🍋; 𝙲𝚒́𝚝𝚛𝚒𝚌𝚘.

[🍋]-; d o c e.

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Kang Dongho era su nombre; cabello morado y de aspecto fornido, estudiante de último año y apodado Baekho. Seungcheol lo estaba viendo en ese momento mientras comía tranquilamente apartado de toda la escuela. Había hablado con los chicos diciendo que necesitaba un tiempo solo para lograr su meta, por lo tanto pasaría varios recesos solo. Dongho nunca pensaría que Seungcheol era consiente de que lo estaba viendo, él solo estaba sentado a unos metros de él mirándolo de manera discreta.

Había visto a Jihoon en otra parte comiendo solo, respiró aliviado cuando supo que tres de sus cinco agresores principales no habían asistido a clases y que los otros dos estaban ocupados haciendo tareas. Sólo rogaba porque se mantuviera así hasta mañana, estaba seguro que a partir del lunes pondría todo en marcha de una vez por todas. Había notado la mirada triste del pelinegro, aún más triste que de costumbre, sin embrago seria un gran riesgo preguntar y en todo el día no hubo oportunidad para hacerlo.

El jueves estaba frío como ya era costumbre en esa época del año ya entrando Octubre, pronto los árboles perderían hojas y se formaría un paisaje más cálido aunque el frío aumentaría. Seungcheol pasó las últimas horas de clase en la biblioteca escolar adelantando sus tareas aprovechando que las últimas horas las tuvo libres, se sorprendió cuando detrás de él entró el chico de cabello morado quien cubría su cabellera por un gorro de lana negro dejando solo a la vista un pequeño flequillo. Dongho estuvo todo el rato ahí a una distancia de unas mesas atrás de la suya haciendo absolutamente nada, solo puedo ver que ojeaba un libro cualquiera que había tomado de una estantería cercana, pero podía sentir su mirada sobre él como si quisiera leerlo a través de su piel o algo así de turbio.

Cerca de las dos de la tarde cuando ya era la hora habitual de salida, Seungcheol suspiró, recogió sus cosas y salió del lugar sin mirar atrás, estaba seguro de que Dongho estaba aún tras él, lo cual significaba un peligro inminente para su plan. Estaba decidido a ir ese mismo día a ver a Wonwoo en la cafetería temática en donde según Jun, se quedaba haciendo sus tareas.

Seungcheol lo tenía todo planeado, tenía planeado entrar a la cafetería de manera casual, acariciar algunos gatitos y sentarse en la misma mesa que Wonwoo a esperar a que algún empleado del lugar se acercase a tomar su orden, actuaría como si fuera un encuentro casual y tendría que ser muy minucioso al hablar. Sabía que Dongho no entraría a un lugar tan pequeño y también que no conocía a Wonwoo. Su plan debía ser perfecto si no quería ser atrapado antes de lo previsto.

Y ahora que sabía quién era la persona que lo estaba siguiendo, le haría el trabajo más difícil, no iba a dejar atraparse tan rápido, antes iba a hacer de todo para desviar cualquier sospecha respecto a su objetivo.

Cruzo largas calles en dirección al centro, mientras salia de la escuela se había colocado sus audífonos e iba escuchando música a un volumen moderado. El viaje iba a ser largo, pero no quería ser tan obvio de que sabía que lo estaban siguiendo al tomar el bus, le daría varios problemas al Dongho, aunque la idea de perderle le llamaba mucho la atención. Ajustó su chamarra y aferró con fuerza sus manos a su mochila caminando con tranquilidad entre las calles largas y algo concurridas de la ciudad. En la mañana antes de salir le había dicho a su madre que iba a llegar aún más tarde de como era su costumbre porque según iba a salir con Seungkwan.

Alrededor de las dos y cuarenta de la tarde había llegado al centro en donde ralentizó su velocidad viendo con atención los productos de las tiendas a través de los cristales. Después de unos minutos, llegó al área de comida, sabía que al final del pasillo estaba la cafetería en donde tendrá que buscar a Wonwoo. Tomó aire y levantó su teléfono para ver disimuladamente hacia atrás verificando que Dongho seguía tras él.