Regresamos al departamento ebrios, Henry estaba sentado en el sofá esperando por nosotros y seguramente molesto. Al ver que entramos, apagó el televisor, nos dio una mirada con la cual pude descifrar que estaba decepcionado. Regresó a la habitación, me despedí de Chris y entré al mismo lugar.
Me acosté en la cama, mi novio se giró a verme.
—Tus clases empiezan el lunes, mañana iremos a comprar tu uniforme, tu padre vendrá a primera hora así que será mejor que no amanezcas con resaca—Cerro sus ojos y apague la luz de la pequeña mesa que había al lado de la cama.
Miré el oscuro techo, la luz de la luna entraba por las finas cortinas blancas que teníamos. Me levante y fui al vestidor, me cambie y me envolví en mis pijamas. Salí de la habitación y vi a Chris sentado en el sofá mirando televisión, me senté a su lado.
—Mañana vendrá mi padre—Murmuré—Henry está molesto. Y yo, infeliz.
Giró rápidamente a mirarme—:¿A qué te refieres? Creí que esto era lo que querías desde el principio, desde que te conocí. Murmurabas en las clases junto con Zayn y Sabrina cuánto anhelabas vivir aquí. Mostrándoles fotos de los paisajes y lugares a los cuales tenías que visitar si o sí.
Asentí, sonreí. El rostro de aquel moreno apareció en mi mente.
—Zayn—Murmure su nombre—Él y yo teníamos planes de vivir aquí. Decía que en cuanto renunciaras al cargo de director, tomaríamos un vuelo directamente hacia Canadá. Y después a Roma.
—¿Y ya no eres feliz?—Murmuró Henry, cerré mis ojos. La había cagado hasta el fondo.
—Es sólo que—Me detuve—Después de que deseas algo con muchas fuerzas, y planeas toda tu vida con una persona... Es una emoción tan hermosa, Henry. Con Zayn planeé toda mi vida, todos pensaban que terminaríamos casándonos con 2 hijos o tal vez más.
Me giré a verlo y estaba mirándome fijamente, la luz del gran televisor me permitía ver su figura.
—Y ahora que sólo tengo las cenizas de aquel libro que nunca terminamos de escribir... Es doloroso—Agache mi mirada—No voy a mentir, llevo siendo infeliz desde aquella noche de julio. 14 años. Sólo tenía 14 años, y descubrí lo que era la infelicidad. Un infante, ¿huh? Las vidas de los millonarios son más complicadas de lo que suelen aparecer en las películas.
Pausé, tomé aire y volteé a la televisión, el programa repetido, la misma película. Comer, rezar, amar.
—Ver a tu madre inhalando cocaína para olvidar las infidelidades de tu padre, mi hermano fumando marihuana y mi hermana... Siendo la sensación de los socios de mi padre—Murmuré—Y yo, la próxima víctima de Shawn.
Abrace mis piernas, recargando mi cabeza en mis rodillas, sentí el cálido beso de Henry en mi frente, sonreí a medias.
—Soy tus ojos—Alce mi mirada hacia la suya—Él es tus oídos. Te vamos a cuidar y jamás, jamás te haremos daño. Seríamos incapaces de hacerlo. Eres lo mejor que le pudo haber pasado a mi vida, ¿Crees que sería capaz de arruinarlo todo? Entiendo tu frustración, lo viví también. Pero debes avanzar, Lau. No puedes estancarte en un solo recuerdo, fue una lástima lo qué pasó con Zayn pero ahora él es feliz. Y creo que tú también deberías serlo.
Puso su mano en mi mejilla, acariciando la, coloqué mis dedos sobre su dorso, besé su mano.
—Vayamos a dormir, hace frío—Murmuré, me levanté, tomé la mano de Henry y extendí la mía en dirección a mi roomie—Chris, ¿Vienes? Estaremos a 0º , probablemente se te congelarán los dedos de los pies.
Asintió y caminamos hasta la habitación, Henry bajó sábanas del closet y las colocó encima, ellos de inmediato comenzaron a hacer cucharita, fruncí mi ceño.
—Yo quería estar en medio—Contesté haciendo pucheros, se separaron y me acosté, abracé a mi novio y Chris a mí—Buena noche. Gracias por todo.
