Tranquilo.

Vegetta sabía que Rubius colapsaría pronto.

[karmaland] Una escuela, varios problemaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora