-¿Rubius te dejó tirado en su segunda clase? Bua, yo que tú no le hago más, eh mi niña.
Rió.- ¿Ya vas a empezar con lo de la niña?-Comió de su ensalada.- ¿Desde cuándo mi salón se volvió nuestra guarida?
-Desde que tu la proclamaste así.
Miró el reloj de su muñeca.-Te toca pomada.
-Mi parte favorita del día.-Sacó de su mochila una crema y se la dió al mayor. Luego, se desvistió de la cadera hacia arriba.
-Poco a poco te vas sanando.-Dijo mientras le echaba en cada herida.-Con esto quedarás como nuevo.
-Me encanta que lo hagas por mi, me siento tan importante~.-Canturreó el pelirrojo.
-Nada, es lo menos que puedo hacer.-Siguió masajeándole la espalda.- Lolito, cualquier cosa, estoy aquí por si necesitas ayuda eh.
El mencionado bajó la cabeza levemente.
-Mangel...
-¿Qué?
-Eres muy bueno conmigo.
-No Lolito.-Dejó de tocarlo.- Esto es simplemente lo que hay que hacer.
"Y estás muy dañado como para darte cuenta por ti solo." Pensó fugazmente.
Mangel volvió a hablar.-Quiero que estés bien Lolito, más allá de nuestra relación profesor-alumno. Quiero que seas feliz y aunque no siempre estés conmigo, voy a esforzarme para que cada segundo que pasemos juntos sea agradable para ti.
Lolito sonrió. Sintió que perdía el tiempo.
-Te lo mereces y--.
Ya no aguantaba más.
-Hey, Mangel...-Interrumpió el chico suavemente.
Se giró, cruzando miradas con el pelicafé. Y sin darle más tiempo lo besó.
Besó a su profesor.
Tan dulcemente, para que no se asustara, apenas rozando los labios. Delicado y cauteloso sintió la suavidad en la boca del contrario.
Mangel tocó las caderas de su alumno y se separó.
Simplemente para mirarlo.Ese pelo naranja y largo, ojos verdes intensos, pecas adornando esa bella cara, una barbilla algo descuidada pero sin duda adorable.
Era simplemente perfecto.
Y volvió a conectarse con él, pero de forma levemente más intensa.
ESTÁS LEYENDO
[karmaland] Una escuela, varios problema
FanfictionQue difícil es la vida escolar, especialmente en tus últimos años. Adolescentes se enfrentan a lo que es la vida real, problemas que les quitará hasta la última gota de cordura, entre ellos y hasta consigo mismos. ¿Quién dijo que esta era la época m...