One shots -Jimin- (Segunda Parte)

¿Tú darías la vida por ella?

- Es muy simple.

Hoseok le miro desde el otro lado de la mesa y negó.

- No lo es. ¿Cómo puedes estar tan segura de él?

Ella se encogió de hombros y luego se dejó caer en el espaldar de la silla.

- Porque lo conozco. Cuando decides tener un compañero, es porque conoces a esa persona. 

- Qué estupidez. Para que necesitar un compañero que te auxilie, si tú solo puedes hacer todo eso.

Ella ladeó la cabeza mientras veía con los ojos entre abiertos a Yoongi.

- Dos cabezas piensan mejor que una. No importa cuánto poder tengas, si logran vencerte, nadie podrá ayudarte.

Yoongi chasqueo la lengua y luego suspiró.

- No necesito de nadie.

Ella se encogió de hombros y Hoseok volvió a mirarla.

- No termino de entenderlo.

Ella se enderezó y le miró brevemente.

- Todos nosotros tenemos la opción de elegir un compañero, mujer o hombre, como tú decidas. Esa persona será uno contigo, serán uno solo, lucharán juntos, se conocerán más a fondo, tendrán un lazo que no pondrán romper por al menos cuatro años hasta que renueven su alianza. Puedes decidir no tener compañero, pero normalmente se intenta buscar otra persona porque resulta más sencillo batallar en duos. Aun así, ambos desarrollarán un nivel de confianza extraordinario. Incluso pueden fusionar sus técnicas y crear su propio modo de batalla.

- Imagínalo como un matrimonio. - Intervino Jungkook. 

Jin río detrás de Hoseok y ella asintió a medias.

- Algo parecido. 

- En este mundo, si no sabes defenderte, no vivirás ni un día.

Hoseok apartó la mirada, incómodo. Taehyung entrecerró los ojos.

- ¿Y cómo estaría seguro de si quiero un compañero? Es decir, como saber si es el indicado.

Ella se enderezó de nuevo y miró hacia la puerta de madera entrecerrada por la que había salido Jimin hace algunos minutos.

- ¿Darías la vida por esa persona?

Él abrió brevemente la boca y luego la cerró, mientras miraba fugazmente a Jungkook diagonal a él y luego volvía los ojos a ella.

- Lo haría.

Ella negó suavemente y luego ladeo la cabeza.

- Tardaste demasiado en responder. - Sentenció. 

Él frunció el ceño y negó.

- Lo haría. - Repitió. 

- Cada segundo vale, cada respiración es un aliento menos. - Se tronó el cuello. - No puedes dudar ni un segundo. 

Taehyung se encogió en su asiento y Jimin entró por la puerta.

- Jimin, ¿tú darías la vida por ella? - El rubio les dio una mirada rápida. 

- Por supuesto. 

Taehyung permaneció con la boca entre abierta y luego hizo un puchero.

- ¿Cómo pueden tener tanta seguridad el uno del otro?

Jimin se acercó hasta la punta de la mesa mientras le sonreía y luego se sentaba a su lado.

- Cuando firmas la alianza es porque ya confías en esa persona. Con los años se hace más fuerte el lazo.

- Como un matrimonio por conveniencia que termina bien. - Zanjó Namjoon. 

Los demás de la sala miraron con el ceño fruncio a Jin mientras él reía estruendosamente.