Durante años se suponía que Charlie Weasley no tenía hijos, o novia aunque sea. Pero hubo algo que hasta el mismo Charlie desconocía.
Ocurrió durante una fiesta en la que él estaba con un amigo y dos chicas se sentaron junto a ellos mientras coquete...
Al cabo de unas semanas, casi al final de curso, Ethan ya había puesto a Sean en su lugar.
Leah lo recordaba a la perfección: Ethan lo amordazó contra un árbol (no era el Sauce Boxeador), y le puso polvos fétidos en los pantalones. Les costó un castigo a ambos, a Ethan por hacerlo y a Leah por ver y no hacer nada al respecto. Tuvieron que limpiar la parajera con un cepillo de dientes una semana.
- Pero ve el lado bueno - le dijo Jack -. Ya no hay amenazas...
- Nunca la hubo - lo corrigió Leah -. A mí jamás me gustaría Sean.
Ethan suspiró aliviado. Él no desconfiaba de Leah, solo que temía que cambiara de opinión. Aún faltaban algunos años, pero Ethan aún tenía miedo de decirle a Charlie que se casaría con su hija. Se imaginaba la reacción del padre de Leah tipo:
- Aaaah, mira que niño tan lindo - decía susurrando de manera muy peligrosa y Leah rodando los ojos detrás de su padre -. ¿Y de verdad crees que te dejaré casarte con mi hija? ¿MI ÚNICA HIJA?¿Y QUEDARME SOLITO?
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Y luego imaginaba que Charlie lo retaría a qué sobreviviera un día encerrado en la jaula de un dragón. Y que Fleur se enojaba con Charlie por ser tan territorial y se llevaba a su bebé Leah con ella una semana lejos de Charlie e Ethan.
Nadie podía culpar a Ethan por pensar así, pues en ocasiones Charlie llegaba a ser más dramático que una Drama Queen. No dejaba que nadie le quitara a su hija a excepción de Bill, Fleur y a veces George.
Si Charlie llegaba a darle su bendición a Leah, Ethan estaba seguro de que el hombre iba a rociar su perfume sobre Leah el día de la boda para recordarle a Ethan que no se entusiasmara demasiado.
- ¿En qué piensas? - interrumpió Leah
- Nada - mintió. Leah seguro se reiría del miedo que a veces Ethan le tenía a Charlie -. Bueno, pienso en lo que le diré a tu papá ¿Me matará?
- ... Lo dejaré en talvez - respondió Leah, dejando a Ethan sin esperanzas de salir vivo de esa futura conversación -. Pero si quieres atraparlo de buenas, te recomiendo decírselo cuando desayune pancakes con mermelada de fresa - le recomendó -. Después de comer siempre está de buenas. Aunque no inmediatamente después de comer, puede que vomite y ahí ya la cagaste
- Creo que lo tomaré en cuenta - susurró Ethan
*****
La semana de los exámenes fue terrible. Leah tuvo que pedirle a Slughorn pociones relajantes para Victoire ya que apenas en su primer año, Victoire estaba estudiando temas que ni Leah había visto aún en clase, creyendo que podría haber una pregunta sorpresa.
- Cariño, apenas estás en primer año - le dijo Leah -. Creo que te estresas demasiado
- Tengo las vacaciones para descansar - repuso Victoire tomando notas como zombie -. ¿Tienes más poción?
