Llegamos al lugar de la fiesta y Paris rápidamente se acercó hacia nosotros. Ella era la única chica fuera de nuestro grupo que podía soportar, sólo por el simple hecho de que encubrió lo qué pasó entre mi padre y el de Esther. La rubia se acercó a abrir la puerta de aquel jeep para dejarme bajar, baje primero y enseguida Ashton queriendo tomar mi mano a lo cual la removí para saludar a las chicas que querían pertenecer a mi squad.
Al adentrarme a aquella fiesta, en el fondo de la sala, vi a un hombre bastante guapo, alto y piel blanca con barba y cabello rizado negro. Rápidamente troné mis dedos y Paris se acercó.
—¿Quién es él?—Pregunté mientras sentía como Ashton acariciaba mi cintura, me giré a verlo y me entregó una copa de Champagne—Gracias, cariño.
—Él es el mejor amigo de mi padre, trabaja en su empresa, de hecho, son socios—Alce mis cejas—Varias chicas han tratado de acercarse a él pero no lo han logrado, cada que se acerca alguien él dice "No" con su perfecto acento británico.
—Suena favorecedor—Vi que el nuevo rodó sus ojos y se retiró de aquel lugar, giró su cabeza hacia mí y sonreí—Uf, y ese cuerpo tallado por los dioses griegos.
Comencé a caminar en dirección a aquel empresario, no sin antes arrojar a algunos besos hacia los chicos que se atravesaban en mi camino, a lo lejos vi que se detuvo en una habitación, volvió a mirarme y se adentró. Agarre la botella de champagne y una copa limpia, fui hacia aquel lugar.
Abrí la puerta y ahí estaba él en el balcón. Las cortinas volaban debido al viento que hacía.
—Señorita Hamilton—Sonreí—He oído de usted.
Cerré la puerta azotando mi trasero en ella, con mi mano libre puse el seguro.
—¿Ah, sí?—Murmure mientras me acercaba—¿Champagne?
Tomó la copa limpia que le ofrecí, serví un poco y él asintió.
—Algunas bastante buenas—Miro mis pechos—Otras bastante malas.
Deje la botella en alguna mesa cerca y camine hasta llegar donde estaba y me recargue en el balcón mirándolo.
—¿Y usted es?—Pregunté invitando a que me dijera su nombre.
—Henry—Murmuró, bebió de su copa—Henry Moore.
Sonreí y estiré mi mano.
—Un gusto, Henry—Sonrió de lado y estrechamos las manos—Las cosas malas dependen de mucho, para algunos el no tenerme a su disposición es malo y se llenan la boca de falacias.
—Suenas bastante segura de tus palabras, como si nunca hubieses hecho nada malo.
—Por supuesto, ese es mi secreto. Algunas damos las órdenes, y otros las acatan, eso es lo que queda claro en todos los aspectos y sentidos que se pueda imaginar, Señor Moore.
Sonrió—:Ya lo veo, Lauren.
—Le juro por mi vida que he sido una buena chica—Me acerqué a él, no se tenso ni movió de su lugar, al contrario, lamió sus labios más de una vez. Mire su cuerpo en aquella chaqueta negra de cuero, camiseta blanca y jeans ajustados—Hoy no quiero ser ella.
Regresé mi mirada a su rostro, rápidamente me lancé a sus labios a lo que Henry respondió de inmediato, poniendo sus grandes manos en mi cuello.
Las copas cayeron al suelo rompiéndose, reí ligeramente en los labios de aquel hombre. Tenía que hacer que pidiera por más, me buscara por todos lados hasta encontrarme, pedir mi número con todos mis amigos. Amaba provocar, así fuese hombre o mujer, me divertía demasiado. Y aún más cuando eran mayores.
Me separé y lo arrojé a la cama, él rebotó en ésta y puso su mano en su entrepierna acariciando, estoy 99% segura de que es grande. Realmente grande.
Me subí a gatas y éste no pudo controlar su pesada respiración, me acerqué a dejar un beso húmedo en su cuello y escuché claramente como soltó un pesado suspiro.
—Aún no—Murmuré y me quite de encima. Rodó sus ojos, caminé de vuelta a la puerta, quite el seguro. Tome el pomo y me giré a verlo—Un gusto, Señor Moore.
