¿𝐏𝐎𝐑 𝐐𝐔𝐄́ 𝐌𝐄 𝐎𝐃𝐈𝐀𝐒? | 𝐃𝐫𝐚𝐫𝐫𝐲

CAPÍTULO 15: Buckbeak

Cap 15. Buckbeak

—Te lo juro Herms —dijo el pelirrojo— Si seguimos con todo esto no llegaré a fin de año en mis cabales, te lo digo yo

—Venga Ron, no seas exagerado, estoy segura que no es para tanto —dijo la chica meneando la cabeza— Si no mira a Harry pobre, que se ha tenido que sentar con Malfoy

—Hablando de Harry, ahí viene

—¿Qué tal te ha ido Harry? —preguntó la chica compasiva, acariciandole el hombro a este

—De verdad, nunca habia conocido a una persona tan egocéntrica en mi vida —el chico suspiró— En verdad creí que en cualquier momento me metería la cabeza en el caldero, os lo juro —dijo el chico soltando una risa

—Pues yo me habría imaginado lo mismo, la verdad es que no se como lo has hecho para estar sentado junto a él más de una hora, Harry —dijo su amigo

—Ni yo, bueno ¿Y a vosotros que tal? —preguntó

—A mi Zabini no me ha dejado de hablar lo buenos que son su familia en el quidditch y que su madre es la hija de nosequien —dijo el pelirrojo rodando sus ojos

—¿Y eso es malo? A ti te habrá dejado hacer al menos una parte del trabajo —se quejó su amigo —¿Y a ti Hermione? ¿Pensy te ha molestado mucho?

—Pues no, la verdad —dijo la chica encogiendose de hombros —Yo también creí que me molestaría al igual que hace su amigo pero nada, me ha dejado hacer el trabajo tranquila y a veces me preguntaba cosas —explicó la chica con una media sonrisa

—Yo creo que estos estan tramando algo -dijo Ron mientras bajaba la voz —Es demasiado raro que ni siquiera nos hayan insultado

—Pero a ver Ron ¿Cómo van a planear algo si ni siquiera sabían que este iba a ser el castigo? A parte, habla por ti porque he escuchado perfectamente a Malfoy insultar a Harry —dijo la chica soltando una risa y mirando al pelinegro que asentía

—Yo no me fiaría un pelo de ellos, ya lo sabes —afirmó el pelirrojo volviendo su vista hacia otro lado con sus brazos cruzados

—Por cierto, cambiando de tema, ¿Qué asignatura tenemos después de comer? —preguntó Harry a su amiga mientras se dirigían los tres juntos a almorzar

—Tenemos Cuidado de Criaturas Mágicas, se supone que deberíamos tener esa clase con Ravenclaw pero por lo que ha dicho el profesor Dumbledore será con las serpientes —respondió la chica

—En tu caso, con el dragón de papá —dijo Ron riendose fuertemente de su propia broma y así contagiandoles la risa a sus dos amigos

—Tus bromas son pésimas Ron —dijo Harry riendo mientras negaba con su cabeza

. . .

—Me encantan las alitas de pollo que cocinan aquí —dijo el pelirrojo mientras se llevaba una a la boca— Tengo que pedirle a la cocinera la receta porque de verdad estan para chuparse los dedos

—Pero si las que cocina tu madre son geniales —expresó la chica que con dos ya había tenido suficiente y ya se disponía a comer una manzana

—Nno ez loh mizmo —dijo Ron con la boca llena provocandole una mueca de asco a su amiga

—Pues a mi me gustan más las suyas —afirmó Harry riendo.

Al terminar de comer, los tres amigos salieron del castillo junto a los otros estudiantes en dirección a la cabaña de Hagrid al límite del bosque, donde este les esperaba.

—¡Vamos, daos prisa! —gritó a medida que se aproximaban sus alumnos— ¡Hoy tengo algo especial para vosotros! ¡Una gran lección! ¿Ya está todo el mundo? ¡Bien, seguidme!