Con todos los presentes pendientes de él y entre bromas e indirectas que iban de lo ridículo a lo obsceno, Dohko empezaba a arrepentirse de haber dado luz verde al juego propuesto por el antiguo patriarca.
- Oíd... -comenzó, pero Saga le sujetó por el cabello y acercó la cabeza a su torso, dejando que el otro olfatease el dulce antes de aventurarse a abrir la boca para degustarlo- Hum... Mmmpffff... ¡Joder, esto sabe fenomenal...! ¿Lo has hecho tú mismo, Death?
- ¡Chupa y calla! -ordenó Shaina, soltando una carcajada que fue secundada por el resto.
- Pues claro que lo he hecho yo -se pavoneó Deathmask-. ¿A cuántos caballeros conoces que tengan mi habilidad en los fogones?
- ¡No le distraigáis, que tiene que adivinar dónde ha puesto la boca...! -les reconvino Milo, mientras Dohko apuraba su ración de pastel.
- Uf, no sé, creo que era... ¿el pecho? -especuló, recibiendo un aplauso de sus amigos por su acierto.
Kyrene y Afrodita lanzaron un par de dados para decidir quién sería el siguiente y la suerte se pronunció a favor de él. Chistando para que nadie desvelase la ubicación del pastel, la chica tomó un trozo y lo aplastó contra el cuello del caballero de Piscis, riendo sin parar.
- ¡Venga, Dohko! ¡Esta es fácil! -exclamó, guiando al chico hasta su víctima.
- ¡Lo es! Es el cuello de Dita... La combinación de chocolate y olor a rosas es un poco rara, pero me gusta -respondió Dohko, dando buena cuenta del bizcocho mientras Afrodita se retorcía intentando aguantar las cosquillas que la lengua de su compañero le producía.
- Yo quiero probar eso -declaró la amazona, al tiempo que se acomodaba detrás del sueco para ayudar al cumpleañero-. Dioses, Death tiene las neuronas justas para pasar el día, pero hay que reconocer que la cocina se le da de lujo... -añadió, mientras pasaba los labios y los dedos por el cuello de Afrodita para retirar las migas.
- ¡Por Atenea, parad ya, esto empieza a gustarme demasiado! -suplicó él, con los ojos cerrados.
- Bueno, si te empeñas... ¡me toca a mí! -afirmó Shaina, cada vez más animada, tomando un pedazo de pastel con la mano, como indicaba su papeleta, para ofrecérselo a Dohko.
- Esta es más fácil todavía... -suspiró Dohko, lamiendo uno por uno los dedos de la chica como si fuesen piruletas- ¡Tus uñas son inconfundibles!
Deathmask observó a Kyrene de reojo: a pesar de estar más sobria que cualquiera de sus compañeros, o quizá precisamente por ello, el color de sus mejillas y su mirada vidriosa indicaban que el juego le resultaba tan excitante como a los que ya estaban inmersos en él. Mientras todos miraban cómo Shaina introducía y sacaba los dedos de la boca de Dohko, que los succionaba con deleite hasta dejarlos limpios, él mordió lascivamente el cuello de la camarera, que tuvo serias dificultades para disimular el escalofrío que el inesperado contacto le había provocado.
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La redención de Cáncer
Fanfiction*[CONTIENE LEMON Y VIOLENCIA]* Los caballeros de oro habían sido devueltos a la vida por Atenea tras lo acontecido en el muro de las lamentaciones y en Asgard. Sin embargo, no todos disfrutaban de su nueva oportunidad: Deathmask, atormentado por la...