-Aurora...-Regañó Mangel acercándose a ella.- Mira tu vestido, está lleno de tierra. ¿Qué dirá tu papá cuando te vea así, eh?-Acarició la pequeña nariz de la chica.
-No me di cuenta...-Tristemente se miró a sí misma.- ¡Mangel, sácame todas estas manchas!
El mencionado la sacudió algo divertido.- Bueno, debiste haberlo pensado dos veces antes de jugar con esos niños en la caja de arena.
-¡Ellos me estaban retando a una guerra de castillos! No podía decir que no.-Infló los cachetes.- ¡Rápido, debo estar súper súper limpia!
-¿Y por qué tan desesperada derrepente?-Preguntó algo curioso.
-Si papá se entera, le gritará a Lolito.-Dijo con toda la inocencia posible.- Y yo no quiero ver llorar a mi hermanito.
La sonrisa de Mangel desapareció enseguida.
Simplemente lo odiaba.
Escuchar a la pequeña Aurora hablar de esto como si fuera normal le daba asco.Solo quería quitarle los grilletes al pelirrojo.
-Dime, Aurora.-Siguió sacudiendo el vestido de la niña.- ¿Lolito llora mucho en casa?
-Si... Mi papá siempre le grita, le pega...-Intentó recordar.- Y cuando yo me acercó él me trata muy mal, y me dice que me vaya a mi cuarto.
-¿Tu hermano?-Ella asintió.
-Y cuando regresa él a su habitación, lo escucho llorar toda la noche. Tengo que ir a contarle un cuento para que se tranquilice.
El de lentes no respondió. Dejó de moverse y solo miró al suelo deprimido.
-Mangel.
-¿Si?
-Cuando sea grande y fuerte como tú, voy a proteger a mi hermano. Él nunca llorará más.
No supo qué responder. Solo ladeó la cabeza y abrazó a Aurora.
Lolito llegó con una bolsa en la mano y un helado en la otra.- ¿Qué pasa?
-Mangel me está ayudando.-Respondió Aurora felizmente.
-Muy bien.-Dijo sin más, para luego ver al de lentes.- Mangel, ¿Nos puedes llevar a casa después?
Tardó unos segundos en responder.
"Ni loco."
-...Si, claro.
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[karmaland] Una escuela, varios problema
FanfictionQue difícil es la vida escolar, especialmente en tus últimos años. Adolescentes se enfrentan a lo que es la vida real, problemas que les quitará hasta la última gota de cordura, entre ellos y hasta consigo mismos. ¿Quién dijo que esta era la época m...