(Si aún no has leído el capítulo final, da para atrás 👈🏼⚠️)
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Carry on my wayward son
There'll be peace when you are done
Lay your weary head to rest
Don't you cry no moreI
Era un amanecer. Ni siquiera sabía que era esa hora del día. Tras la larga oscuridad que había parecido una noche sin final, el paso del tiempo había sido algo relativo y sin importancia, un correr en el reloj que no llevaba hacia ninguna parte.
Agoney había parecido entrar en una especie de letargo, como si su cuerpo hubiese dicho "basta" a tantas emociones. Algo parecido a un tapón que se quita, dejando que el desagüe absorba todo el agua, dejando el recipiente seco. Raoul se movió con lentitud, intentando no alterar demasiado al canario, que mantenía su mirada en el horizonte, desde donde provenían un sinfín de sirenas de los servicios de emergencia.
Se levantó y observó los ángeles que aún quedaban en el suelo, a esperas de que los arcángeles volviesen a por ellos tras encontrar algún lugar donde dejar que descansasen en paz. Nunca les habían caído bien, le parecían estirados, hipócritas y creídos, pero debía reconocer que habían caído con honor.
Caminó entre el mar de escombros, haciéndolos crujir y moverse bajo sus pisadas. Se acercó a su hermano, el cuál se había logrado incorporar un poco para observar el mismo paisaje destruido y en calma que observaban ellos. Tenía una mano en el pecho, tapando la herida que Tinieblas había dejado allí al clavar sus dedos, pero que, por suerte, había estado lejos de ser mortal.
- Ya recuerdo porque no suelo venir a verte –bromeó Peste con dolor y cansancio en su voz, como si el simple hecho de hablar le supusiese un gran esfuerzo.
Raoul se permitió sonreír un poco. Se arrodilló a su lado y le ayudo a recolocarse mejor entre las piedras y trozos de hierro y cemento.
- ¿Estás bien?
- Meh... Me siento mejor cuando soy yo el que hace daño, para que te voy a mentir —le devolvió la sonrisa y se señaló a herida— ¿Podrías..?
- Claro
Raoul asintió y puso su mano sobre la herida. En cuestión de segundos, su piel blanca se encontraba íntegra, de nuevo con aquella pátina verdosa reluciendo levemente.
- Gracias —suspiró algo más aliviado, luego se quedó mirando el ala de su hermano, algo raspada en la parte superior, dejando ver un color rojizo sin plumaje y un poco más baja que la otra, claramente dislocada— A ver, ven
Se inclinó hacia su hermano y tocó su ala, dejando que un halo verdoso la envolviese. Cuando desapareció, también lo hicieron las heridas. Raoul se quedó mirándola y se atrevió a intentar agitarla un poco, comprobando que podía moverla bien y expandir su plumaje sin dolor alguno.
- Ahora soy yo el que dice gracias
Se puso en pie y le ofreció una mano. Peste la aceptó y se impulsó hacia arriba para levantarse.
- ¿Cómo está? –preguntó el jinete verde señalando a Agoney con la cabeza.
- Destrozado
- ¿Crees que se recuperará? He visto a humanos quedarse vegetales por tener un mínimo contacto con lo divino y lo sobrenatural y lo que este chico acaba de vivir... No es poco
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La Marca
FanfictionEl cielo y el infierno siempre tuvieron diferencias, aún así, la creación de unas normas lograron mantener durante siglos la paz entre ambos reinos. Sin embargo, si una antigua profecía se cumple, las consecuencias sobre la tierra serán catastrófica...