👚Capítulo 27👚

339 39 64
                                    


''Es raro cómo las cosas pueden volver a cambiar tan repentinamente como lo hicieron en un principio.''

—Las ventajas de ser invisible.

—Las ventajas de ser invisible

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

—¿Y bien...?

—Ya le dije a Naruto.

Un pequeño silencio se instaló entre ambas. Era receso, y reconociendo que la mayoría de nuestros compañeros estaban en la cafetería nos habíamos sentado en el suelo junto a los casilleros para mayor privacidad. Habían algunas personas pasando frente a nosotras, pero nos ignoraban, no éramos tan relevantes, aunque sí admitía que llegamos a ser objeto de burla de algunos idiotas —esto porque ya no era ningún secreto lo sucedido con Sasuke y Naruto—, nunca nos dijeron nada directamente, lo que fue un enorme alivio.

Asentí aún siendo consciente de que no me estaba viendo. Las dos veíamos al frente sin un punto de atención definido.

—¿Qué tal salió eso?

Ella suspiró.

—Su reacción fue... Como la imaginé al principio —confesó algo deprimida—, no me creyó, luego se alteró, cuando se calmó continuaba muy nervioso así que me sentí presionada ha decirle que no lo pensaba obligar a nada.

—¿Exactamente qué te dijo? —pregunté abrazando mis rodillas.

—Bueno, él rió sin saber que hacer y negó rápidamente, me dijo que era su culpa y que por supuesto que se haría cargo... Fue un alivio, me dijo que estaría para lo que necesitara. Aunque al principio no dejaba de hacer preguntas como, ¿cuanto llevas embarazada? ¿Tus padres lo saben? ¿Has pensado en algo? Y estaba aturdida.

—No suenas muy alegre.

—No lo estoy. —Respondió con tono melancólico—, estoy muy confundida.

—Es normal en tu condición —Mencioné—, tienes diecisiete años y serás mamá.

—Aún no entiendo cómo no estoy tres metros bajo tierra.

—Porque si llegaras a morir yo misma me encargaría de revivirte para luego volverte a matar por haberte matado.

—Vaya trabalenguas —rodó los ojos.

—Así me amas.

Recostó su cabeza sobre mi hombro como una niña pequeña en busca de atención.

—Tengo mucho miedo... —Confesó aterrada por lo que estaba ocurriendo, con la mirada baja y la voz ligeramente temblorosa.

Paso mi brazo sobre sus hombros atrayéndola hacia mí para mayor comodidad.

—Todo estará bien, lo prometo.

Nuevamente estaba yo haciendo promesas que no podría cumplir, esta en especifico, reconocía que por más que intentara no dependía de mí, sólo me quedaba apoyarla en el proceso y ver que sucedía. Aún estaba intrigada por lo que sucedería con Naruto y Hinata, iban a ser padres pero no querían ser pareja, o mejor dicho, Hinata no quería, estaba muy dolida como para aceptar ese compromiso, así que preguntaba como iban a resolver y sí acaso pensaban decirle juntos a sus respectivos padres, aunque eso ya era cosa de ellos prefería no ser una entrometida.

You Found Me ¦ SasuSaku. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora