—Padre, ¿estás diciendo que conseguiste camarera?
—Si, y tú serás el primero en probarla.
—¿Tendré oportunidad de probarla?
—Así es, necesito que le des el visto bueno para ver si se queda o se va, a simple vista es sexi pero no sabemos como es en la cama, y no podemos permitirnos darles cualquier cosa a los clientes.
—Entendido.
Narra Corina
20:30 y ya estoy lista, me puse un short corto que resaltaba muy bien mi trasero y mis largas y estilizadas piernas, también me puse un top con tiras que dejaba al descubierto un poco de mi estómago no muy trabajado pero sexi, cogí las llaves de mi motocicleta.
Ya son las 20:40 y hay como una hora de hasta el bar no puedo llegar tarde el primer día, luego de exactamente cincuenta minutos de viaje.
{•••}
Estacioné mi moto y entré al bar que ya se encontraba lleno, no en su totalidad pero comenzaba a llenarse, caminé hasta la oficina de mi jefe, no sin antes percatarse de las miradas que se dirigían a mi trasero, ante este no tan raro suceso, sólo atiné a sonreír y a seguir mi camino, entré a la oficina y mi jefe me invitó a sentarme nuevamente.
—Muy bien, este es tu uniforme —dijo entregándome un simple mandil.
Este se ataba en la cintura y que me quedaba un poco más arriba de la rodilla.
—¿Algo más que necesite saber? —pregunté.
—Tienes descanso de doce a una de la noche y terminas a las 04:00 de la mañana, puedes retirarte. —dijo.
Salí de la oficina colocándose el delantal para comenzar a tomar órdenes.
{•••}
Esto es agotador, llevo 1:50 minutos trabajando y ya he tomado más de veinte órdenes. Este bar va a explotar, si que recibiré buena paga por esto, veo mi reloj y ya son las 23:55 tomaré la última orden para poder descansar un rato.
Luego de tomar la última orden me dirijo a vestidores para dejar mi delantal y subirme un poco el short, así conseguiré más rápido a mi primer chico sexi. Termino de arreglarme y caminé para salir de los vestuarios hasta que me choqué con alguien que me acorraló en la pared, vaya, que rápido consigo sexis chicos.
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Conocidos por el sexo | Christopher Vélez
RomanceCorina Owens no era la típica chica normal, a ella le gustaban cosas diferentes, a comparación de sus amigos, tenía la mente más avanzada, o tal vez se debía a que era huérfana de madre. Al cumplir los dieciocho ya no le importa nada más que dejar d...