Q U I N C E—Está muy temprano... —me quejo.
—¡Párate floja...!
Me levanto de mala gana y hago mis necesidades.
Me pongo algo cómodo, un leggins con un top y mis botas deportivas, ya que vamos a acampar por horas en el bosque. Crystal lleva lo mismo con otro colores.
Desayunamos y emprendemos camino al bosque.Todo es hermoso, su fauna y la flora. Voy junto a la asiática y las gemelas, Aaron está lidiando con la agotada de Stefanía y el señor Arthur y Kim van adelante; la señora Christine se quedó con Shadia.
Tomamos foto por todo el lugar. no dejamos de echar broma.
Nos sentamos a descansar antes de regresar de la excursión.—¿No sintieron los pasos anoche? Según cuenta la casa está embrujada —nos dice Crystal y las gemelas y yo aguantamos la risa, fingiendo asombro.
—¿De verdad espantan? —pregunta Stefanía con temor.
—Si... lo llaman el chamuco despiojado... —exclamamos asombro— aparece por las noches y toma el cuerpo de la persona y le pega los piojos, luego de pegarle los piojos lo somete arrancando pelo por pelo hasta dejarlo completamente calvo y luego de eso lo tortura quitando sus uñas, entre mas larga sea las uñas más fascinación tiene el chamuco despiojado... —Stefanía mira sus largas uñas— algunos cuenta que toca las puertas a media noche y quien la abra no podrá contar la historia... y los silbidos... si se escucha un silbido junto al toque de una puerta es porque vendrá por alguien...
—Eso no puede ser cierto... —dice renuente— anoche dormí bién.
—Mi mamá me contó lo mismo, lo más seguro es no abrir la puerta y si sucede es mejor pedir ayuda... —dice Berkeley.
Seguimos el camino de retorno y llegamos a tiempo para la cena.
Todo estuvo riquísimo. Contamos todas las anécdotas, las veces que Aaron tuvo que cargar a Stefanía porque había un animal indefenso en el camino.Estábamos encerrada en nuestra habitación, Crystal me contaba como le iba en la universidad y lo que le llevó a estudiar.
Escuchamos un grito de la habitación de al lado y nos vimos la cara.
Otro grito se escuchó y salimos averiguar.
Aaron estaba en la puerta de la habitación de Stefanía tocando y confundido llamando por su nombre, tal escena nos causó risa y se nos unieron las gemelas cuando salieron, los adultos de la casa estaban confundido mientras que nosotros nos arrastrabamos de la risa y una loca gritando que el chamuco despiojado venía por ella.—¿Que sucede? —pregunta serio el asiático.
—Nada... —decimos todas.
El trata de abrir la puerta pero estaba con llave, bajó en busca de ella y cuando abrió la puerta nos encontramos a una Stefanía arropada desde los pies a la cabeza orando una plegaria.—¿Stefanía que te sucede?
Ella sale de debajo de las sábanas y nos ve reír y cae en cuenta.
—Ellas me dijeron que el chamuco despiojado espantada y...
—¿Creíste que estaríamos en una casa donde espanta? —dice serio.
—Pues...
—¿Ustedes no tienen nada que hacer? —se dirige a nosotras— ¡tu debes ser la que planeó todo...! —eso fue conmigo— por una vez madura y deja de hacer estupideces... ¡no te soporto Kipling!. Ni siquiera se que haces aquí con mi familia... —se afincó en lo último— mejor anda y molesta la tuya...
¡Auchhh!... La verdad duele.
—Aaron cállate... —ese fue su madre— Shadia la invitó así como tú la invitaste a ella —señala a Stefanía.
ESTÁS LEYENDO
IntensaMente
RomancePor qué no eres como ella.. Aprende a Charlotte.. Esas eran las frases de mi madre, era común en ella. Y Luigi, jamás fue un padre, ni nada cercano a eso. Mi libertad se dió al salir de esa casa. Ya no soy la hija imperfecta de Mónica de Salvatore...