Cerré mis ojos y dejé que la bruma del sueño me atrapara.
(...)
—¡Vamos, Lauren!—Gritó mi padre desde la sala, estaba golpeando un sartén con alguna cuchara, haciendo el peor ruido de todos. Entro a mi habitación—Demonios, no me esperaba esto.
—¡Papi!—Grité animadamente mientras trataba de salir de la cama brincando, me lance a sus brazos y éste me correspondió de inmediato—Que gusto verte, ¿Disfrutaste el viaje? ¿Ya desayunaste? Henry me prometió que iríamos a desayunar a Starbucks, ¿Quieres ir?
—Claro que sí, Mich—Beso mi cabeza—Lo que diga mi princesa. Te espero en la sala mientras arreglas tu asunto.
Señaló mi cama, gire y vi a Henry y a Chris saludando animadamente. Sonreí, cerré la puerta y me lancé de nuevo a la cama, besé los labios de mi novio y después los de Ellington.
—¿Otra vez?—Preguntó el ruloso, asentí y él sonrió—No te pagaré, Christopher, así que evita cobrarme.
Reí y nos empezamos a vestir, hoy sería un gran día. Mi padre estaría en la ciudad, e iríamos a comprar mi uniforme, a que Henry y Chris tuvieran su entrevista de trabajo formalmente y pudiesen responderles la petición, después seguramente asistiríamos a algún evento lujoso que existiese en Canadá.
—Ópera—Contestó mi padre—¿Les gusta la ópera, caballeros? Ah, Lauren te tengo una sorpresa.
Adoraba las sorpresas de mi padre.
—Toda la familia Hamilton asistirá a la Ópera—Sonreí y me acerqué a darle un pequeño beso en su mejilla—Así que, todos sin excepción alguna conseguirán ropa de lujo, es una función única y ha sido la más premiada de la década, así que más les vale ir lo más elegantes que puedan.
Sonreí y tocó con su índice mi nariz. Seguimos caminando dentro del nuevo colegio. Saint Nicholas. Parecía sacado del renacimiento, la estructura era gótica y los salones eran demasiado modernos. Me encantaba mi nueva escuela.
Compramos el uniforme y después iríamos a las próximas dos escuelas, primero a Whistler donde Chris haría su entrevista, por último a Okanagan Mission para Henry.
Habían querido que siguiese su desempeño como docente y yo no podría estar más encantada, así me ayudarían con mis tareas.
Al salir de Saint Nicholas, choqué por accidente con un chico, alto, piel blanca, cabello castaño y algo ruloso. Ojos avellana y un poco alto, se disculpó y siguió su paso.
No le tome importancia, las siguientes 3 horas, estuvimos en la camioneta con mi padre, nuestros estómagos rugían y rogaban por comida. Llegamos de nuevo al departamento.
—Quiero pizza—Le murmure a Henry mientras abría la puerta.
—Pizza será—Contestó sonriendo y guiñándome un ojo.
Le susurré un te amo y él sonrió. Entramos al departamento y se dedicó a buscar el número de las pizzas hut, me arrojé al sillón con intención de dormir en lo que llegaba la pizza, mi teléfono vibró. Lo saqué del bolsillo de mi pantalón y vi que era de Chris.
"Ven a mi habitación"
Sonreí a medias y corrí, me introduje y cerré la puerta con seguro. Lo miré fijamente y empezamos a besarnos, me recargó en la pared mientras apretaba mis caderas, subí mi pierna y éste deslizó su mano hasta llegar a mi entrepierna, solté un suspiro ahogado en el beso.Me separé y sonreí, me dirigí a la puerta Chris me soltó una nalgada. Salí, me introduje a mi habitación, me arrojé a la cama esperando a que me despertasen cuando la pizza llegara.
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DULCE TENTACIÓN ///EDITANDO\\\
Teen FictionNOVELA MULTIFANDOM Lauren Hamilton, es una atrevida adolescente, capaz de conseguir lo que quiera sin importarle a quien tenga que herir para obtenerlo. Pero aquel anhelo, se escapará de sus manos en cada tragedia que le pase. La dulce tentación cor...