Tormentosa obsesión

Capítulo 14 -Uno solo-

La noche parece no tener fin y las preocupaciones aumentan, Tulay siente toda la energía, pero curiosamente no le pesa, lentamente abre los ojos y se encuentra con Mustafá a un lado de ella en la cama.

-Príncipe...Ya ha regresado-

-Si... Discúlpame no quería despertarte...-

-No se disculpe, su alteza... Yo debería hacerlo... Por tomarme todas estas libertades con usted-

El sonríe y acaricia su mejilla.

-Tulay... Si no fuese por ti... Tal vez no habría encontrado a la sultana... Y ahora estaría en problemas mas graves... Te lo agradezco mucho-

La mirada tierna y transparente que le dedica hace que su corazón de un vuelco, él era tan honesto y gentil que no recordaba en que momento comenzó a sentir ese calor intenso que desbordaba con clamor de su pecho.

-Príncipe... Estoy lista para darle un hijo... Solo existo para usted... Quiero hacerlo feliz y protegerlo... Yo... Lo amo-

-Tulay... Me encantaría poderte decir lo mismo... Pero... Puedo prometerte... Que cuidare de ti y de nuestro bebe... No permitiré que te toquen un solo cabello... Y... Te haré vivir el paraíso-

-Príncipe...- Pronuncia, la chica mientras cierra los ojos.

La toma por la nuca y se acerca lentamente, le deposita un pequeño beso en los labios seguido de una caricia en la mejilla.

-Tu piel es suave... El terciopelo esta celoso de ella...- Susurra, Mustafá.

La besa con suavidad en el cuello y con la punta de su lengua recorre algunos centímetros de su piel.

-De ahora en mas... Solo pertenecerás a mí...-

Se posiciona sobre ella y va desabotonando la parte de arriba de su vestido, dejando al descubierto sus pechos, toma el izquierdo y lo masajea suave y lentamente, cuando la escucha plañir baja su cabeza y con su boca recorre el otro pecho sin dejar de amasar el primero. Los gemidos de ella se vuelven constantes, pero lucha por silenciarse cubriéndose la boca con las manos y él se detiene, sube hasta quedar frente a ella.

-Por favor... No me prives de esa armonía que sale tus labios-

-Disculpe, su alteza... Es que... Esto es... Nuevo para mi... Yo...-

Pone su dedo indicé en los labios de ella.

-Shhhhhh.... Eso es una señal de que lo estas disfrutando... Y me provoca placer escucharte- Susurra.

Tulay se conmueve, tanto fuego en su interior pero no la quema, tanta ternura y bondad en una sola persona no podía concebirlo, se olvida de sus penas y temores para acercarse a él y darle un beso apasionado esperando hacerle sentir al menos una parte del vibrar en su corazón, también desabotona sus vestiduras y deja al descubierto su torso, trata de sentirlo sobre ella y al momento que la abraza y comparte el calor de su pecho anhela que sus cuerpos se fusionen en uno solo.

Se separan lentamente y disfrutan el sentir sus alientos cálidos rozando el rostro del otro con suavidad, lo que les provoca una sonrisa. Se posicionan frente a frente y ella se retira su vestido y lo despoja de su bata.

-Solo quiero ser parte de usted... Poder sentirlo en mí... Siempre- Espeta, Tulay con la mirada perdida en placer.

Mustafá acaricia el rostro de ella y le besa la frente luego de esto se coloca sobre ella y la penetra lentamente muy atento a sus gestos para estar seguro de su accionar. Ella al principio siente algo de dolor y hace gestos que lo demuestran, pero al verlo que se mueve y actúa según ella lo indica, es cuando por fin empieza a disfrutarlo. Él añade algo de velocidad, al escuchar los gemidos de su compañera se motiva y las estocadas aceleran en fuerza, Tulay, al sentirlo se vuelve consiente de la humedad que emite con cada movimiento, es algo increíble y que no se imagino que sucedería.