Es increíblemente incierto como el tiempo puede pasar rápido cuando estas junto a la persona que te hace sentir especial. Los días al lado de Alma son una cosa que me cuesta explicar a profundidad. Mi trabajo incluso, era corto cada vez que se trataba de verla a ella, compartir con ella o estar con ella.
Estoy en la oficina hablando con Frank sobre temas de negocios, la industria de abastecimiento alimenticio ha marchado de manera excelente.
Pienso cuando leo las cifras que Frank se ha encargado de otorgarme.
-todo marcha muy bien-comunico mientas analizo las estadísticas o ojeo mi ordenador portátil.
-la verdad, si.-anuncia el sonriendo ampliamente- amigo, es increíble como todo va en aumento.- me dice y puedo notar la alegría en su voz.
Yo comparto su alegría.
-concuerdo contigo.-digo.
Reímos y compartimos un poco más sobre los conocimientos acerca de los beneficios que nos surgen.
-podemos ampliarnos a nivel internacional.-expresa de manera remota su idea, me le quedo mirando.-puede ser un siguiente paso.
-si...-susurro mientras lo analizo.-tienes razón.-la idea me anima.- solo debemos agendar, realizar unas investigaciones y con ello estaríamos listos.
-bueno...El padre de Elliz tiene socios a nivel internacional ¿no? Podrías hacerle la sugerencia.
-prefiero hacerlo por mi propia cuenta-respondo ignorando su comentario.
-¿Por qué no con él?-cuestiona irguiéndose en si asiento.
-prefiero no involucrarlos en mis asuntos.-digo tratando de restarle importancia al tema.
-Mathias...-dice Frank mientras me mira con seriedad- desde hace unos meses te he notado menos...-creo que trata de buscar la palabra adecuada- interesado en Elliz.-continua- tampoco es que te hayas mostrado tan atento con ella desde que decidieron casarse pero-lo interrumpo.
-tú sabes perfectamente que yo no quería casarme con ella-respondo mientras mi ceño se frunce y trato de obviar el recuerdo de ese día- trate de llevar todo por la paz, brindarle un hogar, lo que ella desea. Pero no es lo que yo deseaba.-culmino por decir.
-Eso lo sé de sobra, amigo. Pero ella te atrapo.
-de la peor forma, en realidad-mi voz suena cansada y agotada.- lo peor es que aún no recuerdo todo, exactamente.-refiero mientras observo el vitral de mi oficina.
Elliz y yo éramos muy buenos amigos, a pesar de tener 16 años nos llevamos bien y eso era algo que literalmente me agradaba. Su amistad era algo importante para mí y ella lo sabía.
El problema reside en que ella dice estar enamorada de mí, en más de una ocasión me lo ha profesado lo que me ha hecho sentir patético al no poder corresponder sus sentimientos.
Un día sin previo aviso, accedí a acompañarla a una fiesta de sus compañeros del instituto. A pesar de tener 16 años misma edad que yo tenía nuestros padres nos dejaron asistir y quizás esa fue la peor decisión que pude haber tomado en mi vida.
-Mathias.- Frank me saca del recuerdo que se había apoderado de mi mente.
-Dime-comunico mientras lo miro tratando de actuar como si no hubiese sido despistado.
-te has puesto pensativo-me dice.
-no.-comunico mientras tomo mi móvil y trato de aparenta que leo un mensaje.
ESTÁS LEYENDO
Menor Que Yo
JugendliteraturAclaratoria: Primera perspectiva "Mayor que Yo". Muchas veces realizamos nuestras vidas con la persona que creemos es la "correcta" para nosotros, nos sentimos bien con ella o él así que decidimos forjar un futuro, de allí en adelante surge la mono...