-SEGUNDA PARTE- Saga CONTROL
🌌⚔🌌
Levi se encuentra a total merced de sus sentimientos, de rodillas frente a lo que le dice su corazón, hacia Daira Earthart (La agente 13)
Pero nada parece ir así de bien al r...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Daira despertó cuando los rayos del sol dieron contra sus ojos.
Frunciendo el ceño giró su rostro al otro lado, pero no pudo mover el resto del cuerpo.
Abriendo los ojos lentamente, fue consiente de la posición y el lugar en donde estaba.
Con las piernas enredadas con otro par y las sábanas arrugadas cubriendolos hasta la cintura.
Ella tenía la cabeza recostada sobre el pecho de Levi, y al verlo dormido todavía, la memoria de la noche anterior la terminó por despertar.
Estaba abrazada por la cintura, así que no podía moverse demaciado.
Ahora que había luz, pudo notar algunos resguños en la piel de él. Algunos en sus brazos y otros en su pecho.
No, no eran suyos, pues también había algunos moretones en su abdomen. Estas heridas habían sido provocadas en la misión de ayer.
Con cuidado fue subiendo hasta quedar sentada y miró al rededor. La ropa de ambos estaba esparcida por el suelo o colgando de algún lado.
Se levantó para juntarla toda y dejarla en la cama, luego se vistió por completo y miró a Levi.
Se veía relajado y despreocupado, pocas veces se le ve así. Extendió sus manos hacia él, y caminó un poco.
Quería tocar su pecho en un acto de impulso y travesura.
Pero entonces las sabanas que cubrían su cintura bajaron por completo.
Daira llevó sus manos a su boca de la sorpresa.
En parte era por verlo desnudo a plena luz del día, pero la verdadera razón fue ver que la sabana había bajado por una luz roja.
Se miró las manos y convocó su energía, ¡y ahí estaba!. Brillando, viajando por entre sus dedos, haciendo ese caracteristico sonido susurrante.
Levi sintió un movimiento brusco por lo que despertó de golpe, frunciendo el ceño y con los parpados pesados.
-¡Levi, Levi!- alguien lo sacudía con las manos en sus hombros.
Abrió los ojos con molestia. -¿Que mierda?- Al acostumbrarse a la luz visualizó a Daira que tenía una bella sonrisa en su rostro.
Levi se vió a si mismo completamente desnudo y jaló la sábana para cubrirse, recordando inmediatamente la noche anterior.
-¡Levi, volvieron!- anuncia la agente.
-¿Quienes?- el pelinegro se sienta en la cama y se talla un ojo. Jamás había descansado así en años, y su cuerpo lo resentía como si hubiera descansado por días. Se sentía bien.
Daira se sentó junto a él y alzó su mano mostrándole su poder.
Él al verlo la tomó de la muñeca y luego la miró. -Debes estar feliz para despertarme así, Daira-