Sonreí no sin antes lanzar un beso al aire y guiñarle un ojo. Salí de aquella habitación caminando triunfante hasta llegar al expectante patio trasero donde estaban mis amigos bailando animadamente, el volumen estaba tan alto que sentía retumbar mi cuerpo en cada zumbido de las bocinas. Me acerqué a Ashton y éste comenzó a reír al darse cuenta de lo que había hecho.
—Otro mayor, ¿No es así?—Grito en mi oreja, asentí—Esa es mi Lauren.
Sonreí y comencé a bailar al mismo ritmo de The Less I Know The Better, me quite la chaqueta negra que me había puesto antes de venir a la fiesta y la arrojé a algún lado, era un regalo que Zayn me había hecho en nuestro segundo aniversario.
Veía como las personas gritaban de emoción en algún lado del patio, me dispuse a mirar por todos lados hasta dar con la razón. Y la razón era un Henry Moore haciendo striptease, había chicas y chicos apoyando a qué siguiera haciéndolo.
Ashton tomo mi cintura, y comenzamos a caminar hacia el lugar donde se encontraba el señor Moore.
—Provócalo—Murmuró en mi oído y asentí.
Puse mis manos en el cuello de mi amigo y miré sus ojos color hazel, estaban tristes no tenían ese usual brillo que siempre resaltaba.
Besé sus labios delicadamente y éste no tardó en quitar mis manos de donde estaban para ponerlas en mi espalda agarrándolas con una sola mano, haciendo ver la situación cada vez más sumisa. Las soltó de inmediato y empecé a bailar para él, subiendo mi corto vestido de vez en cuando para mostrar aún más piel, rápidamente las miradas se acapararon en mí al ver mis movimientos, a unos cuantos metros de mí estaba la mesa donde Henry minutos antes hacía un baile, me subí y comencé a bailar aún más sensual para atraer su atención.
Sentí sus manos en mi cintura tratando de apegarme a su majestuoso cuerpo, las tomó ferozmente y pude sentir lo que había logrado, sonreí triunfante. Ashton sólo miró triste, dio una media sonrisa y se fue.
Me giré a encarar a Henry y alce los hombros.
—¿Por qué no?—Murmuré entre todos los gritos de la multitud y la música que retumbaba. Tome su suave rostro entre mis manos y acerqué mis labios a los suyos de una manera lenta, sus dedos se encarnaban en mi piel cada vez que mordía su labio.
Sus finos y largos dedos se deslizaban hacia mi trasero alzando un poco mi vestido, dejándolo a la vista de los que estaban gritando al ver aquella escena.
—Consigamos una habitación—Murmuró Henry en mis labios. Negué—¿No? ¿Quieres hacerlo aquí enfrente de todos?
Soltó en un tono burlón.—Mejor, vayamos a mi departamento—Él asintió mordiéndose su labio, de un brinco bajo de la mesa y me ayudó a bajar.
Busque a Ashton con la mirada y lo encontré besándose en una esquina con Caitlin. Salí de aquella mansión, justamente iba a sacar mi celular para pedir un Uber pero Henry se puso delante mío, creí que quería besarme así que me acerqué a sus labios y dejé uno pequeño, volví a la pantalla de mi celular.
—¿Me vas a estar ignorando con tu celular?—Pregunto molesto, negué—¿A quién texteas?
—Estoy pidiendo un Uber para ir a mi departamento.
Murmuré sin quitar la vista de mi teléfono.—Me vine en camioneta, vamos. Sólo dime la dirección—Asentí y él suspiró, guardé mi celular y comenzamos a caminar hasta llegar a su transporte.
—Avenida Wiltshire 934—Solté coqueteando.
Sonrió y me abrió la puerta de copiloto de su camioneta, la cerró y vi como camino lentamente hasta llegar del otro lado, giré la vista para ponerme el cinturón de seguridad y vi a Ashton en la entrada de la casa observando todo.
—¿Estás segura de hacer lo que haremos?—Henry me saco de aquella burbuja, voltee a mirarlo y asentí—Está bien, hermosa
Acercó sus labios a mi frente y la beso ligeramente, traté de buscar a Ashton viendo hacia la entrada de la mansión de Paris pero ya no estaba.
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DULCE TENTACIÓN ///EDITANDO\\\
Teen FictionNOVELA MULTIFANDOM Lauren Hamilton, es una atrevida adolescente, capaz de conseguir lo que quiera sin importarle a quien tenga que herir para obtenerlo. Pero aquel anhelo, se escapará de sus manos en cada tragedia que le pase. La dulce tentación cor...