CAP. 38

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-¿Que paso? - pregunto Jackson entrando a la oficina con la secretaría detrás de el.

- Disculpe - dijo la secretaría - Entro sin autorización - dijo mirando mal a mi hermano.

- ¿Acaso no sabe quien soy? - dijo mi hermano volteando a ver a la secretaría enojado.

- Cálmate - lo mire - Es mas importante tu hija - mire a la directora y luego mi hermano se sentó a mi lado y la directora siguió explicando el problema, la verdad no le encontraba lógica a lo que decía la mujer hasta que se me ocurrió una idea.

- Disculpe - la interrumpí - ¿Acaso no ha visto el apellido de mi sobrina? - la mujer nos miro raro y saco la carpeta donde se encontraba la información y lo miro.

- Dios - susurro - Disculpen mi falta de respeto - dijo nerviosa.

- No se preocupe - dijo mi hermano y lo mire raro - No pasa nada, solo quiero la información de los padres de esas niñas para poder hablar sobre la actitud de sus hijas en persona - Le sonrió y yo sin querer solté una carcajada.

- Disculpe - nos miro seria pero se que estaba asustada y nerviosa - Pero esa información no se la puedo dar - Dijo mirando hacía otro lado.

- Esta bien - rió mi hermano - Me temo que le tendré que dar esta noticia a mi padre y al parecer no le va a agradar nada que a su primer nieta la hagan eso... Pero no hay nada que hacer - miro con burla a la mujer mientras nos levantamos y pude observar como temblaba de miedo.

- Creo que... - busco unos papeles - Puedo hacer la excepción con ustedes - nos extendió 6 carpetas con el nombre de todas las niñas que se habían burlando de Sook y atrás venían los nombres de los papás y domicilios.

- Buena elección - dije sonriendo - Que tenga linda tarde - empezamos a caminar.

- Una cosa más - dijo mi hermano mirándola y volviéndose a acercar -Deme los documentos de mi hija, ya no vendrá más a esta porquería de escuela - la mujer enseguida se los dio y sin más salimos de allí.

- Sabes que le tendremos que decir de todos modos a papá sobre esto ¿no? - lo mire.

- Lo se hermana, no le podemos ocultar nada a nuestro padre - me miro y luego volteo hacia la salida donde se encontraba Sook en las piernas de Stephen.

- Vayámonos mi niña - dije cargándola.

- ¿A donde la llevas? - me miro Jackson - Tengo que hablar con ella - la miro sonriendo - Mi vida - me la quito - Tenemos que ir a casa por que tengo que hablar contigo y además, abuelo te mando unos regalos - enseguida los ojitos de Sook se iluminaron y se fueron en el auto de Jackson. 

- Creo que tenemos que volver a casa - dije caminando hacia la camioneta y luego subirme.

- Mejor vamos nosotros a salir - me mira Stephen entrando a la camioneta pero del lado del piloto - Recuerda que tenemos una cita pendiente - ¿Todavía lo recuerda?.

- Okey - lo mire sonriendo - ¿A donde vamos? - mire al frente, su mirada me ponía nerviosa.

- ¿A donde quiere ir mi reina? - reí por su forma de decirme.

- ¿A comer pizza? - le pregunte volteando a verlo.

- Pizza será - dijo poniendo en marcha la camioneta. 

(...)

- Llegamos - dijo Stephen estacionando en un tipo restaurante de pizzas muy grande.

- ¿Como encontraste este lugar? - le pregunte mirando por la ventana.

- Para eso existe el GPS cariño - dijo mientras me abría la puerta. Al entrar al lugar pude ver que era un lugar muy hermoso, había un área de niños súper hermoso, definitivamente tenemos que traer a Sook a este lugar - ¿Que ingredientes quieres que tenga? Para ir a pedirla - dijo mirando el menú.

- Mmmmmmm ¿Que te parece de 4 quesos? - lo miro feliz - Se ve como de comercial cuando la separas - puse mi mejor sonrisa.

- Me parece perfecto - dijo y toco un botón que estaba en medio de la mesa para que viniera un mesero a atendernos.

- ¿Ya decidió que va a encargar ? - pregunto la mujer mirando solo a Stephen, parecía que en cualquier momento se lo iba a comer.

- Si - me mira Stephen - Mi novia y yo ya decidimos - la mujer me mira con desprecio - Queremos una pizza de 4 quesos por favor - dijo tomado mi mano.

- ¿Y de tomar? - pregunto seria mirando nuestras manos.

- ¿Que quieres tomar cielo? - dijo Stephen mirándome y sin querer me sonroje.

- Quiero una soda - dije mirando a la mujer quien apuntaba la orden.

- Y yo quiero un cerveza - dijo Stephen mirando serio a la mujer, la cual termino de anotar y se retiro no sin antes decir que en 30 minutos estaría nuestra orden.

- Que horrible mujer - dije mirando hacia la ventana.

- ¿Por que? - me pregunto Stephen.

- ¿No viste que casi te come con la mirada? - dije mirándolo seria.

- ¿Celosa? - me miro con burla - No esta tan mal - dijo mirándola.

- Vale, entonces invítala a ella a comer - dije intentado pararme pero Stephen me jalo y me hizo sentar de nuevo pero ahora sobre sus piernas - Suéltame Stephen - dije enojada.

- No te enojes hermosa - me abraza - A la única que voy a invitar a comer va a ser a ti ¿Entendido? - dijo mirándome mientras quitaba un mecho de mi cabello y lo colocaba detrás de mi oreja.

- Vale - dije mirando a otro lado para evitar su mirada, me pone nerviosa y más esta situación en la que nos encontramos - ¿Ya me puedes soltar? - pregunte.

- Ya estas sentada - dijo mirando su celular, demonios Stephen, ¿Acaso no notas como me pones de nerviosa?.

- Stephen, la gente se nos queda mirando - dije viendo a una pareja de adultos que nos veían con desaprobación.

- Como se ellos en su juventud no lo hubieran hecho - Dijo Stephen rodando los ojos para luego soltarme y así poderme sentar a su lado.

(...)

- Aquí esta su orden - dijo la misma chica llegando con nuestro pedido - Provecho - y sin más se fue moviendo exageradamente las caderas, que asco.

- Dios, nada más de ver eso se me quitaron las ganas de comer - dije mirando el pasillo por donde se había ido la chica.

- ¿Enserio? - dijo mirándome divertido - ¿No se te antoja esto? - dijo cortando un pedazo de pizza y pude ver como se estiraba el queso, DIOS MIO!! ESTO ES COMIDA DE DIOSES!!.

- Pensándolo bien - dije sonriendo y haciéndolo reír.

- ¡¡¡ A COMER!!! - grito como niño pequeño haciendo que las personas que estaban cerca de nosotros nos vieran con ternura y otras con diversión.









MI ÁNGEL GUARDIÁN  《las apariencias engañan 》Donde viven las historias. Descúbrelo ahora