48 (II)

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Ni uno de los dos sabía cómo mierda sucedió.

Al principio, solo eran paseos aleatorios, ni siquiera sabían dónde iban.
Temas realmente triviales.

Todo usual.

¿En qué momento pararon ahí? En el fondo de los camarines.
Habían 7 duchas, justo en la más alejada.

Dos cuerpos se besaban apasionadamente.

Pegados, intentado buscar el mayor contacto.

Auron se sentía acorralado contra la pared, pero era lo menos importante. Quería tocarlo todo, todo el hermoso cuerpo de su compañero y amigo Luzu, que hasta al más cuerdo lo dejaría sin aliento.

Los dos se agarraban con fuerza, acariciándose y soltando algunos sonidos traviesos.

Como si hubieran estado aguantándose por décadas.

Al separarse, Luzu le quitó aquella sudadera roja al contrario. Metió su mano bajo la polera sintiendo como su cuerpo ardía por dentro.

Auron cerró los ojos, quería disfrutar el contacto al máximo. Y sin darse cuenta, ya habían vuelto a besarse.

Sus entrepiernas rozaron fuertemente, sacando un gemido a los dos.
Tanto Raúl como Borja querían volver a sentir aquella placentera sensación.

Rozaban sus cuerpos una y otra vez como animales. Era estar en el cielo.

-Auron...-Jadeó luzu entre beso y beso.

-¿Mhm?

-¿Puedo tocarte?

Se notaba que el ojos cafés estaba fuera de sí. Esperando la respuesta siguió besando cada parte de su cara, bajando hasta el cuello.

Auron sintió un cosquilleo por todo su cuerpo. Todo esto... Era demasiado.

-Has lo que quieras, Luzu.-Respondió desviando la mirada.

Al fin lo tenía a su merced. El hecho de que podrían tener sexo en ese instante volvía loco al de cabello largo.

Al fin podría hacerlo suyo, sin interrupciones.

[karmaland] Una escuela, varios problemaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora