JUEGO DE GEMELOS

Parte 7

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Y de repente Ha Ni abria su alma a un muy atento Ji Hoo. Abrir su alma para ella era contarle las cosas mas privadas de su vida, pero el silencio con el que la oía y la atención que parecía ponerle generaban en Ha Ni una confianza que no tenia digamos que con Joon Gu. 

No esperaba que aquello ocurriera tan rápido pero ella, tan torpe como era, respondía a la amabilidad como las plantas a un poco de agua después de días y días recibiendo sol.

Con todas las horas que estuvieron conversando, aunque podía decirse que ella fue quien hizo el ochenta por ciento de la conversación, ella revelaba mas y mas de su excéntrica personalidad y Ji Hoo sabia que por mas tiempo que pasara no iba a aburrirse con la inquieta Oh Ha Ni.

Un cambio bastante refrescante en su vida plana, a excepción de sus amigos y su clínica.

Por otro lado, aunque hablaba hasta por los codos Ha Ni era una presencia agradable y ese fue el primer indicio que tuvo de que no cometió un error por la decisión que tomó el día que casi la atropella. Puede que fuera una amistad que le interesaba cultivar, puede que fuera otra cosa, no iba a cejar en su intento silencioso de averiguarlo.

Permanecieron bebiendo y hablando hasta que Ga Eul tuvo que cerrar, les pidió salir con pesar, y Ji Hoo dijo que llevaría a Ha Ni a su casa.

Ambos volvieron a subir a la moto y Ha Ni se sorprendió de lo mucho mas que le gustó este segundo recorrido. La ciudad en la tarde noche era muy interesante de contemplar y se sentía casi que segura estando abrazada a la espalda de Ji Hoo. Lamentó profundamente no sentir nada especial por él en ese momento, de otra manera ese recorrido hubiese sido el furor de su vida.

Le indicó por señas donde debía dejarla y así lo hizo.

- Gracias por hoy - comentó Ha Ni, entregando el casco.

- De nada, fue bastante... entretenido -

- Jaja - dijo Ha Ni negando con la cabeza ante su hesitación -  no tiene que decir eso para hacerme sentir mejor, sé que hablo demasiado -  la joven bajó la cabeza un poco.

- Y yo casi nada, así que estamos empatados - Ha Ni sonrió suavemente y le dijo adiós con la mano.

Cuando cerró al puerta de la casa de los Baek recordó con cierta tristeza que no le dijo nada de verse nuevamente ni le pidió el teléfono del móvil. Aunque ella sabía donde encontrarlo tampoco se atrevería a ir a buscarlo para tomar mas café y contarle todas las cosas que no pudo contarle antes, aunque ya le contó mucho.

Negando con la cabeza y sonriendo por su propia torpeza que, por primera vez en esa noche, no vió como algo negativo de su carácter, entró a la casa de los Baek donde estaban sirviendo la merienda.

- Ha Ni, querida, ¿donde estabas? -

- Tomando un café - dijo Ha Ni sin intención de contar nada mas que ello, teniendo en cuenta que Geum Hee era su principal aliada en sus intenciones del pasado de conquistar el corazón de Seung Jo. Sabía que la lastimaría si le decía que estaba con otro chico, y aunque las intenciones fueran del todo amistosas sabia que la señora Baek no se lo tomaría bien. Otra persona mas a quien ocultar la presencia del médico Ji Hoo en su vida.

Hasta donde sabía nadie sino ella misma conocía la existencia de ese médico, bueno la excepción era su padre que no había hecho mayor mella en el hecho del parecido, pero nadie cercano a ella sabia que habían tenido una especie de cita donde ella misma no dejó de hablar la mayoría del tiempo y que aunque no quedaron de verse nuevamente en el fondo de su ser era lo que ella misma quería.