𝔻𝕚𝕤𝕔𝕖𝕕𝕚𝕥𝕖 𝕒 𝕞𝕖, 𝔸𝕞𝕠𝕣𝕖. | 𝐀𝐥𝐞𝐜 𝐕𝐮𝐥𝐭𝐮𝐫𝐢 |

Capítulo 34

Capítulo 34

Los hermanos Cullen se habían visto en la penosa situación de perseguir a un enfurecido y enloquecido Alec Vulturi por todo Forks. Encontrarlo había sido complicado, habían terminado por separarse para encontrarlo más rápido.

Edward había ido a la comisaría donde debía estar recluido el chico que el vampiro buscaba, pero nada más llegar encontró el desastre. Todos los policías estaban arreglando todo y haciendo llamadas, en sus mentes no entendían lo que había ocurrido, sólo sabían que uno de los reclusos había escapado. Sabiendo que no tenía nada que hacer ahí se marchó, tratando de no llamar la atención.

Llamo a Jasper y Emmett para reunirse en el bosque y buscar, si ya Alec había conseguido dar con el paradero del muchacho, era lógico que iría al bosque a matarlo.

Ya los tres juntos y sabiendo que se encontraba en el bosque y lejos de su esposa, decidieron rastrear el aroma de la sangre del muchacho en vez de al vampiro.

Dio más resultado esa táctica que la anterior.

En medio del bosque encontraron un desastre, y al muchacho jadeando y completamente golpeado con el vampiro viéndolo a cierta distancia.

-Alec no puedes matar al niño.- trato de razonar Edward.

Alec solo les dio una mirada antes de volver a tomar al chico por su ropa y arrojarlo en dirección a un árbol, su espalda crujió ante el golpe y luego cayó quejándose del dolor y dando fuertes bocanadas en busca de aire.

Cuando el vampiro estaba dispuesto a acercarse de nuevo a atacar, el humano habló con mucho esfuerzo.

-Si me matas...- una gran bocanada de aire tomo, mientras se retorcía en el suelo tratando de ponerse de pie.- No sabras...- pero antes de que siquiera terminara la oración fue lanzado nuevamente al otro lado del claro, los hermanos corrieron para tratar de detener a Alec.

El chico tosía a varios metros a la izquierda de todos, podían sentir el olor a sangre que brotaba de él, Edward se volvió hacia su hermano Jasper y lo vio conteniendo la respiración mientras intentaba detener a Alec con ayuda de Emmett.

-Lacey.- se escuchó muy bajo.

-No digas su nombre.- rugió encolerizado el vampiro antes de aventar a los tres vampiros lejos de él, corrió hacia el humano y lo levantó por la camisa para estar frente a frente.- No vuelvas a decir su nombre.- siseo hacia el muchacho, que parecía que se desmayaría en cualquier segundo.

-Alec debes detenerte, matar al muchacho no servirá de nada.- intento razonar Emmett con el.

-Tienes razón.- y por un momento todos pudieron estar tranquilos.- pero me hará sentir mucho mejor.- dijo para volver a arrojarlo como si de un muñeco se tratara.

-Se quien... hirió a Lacey...- fueron las únicas palabras que el muchacho logró decir antes de perder la conciencia.

-Ese pequeño bastardo se atreve a morirse antes de hablar.- gruño molesto el Vulturi, mientras limpiaba su ropa.

Los tres hermanos se vieron entre ellos y Edward escuchó lo que pensaban.

<<Esta malditamente loco>>

<<La pequeña Juliette se casó con un psicópata>>

-Lo llevaremos con Carlisle para que lo atienda y no muera, así podrá decirte lo que sabe.- intento razonar Edward al ver que ninguno de sus hermanos estaba dispuesto a hablar.

-Lo matare si se acerca a mi hija.

Y luego se largo dejándole el muerto a ellos tres.